Historia

Mausoleo de Halicarnaso: localización, historia, descripción, ruinas


El Mausoleo de Halicarnaso fue un monumento funerario construido para dar sepultura al sátrapa Mausolo, gobernante de Caira. El edificio fue un encargo de la esposa y hermana de ese rey. Los arquitectos que llevaron a cabo el proyecto fueron los griegos Sátiro de Paros y Piteo.

Se estima que el mausoleo, construido en Halicarnaso, la actual ciudad turca de Bodrum, fue terminado en el año 350 a. C. Su perímetro medía unos 134 metros, mientras que la altura alcanzaba los 46 metros. Cada una de sus cuatro plantas fue adornada con relieves escultóricos elaborados por varios de los artistas más reconocidos de Grecia.

Esta construcción se convirtió en una de las más admiradas de la antigüedad y Antípatro de Sidón la incluyó entre las Siete Maravillas del Mundo. Por otra parte, el término “mausoleo” es utilizado actualmente para referirse a los monumentos funerarios que sirven como sepulcros.

El Mausoleo se mantuvo en pie durante la conquista de la ciudad por parte de Alejandro Magno. Igualmente, soporto las campañas militares de los bárbaros y los árabes. Sin embargo, para 1404 había sido destruido, posiblemente a causa de un terremoto. Su descubridor, ya en el siglo XIX, fue el arqueólogo británico Charles Thomas Newton.

Índice del artículo

Localización

El monumento funerario se encontraba en la ciudad de Halicarnaso, hoy en día la localidad turca de Bodrum.

Halicarnaso era la ciudad más importante del reino de Caria, que se había independizado de los persas. Su gobernante más conocido fue Mausolo, para quien fue construido el sepulcro.

La construcción fue levantada en una pequeña colina que dominaba la ciudad, por lo que era visible desde cualquier punto de la misma.

¿Cómo se construyó el mausoleo de Halicarnaso? Historia

Mausolo, hijo de Hecatomno, fue el rey de Caria, un pequeño reino en la costa de Asia Menor. El monarca eligió una ciudad para gobernar el territorio que su padre había conquistado. La localidad elegida fue Halicarnaso.

Esta localidad costera tenía una ubicación muy segura frente a los enemigos del reino. Desde Halicarnaso, Mausolo dirigía su ejército y podía controlar cualquier posible amenaza que llegara del mar.

El periodo en el trono de Mausolo se prolongó durante 24 años. En el 353 a. C., falleció dejando como sucesora a su esposa y hermana, Artemisia II de Caria. Esta ordenó construir el monumento funerario más impresionante de los que se hubieran construido hasta la fecha.

La nueva reina destinó los ingresos obtenidos de los impuestos cobrados por su marido para la construcción.

Fuentes sobre la construcción

La principal fuente de información sobre la construcción del Mausoleo es lo recogido por el historiador romano Plinio el Viejo sobre un libro escrito por los propios arquitectos, Sátiros y Piteo.

Plinio dejó escrito lo siguiente sobre el monumento:

“Antes de que su tarea fuera completada la reina Artemisia murió. Los cuatro escultores no abandonaron su trabajo, sin embargo, hasta que no lo finalizaron, considerando que la obra era tanto un memorial de la pareja gobernante de Halicarnaso como de su propia pericia escultórica. Y hasta ahora, está por decidir cuál de las dos representaciones es más poderosa“

Construcción del mausoleo

Aparte de la obra de Plinio antes mencionado, apenas hay información sobre la construcción del sepulcro. Se conoce el nombre de los arquitectos, Sátiros y Piteos, así como el de los escultores que participaron: Scopas, Briaxis, Léocharès y Timotheos. Artemisia había enviado un mensajero a Grecia para contratar a los mejores artistas de la época.

Aunque existe cierto debate sobre las fechas, algunos expertos afirman que la construcción finalizó sobre el 350 a. C., un año después de que Artemisia falleciera.

Los arquitectos planificaron levantar el monumento sobre una base rectangular de 33 por 39 metros. Esta base fue construida con ladrillos y después se revistió con placas de mármol procedente de las islas del Mármara.

Descripción y características del mausoleo

Como se ha señalado, los constructores del mausoleo edificaron primero una base rectangular de ladrillo y revestida de mármol. Sobre esta base colocaron 117 columnas de estilo jónico, situadas en una hilera doble y que sostenían un techo con forma de pirámide escalonada.

El estilo del Mausoleo de Halicarnaso, al menos en su estructura general, mantuvo casi todas las características del estilo griego. Sin embargo, también existían algunos aspectos que denotaban las influencia de la arquitectura persa, sobre todo en el techo y la base. La decoración estuvo compuesta por relieves y más de 400 estatuas.

Descripción general

El sepulcro fue construido en una colina que domina la localidad. La estructura se encontraba en el interior de un patio cerrado y en su centro se erigió la plataforma sobre la que descansaba la tumba.

A la parte superior de la plataforma se accedía mediante una escalera flanqueada por esculturas que representaban leones. Las paredes de esa plataforma estaban adornadas con estatuas de varias divinidades. En cada esquina, se colocaron guerreros de piedra a caballo.

La tumba de mármol estaba ubicada en el centro de la plataforma. Era una estructura rectangular con forma de una pirámide truncada, con una ligera inclinación que la hacía parecer un cubo. Este nivel estaba decorado con un friso de bajo relieve que representaba diversas batallas de centauros con lapitas y de griegos contra las amazonas.

Sobre esta sección se colocaron 36 columnas de pequeño diámetro, con una altura de 12 metros cada una. Tras estas columnas había un sólido bloque que sostenía el techo del sepulcro.

La forma del techo era piramidal y estaba compuesto por 24 escalones que llevaban al punto más alto, donde se colocó un pedestal y una estatua de cuatro caballos que tiraban de un carruaje en el que se encontraban las figuras de Mausolo y Artemisa II.

Decoración

Según las pocas descripciones que se conservan sobre el mausoleo, su decoración era espléndida. Como se ha señalado, estaba repleto de estatuas y de representaciones en alto relieve.

Además, el edificio contaba con varios frisos esculpidos, muchos de ellos dedicados a contar la vida de Mausolo y la forma de vida de su pueblo.

Destrucción

La historia del mausoleo es prácticamente desconocida. Se sabe que en el 334 a. C., cuando Alejandro Magno conquistó la ciudad, se encontraba en perfecto estado.

Tres siglos después, en el 62 a. C. y en el 58 a. C., la localidad fue asaltada por piratas. A pesar del saqueo, parece que el sepulcro no sufrió daños.

Los pocos datos existentes parecen indicar que el deterioro del Mausoleo de Halicarnaso se produjo a partir del siglo XII. Las paredes comenzaron a derrumbarse, al igual que el techo. Se sospecha que parte de las piedras que formaban parte del sepulcro fueron usadas para construir los edificios cercanos.

Del siglo XII se conservan las palabras de Eustacio de Tesalónica, quien en su obra Comentarios sobre la Ilíada afirmaba sobre el mausoleo que “fue y es una maravilla”.

Su destrucción final, según la hipótesis más aceptada, se debió a un terremoto que tuvo lugar en el 1404. Tras esa fecha solo quedaron en pie los cimientos, cuyos restos fueron utilizados en 1494 por la Orden de los Caballeros de San Juan para construir el castillo de San Pedro.

En la actualidad, solo sobreviven la estatua superior y un friso, ambos en el Museo Británico de Londres.

Ruinas

Los Caballeros de San Juan utilizaron más restos del mausoleo para reparar en 1522 el castillo de San Pedro. Fue entonces cuando encontraron varios túneles bajo el edificio que llevaban a los sarcófagos de Mausolo y Artemisia.

Una de las historias que se cuentan sobre esa época relata que el descubridor de esos sarcófagos decidió esperar un día para abrirlos, ya que era muy tarde. Al regresar a la mañana siguiente, la tumba había sido saqueada y ni siquiera estaban los cuerpos de los reyes allí enterrados.

Excavaciones arqueológicas

El arqueólogo británico Charles Thomas Newton fue quien descubrió los restos del Mausoleo de Halicarnaso en 1856-1857. El futuro curador del Museo Británico realizó excavaciones por toda la costa de la actual Turquía y se llevó una gran cantidad de objetos a su país natal, entre los que se encontraban los restos del sepulcro que hoy se exponen en Londres.

Newton encontró algunas secciones de los relieves que habían decorado la pared del edificio, así como partes del antiguo techo escalonado. Igualmente, el arqueólogo descubrió una rueda de carro de piedra rota que había formado parte de la escultura ubicada en la zona alta del monumento.

Otro de sus hallazgos fueron las estatuas de Mausolo y Artemisa que habían sido parte de la cuadriga.

Antes de comenzar las excavaciones, Newton realizó una importante labor de investigación para saber dónde investigar. Una vez que encontró los túneles, pudo recorrerlos hasta llegar al lugar en el que había estado ubicado el mausoleo. Después, procedió a comprar el terreno y consiguió el apoyo de un buque de guerra inglés para llevarse lo que encontrara de valor.

Ruinas del mausoleo

Hoy en día, donde antes estuvo esta maravilla del mundo antiguo solo se puede contemplar un gran espacio rectangular. Entre los restos que permanecen allí se encuentran varias columnas, piedras y restos de algunas estatuas.

Junto a las ruinas se ha construido un pequeño museo en el que los interesados pueden conocer la historia del monumento.

Referencias

  1. EcuRed. Mausoleo de Halicarnaso. Obtenido de ecured.cu
  2. Huguet, Guiomar. Así se vería el Mausoleo de Halicarnaso en la actualidad. Obtenido de historia.nationalgeographic.com.es
  3. Valtierra, Ana. El Mausoleo de Halicarnaso, maravilla de la antigüedad. Recuperado de ucm.es
  4. Cartwright, Mark. Mausoleum at Halicarnassus. Obtenido de ancient.eu
  5. Rosenberg, Jennifer. The Mausoleum at Halicarnassus. Obtenido de thoughtco.com
  6. Property Turkey. About the Mausoleum at Halicarnassus. Obtenido de propertyturkey.com
  7. Famous Wonders. Mausoleum at Halicarnassus. Obtenido de famouswonders.com
  8. The Editors of Encyclopaedia Britannica. Mausoleum of Halicarnassus. Obtenido de britannica.com