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Ejemplos de normas morales

Te explicamos qué son las normas morales, con ejemplos. Además, sus diferencias con las normas jurídicas y otros tipos de normas.

¿Qué son las normas morales?

Las normas morales son aquellas con las que la sociedad se regula en asuntos de índole moral, esto es, permiten determinar qué cosas son buenas, justas, deseables, y cuáles no. Se trata de reglas de conducta de contenido ético, que son fomentadas y defendidas por la misma sociedad: la opinión pública, la costumbre, la presión social, etc.

Es importante comprender que en los asuntos de la moral, el contexto histórico y cultural resulta determinante. Es decir, que las consideraciones morales de una sociedad pueden diferir respecto de las de otra, o respecto de las que esa misma sociedad profesaba en épocas pasadas. La moral es una construcción social, cultural e histórica, que tiene mucho que ver con la tradición y los valores de tipo espiritual y político.

Ver también: Valores morales

Ejemplos de normas morales

Los siguientes son ejemplos de normas morales:

  • Todos tenemos exactamente el mismo derecho a vivir.
  • No debemos mentir o engañar a los demás, sobre todo a las personas queridas.
  • No está bien aprovecharse de una persona desvalida o desesperada.
  • Una vez dada nuestra palabra en un asunto, debemos cumplir con lo prometido.
  • Debemos honrar a nuestros progenitores y a las personas ancianas.
  • Con un gran poder se obtiene también una gran responsabilidad.
  • La propiedad ajena no está a nuestra libre disposición.
  • No está bien coaccionar o forzar a otras personas a hacer algo que no quieren, para el beneficio propio.
  • El respeto por el otro debe primar en las relaciones sociales.
  • La honestidad es uno de los valores superiores del ser humano.
  • Está bien mostrar compasión por el que sufre.
  • Debemos ayudar a los demás a levantar su cruz, pero no cargarla por ellos.
  • No debemos entrometernos en las relaciones amorosas ajenas.
  • No está bien tratar a los demás como objetos desechables.
  • Los niños deben ser preservados en su inocencia lo más posible.
  • El egoísmo y la mezquindad son defectos que afean a las personas.
  • Dad al César lo que es del César y al pueblo lo que es del pueblo.
  • El bienestar colectivo tiene casi siempre prioridad al bienestar individual.
  • Debemos tratar a los demás como nos gustaría ser tratados.
  • No está bien hablar de otros a sus espaldas.
  • Debemos tomar en cuenta los sentimientos de los demás.
  • Mientras más tenemos, más podemos compartir con los necesitados.
  • Debemos tratar a los animales con respeto, sobre todo a aquellos que sienten y sufren como nosotros.
  • El mayor compromiso de toda sociedad debe estar con las generaciones venideras.
  • No se debe ganar indulgencias con escapulario ajeno.
  • Se debe honrar la memoria de los ancestros.
  • No está bien tener relaciones sexuales sin el consentimiento expreso de la otra persona o con alguien que no está en condiciones de darlo.
  • Siempre debemos ceder el asiento preferencial a las personas discapacitadas, ancianas o embarazadas.
  • Un secreto ajeno nunca debe revelarse a terceros.
  • Los padres deben siempre proveer lo necesario para sus hijos y hacerse cargo de su tutela.
  • Debemos mostrarnos agradecidos con quienes nos han hecho un bien y estar dispuestos siempre a retribuirlo.
  • La familia debe estar por encima de todo.
  • Si se comete una mala acción, debemos disculparnos con el afectado y reparar el daño causado.
  • Está bien ser cortés con los desconocidos.
  • No está bien juzgar a los demás antes de conocernos, sin importar su proveniencia, raza, sexo o religión.
  • La humanidad debe vincularse consigo misma de manera fraterna.
  • La libertad es el valor supremo de la vida.

Normas morales y normas jurídicas

Si bien las normas morales y las normas jurídicas forman el conjunto de reglas con el que una sociedad se regula a sí misma, estos dos tipos de normas difieren en su funcionamiento y su naturaleza. Las normas morales, como vimos, responden a las consideraciones sociales y culturales sobre el bien y el mal, lo justo y lo injusto, lo correcto y lo incorrecto, y la sociedad misma las propone y las defiende, a través de la presión social y de la tradición misma.

En cambio, las normas jurídicas distinguen entre lo ilícito y lo lícito, o sea, lo que constituye un delito y lo que no, y el Estado es el encargado de hacerlas valer. Esto puede resumirse de la siguiente manera:

Normas morales Normas jurídicas
Sirven para diferenciar lo bueno de lo malo, lo justo de lo injusto o, en todo caso, lo deseable de lo indeseable en la conducta humana. Sirven para diferenciar lo permitido de lo prohibido, o en todo caso para imponer  derechos y obligaciones.
Están fomentadas por la sociedad de manera informal, a través de la tradición, la presión grupal o la sanción moral. Están fomentadas por el Estado de manera formal y positiva, y son recogidas en textos legales de público conocimiento.
Dependen del contexto social, cultural y religioso de la sociedad, por lo que pueden cambiar significativamente de un sitio a otro, o de una época a otra. Dependen del contexto jurídico de la sociedad, que si bien tiene relaciones históricas y discursivas con lo moral, constituye un mundo aparte. Por eso, los cambios en las normas jurídicas se hacen por consenso y convención, de manera oficial.

Más en: Normas jurídicas

Otros tipos de normas

Además de las normas morales y jurídicas, existen otros tipos de normas, como son:

  • Normas religiosas, provenientes de los discursos espirituales y que tienen la función de regular la conducta humana en base al mandato divino (los mandatos de Dios). Por ejemplo, el judaísmo y el islam prohiben la ingesta de carne de cerdo, al considerarlo un animal impuro.
  • Normas sociales o de etiqueta, son protocolos de conducta “educada” o “correcta” que facilitan el entendimiento entre los seres humanos. Por ejemplo: el apretón de manos se considera en Occidente un gesto estándar de saludo formal y respetuoso.
  • Normas gramaticales, son aquellas normas que rigen a cada idioma, para que todo el que lo hable se vea obligado a manejar un conjunto de reglas similar, y pueda haber entendimiento. Por ejemplo, en español el verbo siempre debe corresponderse con el sujeto oracional.
  • Normas de convivencia, son aquellas que se impone una comunidad en un lugar determinado, en pro de la cohabitación pacífica de las personas, y que sólo son válidas dentro de dicho espacio. Por ejemplo, en una piscina pública hay que respetar los horarios, usar las duchas antes y después de nadar y usar el traje de baño y gorro apropiados.

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Referencias