Arte

Arte tridimensional: concepto, historia, características y obras


¿Qué es el arte tridimensional?

El arte tridimensional se caracteriza por la creación de obras con tres dimensiones: alto, ancho y largo. Al igual que el arte bidimensional, la creación tridimensional es tan antigua como el hombre mismo. En la prehistoria el hombre modeló objetos de arte con fines mágico-religiosos, y como herramientas de trabajo y defensa.

Las expresiones más representativas son principalmente la escultura y la arquitectura, pero también se encuentran representantes en la pintura gracias a la perspectiva y al manejo de las sombras a través de la luz. En la escultura el arte tridimensional se presenta en forma de tallas (piedra o madera), modelado (arcilla, cera), fundición y soldadura.

También se aprecia en la producción de figuras abstractas o figurativas, como el huecograbado, el relieve o la ronda. En la arquitectura los primeros monumentos de piedra construidos por las sociedades primitivas son los antecedentes más lejanos del arte tridimensional.

Dichos monumentos se construyeron con fines de abrigo y culto religioso, después como símbolos de desarrollo, poder y, desde luego, belleza.

Historia del arte tridimensional

Desde la prehistoria el hombre ha construido monumentos de piedra para celebrar sus ritos religiosos, como fue el caso de Stonehenge en Inglaterra. También realizó el tallado de utensilios y herramientas de uso cotidiano para cazar y defenderse.

Asimismo, el ser humano se valió de la arquitectura para construir viviendas donde pudiera protegerse del frío y de los animales.

Los primeros objetos de arte prehistórico fueron creados en el Paleolítico inferior. El hombre fabricó flechas (bifaz) y cuchillos de sílex utilizando otras piedras; con estos utensilios podía defenderse. Estos instrumentos también le permitían cazar, descuartizar y cortar la carne de los animales.

Escultura y arquitectura

La escultura, como arte tridimensional más representativo desde los tiempos prehistóricos, tuvo como inspiración fundamental la figura humana. En el hombre surgió el deseo de crear piezas de arte que representaran y perpetuaran en el tiempo la fisionomía y la belleza de sus semejantes.

Con el desarrollo de la civilización se fueron empleando más las figuras humanas, femeninas y masculinas, que en ocasiones eran mezcladas con animales. A través de estas se representaban dioses como los de Mesopotamia o reyes, como fue el caso de los egipcios.

Después, con el dominio de las técnicas arquitectónicas, la geometría y la ingeniería, fue posible la construcción de las primeras obras emblemáticas; por ejemplo, los megalitos construidos principalmente en el período Neolítico.

Más tarde fueron creadas las obras monumentales representativas del arte tridimensional, como lo son las pirámides egipcias junto con la arquitectura mesopotámica (sumeria), asiria, babilónica, etrusca y minoica. También se desarrollaron las arquitecturas micénica, egea y persa.

En la Antigüedad clásica, la arquitectura y la escultura griega marcaron un hito histórico en las artes por su perfección y belleza.

Luego se desarrolló el arte romano, hasta llegar a la Edad Media, cuando se produjo una revolución en el arte tridimensional. Hasta entonces la pintura bidimensional había sido la única forma de arte plástico conocido.

Pintura

Con el descubrimiento de la perspectiva por los artistas italianos Duccio y Giotto (siglos XIII y XIV), el arte entró en su etapa tridimensional.

La pintura adquirió una nueva dimensión: la profundidad, a través del manejo de la luz y el sombreado. Esta técnica se perfeccionó durante el Renacimiento y continuó hasta la actualidad.

Características del arte tridimensional

– Las obras de arte tridimensional tienen tres dimensiones: alto, ancho y profundidad, cuyas formas pueden ser geométricas y orgánicas.

– Pueden ser apreciadas desde cualquier ángulo o perspectiva, a diferencia de las obras de arte bidimensionales, que solo pueden ser vistas de frente.

– El volumen de las obras es real, como es el caso de la escultura y la arquitectura. La pintura es una excepción, puesto que el volumen y la profundidad son simulados a través de sombras y luces.

– Las técnicas de arte tridimensional se aplican en cualquier superficie o material que sirva para esculpir o construir una estructura. Con el desarrollo de la industria cinematográfica ya es posible aplicarlas también en las imágenes de cine: en las películas en 3D y en las imágenes digitales.

– En el caso de la escultura como arte tridimensional, uno de sus temas principales ha sido la representación de la figura humana.

– Los materiales empleados para la creación de las obras son muy variados en su textura y naturaleza: piedra, metales, cera, arcilla, pinturas, etc.

– El lenguaje plástico del arte tridimensional creado a través de la escultura o la arquitectura es muy similar entre sí. Se diferencia de otras formas tridimensionales de arte como la pintura en su expresión tridimensional o bidimensional.

– Las obras tridimensionales en su mayoría carecen de fondo. En su lugar tienen entorno y descansan sobre su propia superficie.

Obras destacadas

A continuación algunas obras muy significativas y destacadas del arte tridimensional en distintas épocas de la historia del arte:

La Piedad del Vaticano

Se trata de una de las obras más conocidas del artista italiano Miguel Ángel, realizada entre 1498 y 1499.

Stonehenge

Este monumento megalítico de tipo crómlech fue erigido a finales del período Neolítico, hace unos 5 mil años. Está situado a poca distancia de Amesbury, en Wiltshire, Inglaterra.

Aún no se sabe a ciencia cierta las razones de su edificación y posterior abandono, pero se cree fue por motivos rituales.

Pirámides egipcias

Keops, Kefrén y Micerino son las obras arquitectónicas más importantes del arte tridimensional egipcio. Están levantadas en la meseta de Guiza, a las afueras de El Cairo. Fueron construidas hacia el año 2500 a. C., en una etapa anterior a las pirámides clásicas, durante la dinastía IV.

El Partenón

Es uno de los más importantes templos griegos perteneciente al orden dórico, que fue construido en la acrópolis de Atenas entre el 447 a. C. y el 432 a. C.

David de Miguel Ángel

Es una escultura de mármol blanco que mide 5,17 metros​ de altura y pesa 5572 kilogramos. Fue esculpida por el pintor y escultor italiano Miguel Ángel Buonarroti entre los años 1501 y 1504. Está exhibido en la Galería de la Academia de Florencia.

Figura reclinada de Henry Moore

Esta obra, junto con Viento norte (1928) y Virgen con el Niño (1949), es una de las más importantes del escultor inglés Henry Moore (1898-1989).

El trabajo de Moore recibió diversas influencias de estilos de arte, desde el precolombino hasta el surrealista. En su trabajo destacan las obras abstractas y figurativas, alternando el vacío con formas geométricas planas, cóncavas y convexas.