Leguminosas y Alimentos de Origen Animal
Las leguminosas y alimentos de origen animal son básicos para una dieta adecuada. Las leguminosas o fabáceas son una especie vegetal de la familia Leguminosae, del orden de las fabales. Ejemplos de leguminosas son las lentejas, frijoles, habichuelas, judías, arvejas, habas, soja, altramuz, cacahuete, entre otras. Ejemplos de alimentos de origen animal son el pollo, el cerdo, la carne de res, los huevos o la leche.
Las leguminosas son muy fáciles de reconocer por la forma característica de su fruto, al que comúnmente se le llama legumbre (del latín legumen), por lo que a las leguminosas en general se les llama de manera popular “legumbres”.
Por sus propiedades nutritivas y su relativamente fácil cultivo, son las principales responsables –junto con los cereales- del crecimiento y desarrollo de las poblaciones a lo largo de la historia.
Los alimentos de origen animal también aportan proteínas de alta calidad, indispensables para el desarrollo sano de huesos y músculos.
Además aportan cantidades importantes de hierro, zinc y vitaminas del grupo B y D. Deben consumirse en una proporción menor a los vegetales por su alto contenido de grasas no saludables y su alto índice calórico.
Leguminosas y alimentos de origen animal
Lo que ambos tipos de alimentos tienen en común es, básicamente, su alto contenido proteínico. No obstante, la proteína de origen vegetal se encuentra en cereales y legumbres en concentraciones subóptimas, por lo que para equiparar sus beneficios, la ingesta de leguminosas tendría que ser muy superior a la de la carne.
Una dieta vegetariana complementada con productos lácteos y huevos potenciará la sintetización de proteínas más balanceadas.
Además, la digestión de las proteínas de origen animal suele ser superior a la de las proteínas de origen vegetal. En conclusión: el consumo balanceado de todos los grupos de alimentos es lo que garantiza una vida saludable.
Leguminosas
La característica de las legumbres es que sus frutos tienen forma de vainas en cuyo interior crecen semillas comestibles dispuestas en forma de hilera. A medida que la planta madura, las vainas se secan y nacen las semillas que almacenan alimento para que germine otra planta.
Además de su importancia y beneficios para el cuerpo humano, las leguminosas son de gran importancia para los suelos donde se las cultiva, ya que, a través de los nódulos en sus raíces, son capaces de fijar el nitrógeno de la atmósfera, gracias a la simbiosis con la bacteria Rhizobium.
El año 2016 fue decretado Año Internacional de las legumbres por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), con el fin de destacar la importancia nutricional de estos alimentos y estimular su consumo.
Existen muchísimas especies de leguminosas, pero son realmente pocas las que son utilizadas para la alimentación humana y/o animal, así como para aplicaciones en la industria farmacéutica, cosmética, textil, etc.
Las legumbres tienen diversos orígenes, dependiendo de la especie: desde Mesopotamia, pasando por Asia Oriental, hasta la América precolombina. Se cree que, junto con los cereales, las leguminosas fueron las primeras plantas cultivadas por las antiguas civilizaciones agrícolas.
Las leguminosas más conocidas son las de grano, como las habas, las lentejas, los guisantes, los garbanzos o la soja, pero también existen las leguminosas “forrajeras”, de las que se consume una parte de la planta distinta a la semilla, como pueden ser hojas o tallos. Entre estas se incluyen la alfalfa y la algarroba.
Algunas leguminosas de consumo común en la actualidad son: porotos, soja, arvejas, lentejas, maní o cacahuates, garbanzos, tamarindo, algarroba y alfalfa, entre otras.
Beneficios de las leguminosas
1- Poseen un bajo índice glicémico, por lo que es un buen alimento para incluir en el menú de los diabéticos o personas con problemas de insulina.
2- Tienen bajo contenido graso y alto contenido de fibra que aumenta la sensación de saciedad, ideal para las personas en regímenes dietéticos.
3- Disminuye el riesgo de cardiopatías coronarias, por los efectos positivos de la fibra sobre el colesterol LDL.
4- Algunas de sus vitaminas, como el folato, previene malformaciones congénitas en el feto.
5- Su alto contenido de hierro previene anemias, lo cual se potencia cuando se combina con el consumo de alimentos que contengan Vitamina C, que ayuda a absorber el hierro.
6- Las leguminosas son libres de gluten. Ideal para celíacos.
7- Ricas en antioxidantes y fitoestrógenos que promueven la salud ósea durante el envejecimiento.
Alimentos de origen animal
La dieta básica de todo ser humano está compuesta por una porción de alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, hortalizas, legumbres y cereales) y otra de origen animal.
Dentro de estos últimos se encuentran la leche y sus derivados, huevos y carne de diferentes especies animales, siendo las más comunes la bovina, porcina, ovina y caprina, así como el pescado y otros frutos de mar.
Una dieta balanceada debe incluir alimentos de todos estos grupos de forma equilibrada, aunque es cierto que en las sociedades contemporáneas, este equilibrio suele verse afectado, con la consecuente aparición de enfermedades y desórdenes nutricionales.
Beneficios de los alimentos de origen animal
1-Generan defensas naturales y crean anticuerpos, al complementar aminoácidos fundamentales para el organismo, como la lisina.
2- Rápida absorción de las proteínas: hasta un 90% más fáciles de asimilar que las de las legumbres y vegetales.
3- Son fuentes primordiales de ácidos grasos esenciales como el omega-6 y el omega-3 (este último presente en altas concentraciones en el pescado), muy importantes para la prevención de enfermedades cardiovasculares.
4- Favorece la absorción de calcio.
5- Tienen alto contenido de vitamina B12 (Riboflavina), especialmente en los huevos, y vitamina A como retinol, sólo presente en productos de origen animal.
6- Contribuye a la generación de masa muscular, importante para las personas que realizan entrenamientos físicos o pacientes con padecimientos crónicos degenerativos.
7- Mejora la circulación, oxigena la sangre y eleva o mantiene el conteo de glóbulos rojos.
8- Consumidos en forma de caldos, elevan las defensas naturales del cuerpo y liberan minerales como calcio y fósforo que benefician el sistema óseo y digestivo.
9- El zumo de cartílagos y tendones tiene alto contenido de condroitina y glucosamina, especialmente indicado para la artritis y dolencias de las articulaciones.
Referencias
- Fernando Bas (2014). Los beneficios de los alimentos de origen animal. Revista Agronomía y Forestal N° 49 Pontificia Universidad Católica de Chile. Recuperado de agronomía.uc.cl.
- Beneficios nutricionales de las legumbres (2016). Recuperado de fao.org.
- 8 beneficios de las proteínas animales. Recuperado de salud180.com.
- Alimentación sana: alimentos de origen animal. Recuperado de onmeda.es.
- Leguminosas: Clasificación y propiedades nutricionales. Recuperado de metabolic-balance.es.
- Las leguminosas y sus beneficios para la salud. Recuperado de hablandodenutricion.com.
- Herbario de la Universidad de Navarra. Recuperado de unavarra.es.
- 20 ejemplos de leguminosas. Recuperado de ejemplos.co.
- Diccionario-Glosario Lombricultura y Ag. Orgánica. Recuperado de manualdelombricultura.com.