Soluto y solvente: definición, cómo diferenciarlos y ejemplos
¿Qué son el soluto y el solvente?
El soluto y solvente son los dos componentes que al mezclarse generan una solución o disolución. La solución es una mezcla homogénea, que puede ser líquida, gaseosa o sólida. En el caso de las soluciones líquidas, el solvente es un líquido, mientras que el soluto puede ser una sustancia en cualquiera de los estados físicos (líquido, gas o sólido).
Soluto
El soluto suele ser el componente minoritario de una disolución. Decimos entonces que el soluto se disuelve en el solvente o que el solvente disuelve al soluto.
Por ejemplo: la limonada es una solución. Como es líquida y acuosa, su solvente es el agua. Mientras, el zumo de limón y el azúcar, que definen su sabor, son los solutos, pues los adicionamos al agua para mezclarlos y preparar la limonada.
Solvente
El solvente o disolvente es el componente donde se disuelve el soluto. Suele ser el componente mayoritario de las soluciones y solvente más común es el agua.
El solvente es el componente que define si una solución es líquida, gaseosa o sólida. Una solución gaseosa tendrá un solvente gaseoso, y de igual modo tenemos que las soluciones sólidas tendrán solventes sólidos.
Forma fácil de diferenciarlos
Generalmente, el solvente predomina sobre el soluto: hay más solvente que soluto. Tiene sentido, porque puede ocurrir que un exceso de soluto ocasione que el solvente se sature, que no pueda disolver más soluto. En dicho caso, ya no tendríamos una solución, sino una mezcla que no es homogénea.
Aun cuando el soluto pueda estar a veces en mayor proporción (que sea por ejemplo extremadamente soluble en el solvente), el estado o fase material de la solución vienen definidos por el solvente.
Es por eso que en todos los jugos, los cuales son soluciones acuosas, el solvente es el agua: los jugos son líquidos porque el agua, su solvente, es líquida. Además, el solvente es el componente que disuelve al soluto.
En una taza de chocolate con leche, la leche y el chocolate en polvo no disuelven al agua; si así fuera, veríamos que el polvo hiciera desaparecer al agua. En su lugar, el agua se va tornando de color achocolatado mientras el polvo de chocolate y la leche empiezan a “desaparecer”. Esto significa que el agua, que es el solvente, ha disuelto el chocolate y la leche, los solutos.
El soluto por lo tanto es el componente que “desaparece”, y que se disuelve por todo el volumen del solvente.
Ejemplos de solutos
Pigmentos y colorantes
Cuando se disuelven en el agua o aceite los pigmentos y colorantes se obtienen soluciones coloridas. Como sus cristales o polvo granulado “desaparecen”, son solutos, ya sea que estén coloreando líquidos o vidrios.
Sal
La sal se disuelve en el agua para generar soluciones saladas. En los mares, las sales están disueltas en inmensos volúmenes de agua.
Azúcar
El azúcar se disuelve en el agua para generar soluciones dulces o azucaradas. Es uno de los solutos más conocidos, pues se adiciona a muchas bebidas para endulzarlas aún más.
Oxígeno
El oxígeno, un soluto gaseoso, está disuelto en el aire que respiramos, formando siempre parte de él en la atmósfera. Representa alrededor del 21 % del aire.
Dióxido de carbono
El dióxido de carbono, otro soluto gaseoso, también está disuelto en el aire, así como en el agua para generar bebidas carbonatadas (gaseosas o refrescos).
Etilenglicol
El etilenglicol, un soluto líquido, se agrega al agua durante la preparación de los anticongelantes.
Vapor de agua
El vapor de agua también se considera un soluto gaseoso, porque cuando se libera de las calderas va a mezclarse en el aire junto a otros gases.
Etanol
El etanol, un alcohol líquido, se disuelve en el agua para generar soluciones alcoholizadas. En las cervezas, por ejemplo, el agua es el solvente, mientras el etanol, y otros ingredientes, son los solutos.
Hipoclorito de sodio
El hipoclorito de sodio, una sal, se disuelve en el agua para generar las famosas lejías o soluciones cloradas con las que se blanquean las telas o se desinfectan superficies.
Ejemplos de solventes
Agua
El agua es capaz de disolver muchas sustancias, y al ser muy abundante en la Tierra, se le considera el solvente universal. Todas las soluciones o fluidos de los seres vivos son de naturaleza acuosa.
Nitrógeno
En el aire, el nitrógeno es el componente o gas principal. Representa alrededor del 79% del aire. Por lo tanto, es el solvente del aire, donde se disuelven otros gases como el oxígeno, el argón, el dióxido de carbono, entre otros.
Hierro
Al hierro fundido se le adicionan carbono u otros metales en el proceso de formación de los aceros.
Metano
Similar al ejemplo del nitrógeno, el metano es el gas predominante del gas natural o de cocina, por lo que viene a ser el solvente de esa mezcla o solución gaseosa.
Mercurio
El mercurio se mezcla con otros metales en la formación de las amalgamas. Es por lo tanto un solvente metálico y líquido de color negro.
Acetona
La acetona es otro buen ejemplo de solvente, pues disuelve el esmalte de las uñas, o la espuma de polietileno.
Hexano
El hexano es un solvente orgánico que se utiliza para desengrasar, y en la extracción de esencias vegetales.
Tolueno
El tolueno es otro solvente orgánico con muchas aplicaciones industriales, las cuales abarcan desde la formulación de gasolina y pinturas, hasta como solvente de petróleo.
Cobre
Similar a como sucede con el acero y el hierro, en el bronce el cobre es el componente mayoritario. Por lo tanto, en el bronce el cobre actúa como solvente, mientras que el estaño es el soluto. Asimismo, en la aleación de latón el cobre es el solvente, siendo esta vez el zinc el principal soluto.
Etanol
Finalmente, en el apartado anterior vimos al etanol como soluto. Sin embargo, puede actuar como solvente, ya que también tiene la capacidad de disolver algunas grasas o sustancias orgánicas.