Botánica

Anthyllis cytisoides: características, hábitat, cuidados, enfermedades


Anthyllis cytisoides, conocida comúnmente como albaida, es una especie arbustiva que pertenece a la familia Fabaceae. Según las regiones también se la conoce como mata blanca, albada o albada vera.

Se considera un arbusto de poca elevación (1 m aproximadamente), con muchas ramas flexibles y cubierto por un tomento blanquecino o grisáceo. Sus hojas de la parte inferior son simples, tienen pecíolo, mientras que las de la parte superior son sésiles y trifoliadas.

Crece en climas mediterráneos, sobre todo en suelos calizos, y no tolera las heladas. Se cultiva como planta ornamental, como melífera, para tratar el asma y es útil en planes de recuperación de suelos degradados.

Sus flores son amarillas, las cuales se caracterizan porque se agrupan en espigas largas, son amariposadas y muy pubescentes. Producen una legumbre ovoide indehiscente y sin pubescencia.

Índice del artículo

Características generales

Aspecto

Esta planta es vista como una especie leñosa que puede llegar hasta metro y medio de altura, pero generalmente alcanza los 0,90 o 1 m.

Las ramas son erguidas y se cubren totalmente de tricomas blanquecinos o grises, y muy apretados que asemejan un tomento de color blanco muy denso.

Hojas

Las hojas de la parte inferior son unifoliadas y presentan un pecíolo de corta longitud, siendo lanceoladas; mientras que las hojas superiores son trifoliadas (el foliolo terminal es más largo que los otros dos) y sésiles.

Flor

Las flores se agrupan en una espiga que contiene 2 o 3 unidades. Se insertan en las axilas de las brácteas y poseen un cáliz tubular, con mucha pubescencia y una corola de color amarillo. Presenta 10 estambres los cuales están soldados de forma tubular en los filamentos. La floración ocurre desde abril a mayo.

Fruto y semilla

Luego de la fecundación, las flores producen una vaina indehiscente, sin tricomas y con manchas rojas a lo largo. Adentro guarda las semillas de color amarillo-verdoso, con forma arriñonada, las cuales maduran desde julio hasta agosto.

Taxonomía

-Reino: Plantae

-Filo: Tracheophyta

-Clase: Magnoliopsida

-Orden: Fabales

-Familia: Fabaceae

-Género: Anthyllis

-Especie: Anthyllis cytisoides

Hábitat y distribución

La albaida es una especie silvestre que se distribuye zonas de clima mediterráneo como España y el noroeste de África. Se considera una buena especie para proteger el suelo de la erosión.

Una de las ventajas de esta planta es que es acumuladora de materia orgánica y, por ende, incrementa el contenido de este componente en el suelo donde crece.

La mata blanca se puede conseguir en colinas de clima árido, zonas secas y que presenten pedregosidad, con suelos ricos especialmente en roca caliza, aunque no tiene preferencia por algún tipo de sustrato.

Esta planta no tolera las heladas, pero sí es capaz de germinar luego de un incendio.

Usos

Se conoce que esta planta es útil en la industria farmacológica para tratar el asma y evitar resfriados. Sin embargo, se debe tener cuidado ya que genera cierta toxicidad.

Asimismo, la albaida se considera una especie melífera. A partir de ellas se obtienen mieles de consistencia ligera de primera calidad, así como de la producida de romero y de azahar.

Además, se usa como especie ornamental para jardines y proyectos de paisajismo, ya que tanto su follaje como sus flores son muy valorados. Igualmente estas plantas son usadas en isletas, y en medio de carreteras. Se usan combinadas con especies tales como Limonium insigne, Phlomis purpurea, Crithmum maritimum, entre otras.

En la antigüedad era usada para elaborar escobas gracias a sus ramas finas, flexibles y lisas. También con las ramas se prendían fuego dentro de los hogares y se creaban marcos para la cría del gusano de la seda.

Cuidados

Propagación

La albaida se multiplica a partir de semilla. Para ello, las semillas deben recolectarse entre los meses de julio y agosto, luego que sus frutos maduren. Después de la recolección, se deben limpiar las semillas mediante trillado y aventado, y posteriormente almacenarlas en frío (4 o 5 °C) y con una humedad del 8% aproximadamente.

La indehiscencia del fruto representa una dificultad para la multiplicación de esta especie, ya que es un poco complejo separar la semilla del fruto. Por esta razón, se requiere hacer tratamientos pregerminativos. Esto tratamientos que se usan son la escarificación con ácido sulfúrico por una hora, y lavar abundantemente luego de ello. Con esta técnica se logra alcanzar hasta el 80% de germinación.

Asimismo, se puede eliminar la cubierta externa de la semilla mediante escarificación mecánica, en la cual se puede alcanzar hasta el 80,8% de germinación. En caso de no realizar ningún tratamiento, se puede optar por sembrar la semilla sin retirarla de la legumbre. En este caso, la germinación ocurre entre los 15 y 20 días.

Se requiere de sustrato arenoso y con buen drenaje. Se pueden sembrar de 4 a 6 semillas por cada celdilla de 15 cm de profundidad. Luego de que las plántulas alcanzan entre 5 y 8 cm, se deben poner en pleno sol para que se tornen robustas.

Igualmente, la albaida se puede sembrar a partir de esquejes tiernos luego del período de floración.

Su importancia ecológica como especie pionera en el restablecimiento de áreas degradadas en el mediterráneo, han llevado a algunos investigadores a propagarla mediante cultivos in vitro a través de explantes juveniles de cotiledones y yemas apicales, así como explantes adultos como yemas axilares. Con ello han obtenido excelentes resultados en el medio de cultivo modificado Shenk y Hildebrandt.

Trasplante

Se recomienda realizar la plantación o el trasplante en la época de primavera para evitar el riesgo de daños por heladas.

Poda

Se recomienda eliminar las hojas secas y flores marchitas, tanto como las ramas débiles o rotas.

Abono

Se puede fertilizar una o dos veces por mes con guano o estiércol. Para ello se puede aplicar un puñado en su base y mezclarlo con la capa superficial de la tierra y luego regarlo.

Riego

Si se encuentra en maceta será suficiente con una o dos veces por semana, mientras que si se encuentra en jardín, se requiere regarlo durante el primer año por una o dos veces a la semana, y luego, con el agua de lluvia (300 mm al año) es suficiente.

Plagas y enfermedades

Esta planta posee gran resistencia ante enemigos naturales. Por ello, las plagas y enfermedades no son un tema de preocupación para el cultivo y uso de este arbusto.

Referencias

  1. Gavidia, I., Zaragoza, C., Segura, J., Pérez-Bermúdez, P. 1997. Plant regeneration from juvenile and adult Anthyllis cytisoides, a multipurpose leguminous shrub. Journal of Plant Physiology 150(6): 714-718.
  2. Flores y plantas. 2018. Anthyllis cytisoides o Albaida. Tomado de: floresyplantas.net
  3. Catalogue of Life: 2019 Annual Checklist. Detalles de la especie: Anthyllis cytisoides L. Tomado de: catalogueoflife.org
  4. López, G. 2004. Guía de los árboles y arbustos de la Península Ibérica y Baleares. 2da ed. Ediciones Mundi-Prensa. 894 p. Tomado de: books.google.co.ve
  5. Sánchez, M. 2019. Anthyllis cytisoides o albaida, una planta bonita y resistente. Tomado de: jardineriaon.com