Fidelidad
Te explicamos qué es la fidelidad y cómo se desarrolla en las relaciones humanas. Cómo actúa un infiel y la fidelidad como dios romano.
¿Qué es la fidelidad?
La fidelidad es una de las virtudes más importantes de los seres humanos, en especial cuando se trata de relaciones amorosas estables y duraderas. Ser fiel a la persona que uno eligió para compartir la vida es sinónimo de respeto, comprensión y compromiso.
La fidelidad implica una conexión verdadera con la fuente y está estrechamente relacionada con la lealtad. En el pasado se relacionaba este concepto con el cumplimiento del deber y la fidelidad de una persona hacia un señor o un rey.
La palabra fidelidad proviene del latín fidelitas y refiere al concepto de servir a un dios. Se relaciona con una capacidad del espíritu humano de cumplir las promesas que hemos hecho. Es una virtud que tiene el hombre de cumplir con su palabra.
Hacer una promesa requiere una gran soberanía de nuestro espíritu, ya que implica tomar una decisión acerca de lo que vamos a hacer en un futuro cercano o lejano (en modo de promesa) y comprometernos con ello. Lo que sucederá en torno a esta promesa de cumplir algo no lo podemos prever, por eso es que la fidelidad es tan importante. No importa lo que suceda, sea bueno o malo, la fidelidad lleva a cumplir lo prometido.
Una persona fiel es capaz de cumplir con su promesa, más allá de que sienta diferente en el futuro, se someta a situaciones adversas o piense de manera diferente. Incluso una persona puede arrepentirse de haber hecho una promesa, pero es fiel quien la cumple a pesar de todo. Quien promete, es libre y lo hace a conciencia.
Ver también: Templanza
La fidelidad en las relaciones humanas
Una persona que es fiel con el otro no es capaz de engañar ni traicionar a sus seres queridos. Un ser humano que es fiel, acepta sus compromisos y los cumple. La fidelidad es un valor moral que hace que el ser humano cumpla con su palabra.
En ocasiones esta palabra no es explicitada sino que se sobreentiende en contexto. Por ejemplo, en una relación de pareja, se entiende que ambos deben mantenerse fieles al compromiso de haberse elegido y no engañarse, mentirse o hacerse daño. La fidelidad va más allá de la mera acción del engaño (con otra persona, por ejemplo), también implica el respeto y la comprensión del otro.
El infiel
Una persona infiel es aquella que rompe con el compromiso establecido con una persona para mantener una relación amorosa con otra. En este aspecto, la promesa de unión se rompe y quien es infiel no cumple con su palabra de compromiso con el otro.
Desde el punto de vista religioso, se considera infiel a quien no profesa la religión o fe considerada verdadera, como por ejemplo en relación con el Cristianismo o el Islam.
La fidelidad como dios romano
La fidelidad era considerada como uno de los dioses romanos y fue Numa quien erigió por primera vez un templo y altares en su nombre. A la fidelidad se le ofrecían flores, incienso y vino, pero no se podía sacrificar víctimas. Los sacerdotes de esos templos estaban cubiertos por velos blancos que simbolizaban el candor y envolvían sus manos y cabeza con un manto al ser conducidos en un carro al lugar del sacrificio.
La fidelidad era reconocida por la llave que poseía, el vestido blanco y el perro que se encontraba a su lado. Por lo general, era representada como una mujer con una pequeña canasta de frutos en una mano y espigas de trigo en la otra mano. Las manos unidas también representan la fidelidad.
La fidelidad dentro de la comunicación
En toda relación humana es indispensable la comunicación que requiere que tanto emisor como receptor se entiendan. Varios factores pueden interferir en la comprensión de un mensaje, pero principalmente se trata de una falta de interés en el otro lo que dificulta una buena comprensión.
La fidelidad dentro del ámbito de la comunicación corresponde a la situación en que un comunicador logra lo que desea. La fidelidad de un proceso corresponde con la forma adecuada de codificar y decodificar un mensaje exitoso. La fidelidad de un mensaje se ve afectada por lo que se denomina ruido. Si se reduce el ruido, aumenta la fidelidad. Del mismo modo se reduce la misma si aumenta el ruido.