Animales

Nematodos: características, clasificación, reproducción, nutrición


Los nematodos son un grupo de animales que se caracterizan por tener un cuerpo cilíndrico, sin segmentaciones. Estos seres vivos se encuentran muy bien distribuidos por todo el globo terráqueo, aunque principalmente están en ambientes tropicales.

Fueron descritos por primera vez en 1808 por el zoólogo sueco Karl Rudolphi y abarcan aproximadamente unas 20.000 especies que se pueden encontrar en hábitats terrestres y acuáticos.

La mayoría de los nematodos tienen un estilo de vida parásito, por lo que requieren de un huésped para poder desarrollarse. Muchas especies de nematodos son agentes causales de ciertas enfermedades, las cuales afectan principalmente el tracto digestivo del huésped, así como también su piel.

Índice del artículo

Características

Los nematodos son organismos eucariotas, cuyo ADN se encuentra encerrado dentro del núcleo celular, formando los cromosomas. Su número es variable dependiendo de la especie.

Son organismos triblásticos, porque durante su desarrollo embrionario presentan las tres capas embrionarias conocidas: ectodermo, mesodermo y endodermo. A partir de esas capas se originan los diferentes tejidos y, por consiguiente, los órganos que conforman al individuo adulto.

Tienen simetría bilateral, lo que quiere decir que están conformados por dos mitades exactamente iguales, tomando como punto de partida una línea imaginaria en el eje longitudinal del cuerpo de animal.

Son animales pseudocelomados, ya que tienen una cavidad interna denominada pseudocele, la cual no es de origen mesodérmico.

La mayoría de las especies son dioicas, aunque hay algunas otras que son hermafroditas. Se observa en ellos la reproducción asexual y sexual, siendo esta última la más frecuente y común.

Además son mayoritariamente ovíparos (se reproducen a través de huevos) y casi todos tienen un desarrollo indirecto, ya que de los huevos emergen larvas que requieren algunos cambios o mudas para alcanzar el estadio adulto.

Taxonomía

La clasificación taxonómica de los nematodos es la siguiente:

-Dominio: Eukarya

-Reino: Animalia

-Superfilo: Ecdysozoa

-Nematoida

-Filo: Nematoda

-Clases: Adenophorea

-Secernentea.

Morfología

– Anatomía externa

Los nematodos desarrollan un cuerpo vermiforme, que no presentan cilios y tampoco segmentos. Son de color blanquecino.

El cuerpo dispone de un pared que está conformada por varias capas, siendo estas (desde la más externa a la más interna): cutícula, epidermis, musculatura y pseudocele. Así mismo, el cuerpo tiene un extremo anterior y uno posterior.

En el extremo anterior se localiza la abertura bucal, la cual puede estar rodeada de unos labios o dientes. El extremo posterior es diferente en hembras y machos. En estos últimos termina generalmente en una curvatura y además presenta unas estructuras conocidas como espículas, las cuales son utilizadas durante la cópula.

– Anatomía interna

Sistema digestivo

El sistema digestivo de los nematodos es completo, con un orificio de entrada (abertura bucal) y un orificio de salida (ano).

La cavidad bucal se encuentra rodeada de algunas estructuras como labios y dientes, entre otros. Esto va a depender del tipo de alimentación según la especie. Inmediatamente después viene la faringe, la cual normalmente se encuentra cerrada. Solo se abre para el paso del alimento.

Después de la faringe se encuentra el intestino, que es donde se absorben los nutrientes y el cual finalmente termina en el ano.

Sistema nervioso

Está conformado por fibras nerviosas longitudinales que se desprenden de un anillo que rodea a la faringe. Así pues, tiene una estructura bastante sencilla.

Sistema excretor

El sistema excretor no es igual para todos los nematodos. Algunos pueden tenerlo tubular y otros de tipo glandular.

En el sistema excretor tubular, hay dos túbulos, los cuales se conectan mediante una especie de comisura.

Por otra parte, el sistema excretor glandular se caracteriza por presentar dos células renales que son grandes y desembocan en un poro excretor.

Sistema reproductor

El sistema reproductor femenino, dependiendo de la especie, puede presentar uno o dos ovarios, los cuales se conectan con un oviducto, el cual desemboca en un receptáculo seminal y finalmente en el gonoporo.

En el caso del sistema reproductor masculino, hay un testículo, un vaso deferente, la vesícula seminal y el conducto eyaculador. Además de esto, presentan las espículas copuladoras.

Clasificación

El filo Nematoda se clasifica en dos grandes clases: Adenophorea y Secernentea. Entre ambas abarcan un total de 5 subclases, 2 en Adenophorea y 3 en Secernentea.

– Clase Adenophorea

Son un grupo de nematodos que presentan ciertas características tales como: órganos sensoriales setosos, cinco glándulas esofágicas o quizás más.

También tienen órganos sensoriales posteriores que se conocen como anfidios postlabiales, que a su vez están conformados por sacos. Tienen papilas sensoriales distribuidas por todo el cuerpo. Sus cuerpos se encuentran recubiertos por una especie de cutícula muy resistente que está conformada por cuatro estratos.

Además, cuando tienen un sistema excretor, este no tiene canales laterales, sino solo células ventrales, que pueden estar en número de una o más. En ocasiones está totalmente ausente.

Pueden encontrarse en cualquier tipo de hábitat, ya sea terrestre, marino o de agua dulce. Un gran porcentaje de sus especies es de vida libre, aunque también hay parásitos importantes.

Esta clase abarca dos subclases: Enopila y Chromadoria.

Subclase Enopila

Los miembros de esta subclase de nematodos se caracterizan porque sus cuerpos son lisos, sin ningún tipo de líneas ni anillos. Además de esto, sus órganos sensoriales anteriores, conocidos como anfidios, están muy desarrollados y pueden tener forma de óvalos, estribos o bolsas.

La mayoría de estos son de vida libre, sin embargo, a esta subclase pertenecen algunos órdenes dentro de los cuales hay nematodos parásitos que obligatoriamente deben estar dentro de su huésped para sobrevivir.

Esta subclase abarca seis órdenes: Mermithida, Dorylaimida, Enoplida, Muspiceida, Trichiurida y Trichocephalida. De estas, las más conocidas y estudiadas son Enoplida y Dorylaimida.

Subclase Chromadoria

Los nematodos de esta subclase tienen tres glándulas esofágicas, además de presentar una faringe mucho más desarrollada y compleja que la de otros nematodos.

Sus cuerpos no son lisos en su totalidad, sino que se hace evidente la presencia de anillos en su superficie. Este es un elemento distintivo con respecto a la otra subclase, Enopila. En ocasiones su cutícula puede tener algún tipo de proyecciones o setas.

También tienen un sistema excretor que puede ser de dos tipos: glandular o tubular. Los ejemplares que son de sexo femenino tienen de uno a dos ovarios. Cuentan con órganos sensoriales anteriores (anfidios) muy elaborados que generalmente tienen forma de espiral.

Esta subclase a su vez comprende siete órdenes: Plectida, Menhysterida, Desmodorida, Chromadorida, Araeolaimida, Rhabditida y Desmocolecida.

– Clase Secernentea

Su nombre es una palabra derivada del latín cuyo significado es un órgano excretor. El aparato excretor es de tipo tubular. Su cuerpo se encuentra revestido por una cutícula en cuya superficie se pueden apreciar estrías radiales de tipo basal.

Además, su cutícula presenta varias capas (generalmente 4). Los anfidios, que son sus órganos sensoriales principales, se encuentran localizados en la parte lateral.

Los nematodos que pertenecen a esta clase son un excelente ejemplo de dimorfismo sexual, en el que hay marcadas diferencias morfológicas entre hembras y machos.

Con frecuencia, las hembras son de mucho mayor tamaño que los machos y estos presentan ciertas estructuras que emplean para la cópula, como por ejemplo espículas en el extremo terminal de su cola. Así mismo, la cola de las hembras suele terminar en punta, en tanto que la de los machos lo hace en una característica curva.

Esta clase se clasifica en tres subclases: Spiruria, Diplogasteria y Rhabditia. Sin embargo, hay especialistas que no consideran esto como tal, sino que pasan directamente a los órdenes que se encuentran dentro de la clase Secernentea. De acuerdo a ello, los órdenes que forman parte de esta clase son: Strongylida, Rhabditida, Ascaridida, Spirurida, Diplogasterida, Tylenchida, Drilonematida y Camallanida.

Tomando en cuenta esto, a continuación se van a describir los órdenes más representativos.

Orden Ascaridia

A este orden pertenecen algunos de los parásitos más conocidos, como por ejemplo Ascaris lumbricoides y Enterobius vermicularis. Entre sus características representativas se pueden mencionar la presencia de tres labios alrededor de la abertura oral y aletas a ambos lados del cuerpo. Son de color crema y de aspecto robusto.

De manera general, estos parásitos tienden a alojarse en el intestino delgado de mamíferos como gatos, perros e incluso el ser humano.

Orden Spirurida

Los organismos de este orden se caracterizan por presentar solo dos labios alrededor de la boca. Su esófago se encuentra dividido en dos porciones: una posterior, que es larga y de naturaleza glandular y una anterior, de corta longitud y de tipo muscular.

Son de vida parasitaria, y la mayoría de las veces requieren, para completar correctamente su ciclo de vida, de la intervención de algún artrópodo, como por ejemplo la mosca del género Chrysops que participa en el ciclo del parásito Loa loa.

Sus órganos sensoriales anteriores (anfidios) tienen una localización lateral. Este orden abarca un total de 10 superfamilias, de las cuales, la más conocida es Filarioidea.

Orden Rhabditida

A este orden pertenecen gusanos de vida libre, así como también zooparásitos (parásitos de animales) y fitoparásitos (Parásitos de plantas). Algunos de los parásitos habitan en el intestino de mamíferos y son capaces de generar enfermedades como la estrongiloidiasis.

Presentan una cutícula delgada, que tiene algunos anillos, así como también estrías en sentido longitudinal.. Son de color blanquecino. Pueden llegar a tener hasta seis labios alrededor de la boca. Abarca unas 9 superfamilias.

Orden Strongylida

Los nematodos de este orden son de gran importancia en la medicina veterinaria, ya que muchos de ellos son agentes causales de patologías en mamíferos como el cerdo, caballo y animales rumiantes.

La cápsula bucal de estos animales es de forma y tamaño variables. Los machos presentan una estructura conocida como bursa copulatriz. Además de esto, aquí se pueden encontrar organismos cuyos ciclos de vida son directos y otros con ciclos de vida indirectos que requieren de un huésped intermedio para poder desarrollarse.

Este orden está conformado por 7 superfamilias, las cuales agrupan a un total de 27 familias.

Reproducción

En los nematodos se pueden observar los dos tipos de reproducción: la asexual y la sexual, siendo la segunda la más común. Sin embargo, hay especies en las que es más frecuente la asexual.

Reproducción asexual

La reproducción asexual es aquella que no involucra la fusión de ningún tipo de células sexuales, por lo que no es necesaria la interacción entre dos individuos.

Existen muchos mecanismos de reproducción asexual. Sin embargo, en los nematodos el que se más se observa es la partenogénesis. Este es un mecanismo que consiste en que las células reproductoras femeninas (óvulos) comienzan a experimentar una serie de divisiones mitóticas hasta que se convierte en un individuo adulto. Se cree que es inducida por ciertas condiciones ambientales.

Reproducción sexual

La reproducción sexual es la que más se observa en los nematodos. El fundamento de este tipo de reproducción es la fusión o unión de gametos (células sexuales) masculinos y femeninos con la finalidad de generar un nuevo individuo.

En los nematodos este tipo de reproducción contempla la fecundación de tipo interna. Esta consiste en que la fecundación ocurre en el interior del cuerpo de la hembra.

La mayoría de los ejemplares machos presentan unas estructuras conocidas como espículas, las cuales, en ocasiones se encuentran asociadas a bolsas copulatorias. Estas espículas son utilizadas como órgano copulador, a través del cual el macho introduce sus gametos masculinos en el interior del cuerpo de la hembra para dar lugar a la fecundación.

Así mismo, los nematodos son organismos ovíparos, lo que quiere decir que se reproducen por huevos. Una vez que ocurre la fecundación, las hembras son capaces de producir miles de huevos. Algunas especies incluso pueden llegar a producir millones de huevos.

De los huevos emergen larvas que, para llegar a convertirse en un nematodo adulto, necesitan atravesar por diversos procesos de transformación o mudas. Gracias a esto, es posible afirmar que los nematodos son animales que presentan un desarrollo indirecto.

Nutrición

Los nematodos son organismos heterótrofos, ya que no tienen la capacidad de sintetizar sus propios nutrientes. Tomando en cuenta que son parásitos, estos se alimentan a expensas de sus huéspedes, de acuerdo a diversos mecanismos.

Hay algunos nematodos que se fijan al intestino del huésped y se alimentan de la sangre que absorben allí, por lo tanto son hematófagos.

Así mismo hay otros que, a pesar de que se alojan en el intestino del huésped no se fijan a la pared del intestino para absorber sangre, sino que se alimentan mediante un proceso de absorción por todo su cuerpo. Estos se alimentan de los nutrientes ingeridos por su huésped.

Igualmente, hay nematodos que son parásitos de plantas y se fijan principalmente en sus raíces, alimentándose de los nutrientes de la planta y de sus tejidos internos, a los cuales van destruyendo paulatinamente.

Nemátodos en animales

Muchos nematodos constituyen parásitos de animales, principalmente de mamíferos como perros, gatos, coyotes, roedores e incluso el ser humano. La mayoría se fija en el intestino y se alimenta de la sangre de su huésped, ocasionándole, entre otras cosas, anemia, así como también trastornos de índole intestinal.

Trichuris trichiura

Este parásito pertenece al orden Trichurida. También se conoce como gusano látigo, debido a su forma. Es cilíndrico, con una parte muy ancha y otra muy delgada. Son endoparásitos que se encuentran principalmente en el intestino de algunos primates, como el ser humano.

Es el responsable de la tricuriasis. Esta es una enfermedad en la que se ve notablemente afectado el tracto digestivo, con síntomas como pérdida del apetito, diarrea con heces impregnadas de sangre y dolor fuerte abdominal. Si los parásitos son muchos, puede haber un prolapso rectal o una obstrucción.

Necator americanus

Es un parásito perteneciente al orden Strongylida. Como todo parásito, requiere de vivir en el interior de un huésped. En este caso, sus huéspedes más frecuentes son el ser humano y otros mamíferos como perros o cerdos.

Son propios de ambientes tropicales, en los que las condiciones de humedad y temperatura son las ideales para permitir que sus huevos se desarrollen y se formen sus larvas. Son bastante pequeños, ya que apenas llegan a medir hasta 1,5 cm.

La enfermedad que ocasiona es la necatoriasis, conocida también como anquilostomiasis. Los síntomas que presentan son bastante variados, dependiendo del órgano al que afecte. Pueden desarrollar síntomas a nivel de la piel, pulmones y sangre, entre otros.

Ascaris lumbricoides

Es uno de los parásitos intestinales más conocidos y estudiados. Pertenece a la clase Secernentea. Se encuentra entre los nematodos más grandes, ya que la hembra puede llegar a medir hasta 30 cm y el macho unos 20 cm.

Ascaris lumbricoides es el agente causal de una enfermedad conocida como ascaridiasis. Esta presenta síntomas a nivel del intestino, como diarrea, vómitos y heces sanguinolentas; también hay síntomas pulmonares o respiratorios tales como tos crónica, dificultad para respirar adecuadamente y fiebre elevada.

Esta es una parasitosis que debe atenderse con la mayor celeridad posible, ya que de no ser así, los parásitos siguen desarrollándose y creciendo en el intestino, pudiendo llegar a ocasionar una obstrucción intestinal, con consecuencias que incluso pueden ser fatales.

Enterobius vermicularis

Este parásito es bastante frecuente en la población, especialmente entre los niños. Pertenecen a la familia Oxyuridae, por lo que también son conocidos como oxiuros.

Su ciclo de vida se lleva a cabo enteramente en el cuerpo del ser humano. El síntoma principal de la infección por este nematodo es el intenso prurito (o picazón) anal. Esto es ocasionado por la presencia de los huevos en los pliegues del ano.

La infección por este parásito es un poco difícil de erradicar, ya que la reinfección es constante, puesto que la persona tiende a rascarse el orificio anal, adquiriendo los huevos microscópicos bajo las uñas y al llevarse las manos a la boca, los vuelven a ingerir.

Ancylostoma duodenale

Ancylostoma duodenale es un nematodo que tiene como principal huésped al ser humano. Es el principal responsable de una enfermedad conocida como anquilostomiasis.

Esta enfermedad es bastante común, especialmente en las zonas del mundo en las que es difícil extremar las medidas de higiene. En el ser humano ocasiona daños en la mayoría de los órganos del cuerpo, como la piel, los pulmones, el tracto digestivo y el corazón.

Esos daños vienen dados por el tránsito de las larvas a través de esos órganos y por la fijación de los parásitos adultos a la pared intestinal absorbiendo la sangre de su huésped.

Toxocara cati y Toxocara canis

Estos son dos nematodos muy parecidos que tienen como huéspedes a mamíferos como los perros y gatos. En estos ocasionan síntomas intestinales como por ejemplo diarrea, estreñimiento e incluso, si la parasitosis es muy intensa, puede generar una obstrucción a nivel del intestino.

A pesar de que son parásitos propios de esos animales, ocasionalmente pueden infectar al hombre, en el que pueden ocasionar infecciones de larga data que eventualmente deterioran en gran medida órganos como los ojos, el hígado, pulmones y cerebro, entre otros.

Nemátodos en plantas

Algunos de los nematodos que se conocen en la actualidad constituyen auténticas plagas para los cultivos agrícolas. Esto se debe a que tienen como huéspedes a ciertas plantas, a cuyas raíces se fijan, alimentándose de ellas y dañándolas en una gran proporción.

Meloidogyne incognita y Meloidogyne javanica

Estos son unos nematodos que afectan en gran medida a diversa cantidad de plantas, ocasionando daños que eventualmente conllevan a su muerte.

Entre las consecuencias de una infección por estos nematodos en las plantas se pueden mencionar: clorosis, atrofia del crecimiento y marchitamiento, además de presentar ciertas protuberancias a nivel de las raíces, denominadas nudos.

Esas especies de quistes o bulbos interfieren con las funciones normales de la raíz, impidiendo que esta absorba el agua y los nutrientes del suelo y por lo tanto muera.

Heterodera glycines

Conocido también con el nombre de “Nematodo del quiste de la soja”, es un parásito ampliamente conocido, que afecta las raíces de esta planta, comprometiendo su desarrollo.

Los efectos que causa este parásito en las plantas son variados. Entre estos se pueden mencionar destrucción de los vasos conductores a nivel de las raíces, lo que eventualmente genera necrosis de los tejidos, inhibición del crecimiento de la raíz y disminución del rendimiento de la semilla.

Su nombre se debe a que la hembra cuando muere forma una especie de quiste endurecido en las raíces de la planta, protegiendo a los huevos que alberga en su interior. Cuando los huevos eclosionan, las larvas penetran en la raíz y continúan con su ciclo.

Xiphinema

Este es un género de parásitos que también se conocen como nematodo daga, ya que presentan una estructura alargada y delgada en su extremo cefálico similar a ese instrumento. Mediante esta estructura, el parásito se fija a la raíz de la planta.

El daño que causan a la planta es que funcionan como vectores de algunos virus, principalmente de nepovirus, el cual ocasiona graves daños en los tejidos de la planta, representando una de las peores plagas para los cultivos.

Globodera

Este es un género de parásitos que afectan a las plantas que pertenecen a la familia Solanaceae. Forma pequeños quistes en las raíces de dichas plantas, interfiriendo en gran medida con los procesos regulares de la planta.

Paratylenchus hamatus

Paratylenchuss hamatus es un fitoparásito que puede infectar a una gran variedad de plantas. Entre los síntomas evidentes de que una planta se encuentra infectada por este parásito se pueden mencionar: clorosis, atrofia del crecimiento de la planta y de la raíz, caída de las hojas, entre otros.

Trichodorus

Este parásito funciona como un vector para los trobavirus, los cuales ocasionan terribles daños en la raíz de las plantas, específicamente en la punta de estas.

Como consecuencia de la acción del parásito y del virus en la raíz, esta deja de crecer y elongarse, adoptando la raíz una forma “rechoncha”. Eventualmente, la raíz deja de cumplir su función, que tiene que ver con la absorción de nutrientes y agua, por lo que la planta comienza a degenerar, hasta que muere.

Pratylenchus penetrans

Este es un parásito que afecta a una amplia cantidad de plantas, específicamente a nivel de las raíces. Mediante su boca, el guano se fija a la raíz de la planta, penetra sus tejidos y se alimenta de los diversos tejidos de la planta.

Entre los daños que ocasiona este parásito en la planta se mencionan clorosis, manchas de fruta, déficit en el crecimiento de la planta y necrosis en los tejidos, muy especialmente en las raíces de la planta.

Debido a que estos efectos son similares a los de muchos otros nematodos, un diagnóstico exacto es difícil. Sin embargo, constituye una plaga terrible para los cultivos agrícolas.

Referencias

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