Animales en peligro de extinción en Yucatán y causas
Algunos de los animales en peligro de extinción de Yucatán son el pavo ocelado, nauyaca nariz de cerdo yucateca, el coatí de nariz blanca y el bolín frentudo. La degradación de los ecosistemas naturales, ocasionada por las diversas actividades humanas, trae como consecuencia el deterioro general del ambiente y la disminución de la biodiversidad, hasta llegar a su extinción.
Yucatán es un estado que se encuentra ubicado al noroeste de la península de Yucatán. Esta ecorregión es una amplia plataforma de piedra caliza, que está extendida más de 100 kilómetros bajo el mar. Así, las aguas de la costa se mantienen calientes, favoreciendo la abundancia de la vida marina.
Los bosques secos de Yucatán están aislados de otros bosques por el mar y por una amplia extensión de bosques húmedos. Según los expertos, dicho aislamiento es el responsable del gran número de especies endémicas de la región, así como de los procesos de la dispersión de los animales y de las plantas.
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El colibrí tijereta (Doricha eliza)
El macho de esta especie mide de 9,5 a 10 centímetros de largo y su peso es de aproximadamente 2,3 gramos. Con relación a la hembra, la longitud total del cuerpo, incluyendo la cola, es de 8,5 a 9 centímetros y la masa corporal tiene un promedio de 2,6 gramos.
El pico es ligeramente curvo y mide casi 1,5 veces el tamaño de la cabeza. La coloración del dorso puede variar entre verde y bronce metálico. La garganta tiene un tono rosado-púrpura metálico brillante. En contraste con estos brillantes colores, el vientre, pecho y cobertoras son blancos.
En cuanto a su distribución, habita en el centro y en la costa norte de la península de Yucatán. También ha sido avistado en el centro de Veracruz, cerca de Xalapa. En ambos estados, el hábitat está bajo una fuerte amenaza, debido al uso de las tierras para la agricultura, ganadería, urbanismos y el turismo.
Esta situación ha ocasionado que las poblaciones del colibrí tijereta estén decreciendo, por lo que la UICN ha catalogado a esta especie dentro del grupo en riesgo de extinguirse.
El pavo ocelado (Meleagris ocellata)
El pavo ocelado es un ave de gran tamaño. Mide entre 70 y 90 centímetros y el peso oscila entre 3 y 4 kilogramos. Es una especie endémica de la península de Yucatán, que se caracteriza por los hermosos tonos de sus plumas.
La coloración, en ambos sexos, es una mezcla de verde iridiscente y bronce. Sin embargo, la hembra suele tener un tono más opaco, con más tendencia al verde.
Con relación a la cola, el plumaje es gris azulado, donde se destaca un círculo en forma de ojo de color azul grisáceo. En el extremo, tiene una mancha azul-bronce y las plumas finalizan en una punta dorado brillante.
El guajolote ocelado o pavo de monte, como también se le conoce a esta especie, tiene la cabeza azul, con verrugas rojas o naranjas. Estas son más notorias en los machos, especialmente en la etapa reproductiva.
Las poblaciones del Meleagris ocellata están amenazadas, por lo que se encuentran vulnerables de extinguirse, según el criterio de la UICN. Esto es debido a la caza furtiva, con fines comerciales o deportivos. Además, el hábitat está fragmentado, por la tala de los árboles y el uso agrícola de los suelos.
El loro yucateco (Amazona xantholora)
El loro yucateco habita en las selvas tropicales caducifolias de la península de Yucatán. También vive en Belice, Guatemala y Honduras. Según la UICN, esta especie mexicana tiene un bajo riesgo de extinguirse de su hábitat natural. No obstante, es importante controlar las amenazas que aquejan su entorno, para que su situación no se agrave.
Amazona xantholora mide de 25 a 28 centímetros de largo y su peso oscila de 200 a 232 gramos. Su cuerpo es redondo y compacto, con una cola cuadrada. De manera general, el plumaje es verde brillante con ligeras manchas negruzcas, que se hacen más notorias en el cuello.
La ardilla de Yucatán (Sciurus yucatanensis)
La ardilla de Yucatán es de tamaño mediano y tiene una cola con un denso pelaje. La coloración puede variar de gris a negro, mientras que el vientre es más claro, de un tono gris amarillento.
Este mamífero se distribuye en las tierras bajas de la península de Yucatán. También vive al norte de Guatemala y al suroeste de Belice. En estas regiones, prefiere los bosques de hoja perenne, los caducifolios y los semiáridos de robles y pinos.
El hábitat natural de esta ardilla se encuentra fragmentada. Esto ha traído como consecuencia que la población del Sciurus yucatanensis esté decreciendo lentamente.
Es por esto que, a pesar que su riesgo de extinguirse es bajo, es de imperiosa necesidad la implementación y ejecución de acciones contundentes, que impidan la agudización de la problemática ya existente.
El coatí de nariz blanca (Nasua narica)
La cola de este mamífero es delgada, midiendo alrededor de un metro de longitud. Así, es casi tan larga como el resto del cuerpo. Además del tamaño, la cola del coatí de nariz blanca se caracteriza porque tiene anillos en un tono más oscuro al de la base.
En cuanto al pelaje, generalmente el área dorsal es parda, aunque hay especies rojizas o amarillentas. La coloración del vientre es mucho más clara que la del cuerpo. Los ojos se encuentran bordeados por un círculo blanco, del cual se prolonga una línea del mismo color que llega hasta el hocico, cuyo extremo también es blanco.
El Nasua narica está amenazado de extinguirse, ya que sobre sus poblaciones impactan negativamente la caza furtiva y la degradación del hábitat donde vive.
La rana ladrona de Yucatán (Craugastor yucatanensis)
Este animal mide alrededor de 34 milímetros de largo desde el hocico hasta la cloaca. Tiene una cabeza aplanada, por lo que es más ancha que larga. En cuanto a las extremidades, son robustas y la punta de los dedos de cada pata se encuentran distendidas, similar a un disco.
El dorso del Craugastor yucatanensis puede ser gris o café-olivo, con manchas oscuras. Con relación al vientre es casi transparente.
Es una especie endémica de la península de Yucatán, habitando el centro norte de Quintana Roo y el centro-este de Yucatán. Dentro de sus hábitats preferidos están las tierras bajas tropicales caducifolias y semi caducifolias.
La UICN ha categorizado a este anfibio dentro del grupo de animales amenazados de extinguirse. Su población se ve afectada por la degradación del hábitat y por las perturbaciones del terreno, debido a los incendios, la construcción de urbanismos y las actividades turísticas.
La salamandra lengua de hongos de Yucatán (Bolitoglossa yucatana)
El cuerpo de este animal es esbelto, con una longitud de 5,3 centímetros, del hocico a la cloaca. En cuanto a la cola, puede ser tan larga como el cuerpo y suele estar engrosada. Esto es debido a que en ella se depositan grandes cantidades de grasa, que el anfibio utiliza en verano, cuando escasea el alimento.
La coloración del dorso es fundamentalmente café, gris, marrón rojizo, con manchas irregulares crema. Este moteado pudiera presentarse de manera tal, que forman una franja que nace en la cabeza y se prolonga hasta la parte posterior. Los lados del cuerpo son café oscuro y el vientre es marrón.
Bolitoglossa yucatana es endémico de la península de Yucatán, donde vive en bosques de espinas y bosques tropicales de tierras bajas. En estas regiones, el anfibio se encuentra amenazado, porque sus hábitats están degradados. Así, el ecosistema se altera, repercutiendo en el óptimo desarrollo del animal
La nauyaca nariz de cerdo yucateca (Porthidium yucatanicum)
Esta serpiente venenosa exhibe un notorio dimorfismo sexual. La hembra adulta tiene un largo aproximado de 46,2 centímetros, mientras que el macho mide 36,8 centímetros. En cuanto a la cola, alcanza entre el 12 y 15% de la longitud del cuerpo.
Tiene una cabeza de forma triangular, donde se encuentran dos pequeños ojos, cuyas pupilas son verticalmente elípticas. Su cuerpo es robusto y está cubierto de escamas. Las dorsales son quilladas y están dispuestas en hileras.
La coloración dorsal es gris, con manchas de tonos café oscuro, borde negro y centro claro. Estos bloques se encuentran separados por líneas amarillas o naranjas. En cuanto a vientre, es amarillento, con algunas manchas oscuras. Con relación a la cabeza, la parte superior es gris, presentando algunas manchas de manera ocasional.
Porthidium yucatanicum se distribuye al norte de la península de Yucatán, ocupando bosques tropicales caducifolios y de espinas, en alturas desde el nivel del mar hasta 150 msnm.
Las comunidades de este ofidio están decreciendo. Esto es debido principalmente a que el animal es perseguido y asesinado por la población local, por representar un peligro para los trabajadores del campo, ya que es una especie venenosa.
Esta situación ha ocasionado que la UICN incluya al nauyaca nariz de cerdo yucateca dentro del grupo de animales con riesgo de extinguirse.
La tortuga de barro de Creaser (Kinosternon creaseri)
El hábitat de este reptil es encuentra en la península de Yucatán, abarcando los estados de Quintana Roo, Yucatán y el norte de Campeche. En estas regiones, vive en cuerpos de agua de poca profundidad, que generalmente se forman durante la época de lluvias. Cuando llega la temporada de sequía, el reptil se esconde debajo de la tierra.
Los investigadores han reportado una leve disminución en las poblaciones de esta especie, por lo que la UICN la considera dentro del grupo de animales de menor preocupación de extinguirse.
Dentro de las amenazas que sufre la tortuga de barro de Creaser está la caza por parte de los pobladores locales. La carne de este animal es consumida gastronómicamente, pero también, conjuntamente con la sangre, es utilizada por los lugareños en el tratamiento de algunas enfermedades respiratorias.
Con relación a las características físicas, el caparazón mide de 11 a 13 centímetros. Es liso, ovalado y levemente elevado en la parte trasera. En cuanto a su coloración, es de color café oscuro, casi negro, mientras que el plastrón es amarillento, con las suturas de color negro. La cabeza, las patas y la cola son gris oscuro.
La gambusia de Yucatán (Gambusia yucatana)
El macho de este pez alcanza una longitud de 5,5 centímetros, mientras que la hembra mide alrededor de 8 milímetros. Su cuerpo es color claro, con un ligero tono amarillo verdoso. La cabeza es más oscura, presentando una coloración verde oliva.
Una de las características distintivas de esta especie está en las aletas. Estas presentan 2 o más filas de pequeñas manchas negras
Gambusia yucatana se distribuye en la vertiente atlántica de México, abarcando desde la cuenca del río Coatzacoalcos hasta el sureste de la península de Yucatán. Suele habitar aguas salobres y frescas de los ríos, aunque pudiera soportan temperaturas de hasta 42,4 °C.
Debido a la contaminación de las aguas donde vive, la especie está perdiendo lentamente su hábitat natural. Dicha situación ha ocasionado que la UICN categorice a la gambusia de Yucatán como de menor preocupación de extinguirse.
Sin embargo, el organismo conservacionista recomienda tomar las acciones necesarias para erradicar las amenazas que aquejan a sus poblaciones.
El bolín frentudo (Cyprinodon artifrons)
Cyprinodon artifrons es una especie costera, que se localiza en el Golfo de México, abarcando la Laguna de Términos y a todo lo largo de la península de Yucatán.
Su hábitat incluye aguas frescas, marinas e hipersalinas en climas tropicales. También, puede vivir en temperaturas entre los 26 y 40 °C y en aguas con una baja concentración de oxígeno disuelto.
El desarrollo de urbanismos y de infraestructuras turísticas han destruido los ecosistemas donde se desarrolla este pez. Es por esto, que dicha especie forma parte de la lista roja de la UICN, por estar considerado en bajo riesgo de extinguirse.
El tamaño es de aproximadamente 4,9 centímetros. La coloración del macho es verde oliva oscuro, mientras que la hembra es más clara. Ambos sexos tienen el vientre blancuzco. A los lados del cuerpo presentan franjas y en el borde de la aleta caudal, tienen una mancha de color negro.
Uno de los mayores impactos lo genera la deforestación de los bosques para utilizar la tierra con fines agrícolas y ganaderos. En este sentido, los bosques secos de Yucatán son talados y sustituidos por otras especies vegetales, como por ejemplo los pastos para ser consumidos durante el pastoreo del ganado.
La fragmentación del hábitat dificulta los procesos de dispersión, limita la accesibilidad al alimento, el éxito del apareamiento y la expansión de las poblaciones hacia otras áreas. Todo esto repercute en el desarrollo de diversas especies animales, causando el aislamiento y su posible extinción.
En las últimas décadas, la región presenta un desbalance en el potencial pesquero y en la explotación de ese recurso. Así, muchas pesquerías, no tradicionales y tradicionales, se encuentran en su máximo nivel, llegando a la sobreexplotación de las especies.
Los manglares, ciénagas, playas, dunas y otros cuerpos de agua, se encuentran fragmentados por la construcción de diques y puertos. Esto modifica el hábitat y todos los procesos naturales que se desarrollan en estos ecosistemas
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