Nutrición heterótrofa: características, etapas, tipos, ejemplos
La nutrición heterótrofa es aquella donde los organismos que la presentan no tienen la capacidad de producir sus propios alimentos. Debido a esto, su energía proviene de la ingesta de compuestos orgánicos, como los tejidos animales o vegetales.
Por ejemplo, un conejo que come lechuga tiene este tipo de nutrición, ya que toma el alimento de fuentes externas. Al igual que un león que come una gacela. Al contrario, las plantas y algas, entre otros organismos, son autótrofos, ya que pueden producir sus propios alimentos.
En este sentido, los heterótrofos obtienen los nutrientes cuando los elementos consumidos son procesados y convertidos en sustancias más sencillas. Estas son absorbidas por el organismo y utilizadas en los diferentes procesos metabólicos.
La fuente de energía en la nutrición heterótrofa es variada. Así, los seres vivos que consumen compuestos sólidos y líquidos son llamados holozoicos y aquellos que se alimentan de materia en descomposición se les conoce como saprófitos. También existen los parásitos, que viven a expensas del huésped.
Índice del artículo
- 1 Características
- 2 Importancia
- 3 Etapas de la nutrición heterótrofa
- 4 Tipos
- 5 Ejemplos de seres vivos con nutrición heterótrofa
- 6 Referencias
Los organismos con nutrición heterótrofa no elaboran sus alimentos. En la cadena trófica, están clasificados como consumidores, puesto que toda la energía para la realización de los procesos vitales proviene de la ingesta de alimentos, bien sean de origen vegetal o animal.
Así, los consumidores primarios, como el conejo y la vaca, se alimentan directamente de los productores, representados por las plantas. En cuanto a los consumidores secundarios, llamados también carnívoros, cazan y consumen a los consumidores primarios o herbívoros.
Evolutivamente, los animales que tienen nutrición heterótrofa han sufrido modificaciones anatómicas y morfológicas que les han permitido adaptarse a las diversas dietas que consumen.
Estas pueden incluir desde suaves vegetales, como la lechuga y el pasto, hasta caparazones de tortugas y huesos. También, existen variaciones en cuanto a las proporciones de fibra, grasa y contenido proteico.
Por ejemplo, en el gorila, la mandíbula inferior sobresale sobre la superior, lo que se conoce como prognatismo mandibular. Además, tiene en el cráneo una cresta sagital muy pronunciada. Estas particularidades óseas sirven de base a la fuerte musculatura que está asociada a la mandíbula, que le permite cortar, moler y triturar sus alimentos.
Otra variación morfológica ocurre en el estómago. En los animales rumiantes, como los ovinos, bovinos, cérvidos y caprinos, el estómago tiene cuatro divisiones: el rumen, retículo, omaso y abomaso, En cuanto a ser humano, entre otros, este posee solamente una cavidad abdominal.
En la nutrición heterótrofa, existen diversas fuentes alimentarias. Hay animales que comen vegetales (herbívoros), otros cazan consumen animales (carnívoros) y otros que pueden ingerir ambos (omnívoros).
Sin embargo, la dieta de los heterótrofos está influenciada por diversos factores, entre los que se encuentra la abundancia de los alimentos y las variaciones en las estaciones.
Esto se evidencia en las ardillas, que basa su alimentación en las nueces. No obstante, en la estación de la primavera la alimentación sufre modificaciones. En esa época, las nueces que este animal enterró para consumirlas en el invierno, están comenzando a germinar. Debido a esto no puede consumirlas.
Esto ocasiona que cambie su dieta durante esa estación del año y consuma principalmente los frescos brotes de los árboles.
Algunos de los seres vivos que tienen nutrición heterótrofa juegan un papel muy importante dentro de la naturaleza. Con relación a esto, los hongos saprófitos contribuyen en la degradación de la materia muerta en elementos más simples.
Esto facilita que las plantas que se encuentren cercanas a estos hongos, puedan absorber con mayor facilidad los nutrientes degradados.
Otros organismos que contribuyen con el ecosistema son las bacterias saprófitas. Estas son conocidas como los mayores descomponedores de la naturaleza, por su acción en una gran diversidad de materiales.
El hombre también utiliza a su favor esta gran capacidad de degradación que poseen las bacterias. Así, las emplea para descomponer la materia orgánica y convertirla en estiércol, que luego es utilizado como fertilizante para favorecer el crecimiento de las plantas.
La ingestión es el proceso de introducir el alimento al aparato digestivo. En el caso que el bocado del alimento sea menor al de una molécula, el término más acertado para describir la acción alimenticia es el de absorción.
Existen dos tipos, la ingestión microfágica, que es llevada a cabo por los animales que se alimentan de líquidos, como algunos parásitos, y por aquellos que filtran los microorganismos. El otro tipo es la ingestión es la macrofágica, donde el animal selecciona la comida que va a ingerir.
En esta fase de la nutrición heterótrofa, los alimentos ingeridos son procesados por órganos especializados. Estos los transforman en sustancias más simples, empleando diversas enzimas y, en algunos casos, algunos microbios.
La absorción permite que los nutrientes productos de la digestión, en conjunto con las sales minerales, el agua y las vitaminas, sean transportados desde los órganos del sistema digestivo hasta las células.
En esta última etapa, las sustancias no utilizables pueden convertirse en elementos tóxicos, por lo que necesitan ser excretadas al exterior. De esta manera, se mantiene el equilibrio homeostático en el organismo.
La nutrición holozoica es aquella donde el ser vivo ingiere alimentos líquidos y sólidos, que se procesan en el sistema digestivo. De esta manera, el material orgánico se dregada en moléculas más simples, que el organismo asimila.
Por ejemplo, las proteínas contenidas en la carne se convierten en aminoácidos, que pasan a formar parte de las células del organismo. Después de este proceso, donde fueron extraídas las sustancias nutritivas, incluyendo el agua, las partículas restantes son excretadas.
Este tipo de nutrición heterótrofa es propia del ser humano, los animales, y algunos organismos unicelulares, como la ameba.
Tomando en cuenta el origen de los alimentos consumidos, los organismos que presentan esta manera de nutrición se dividen en:
Herbívoros
Los animales que forman este grupo se alimentan fundamentalmente de plantas. Dentro de la cadena trófica, se les considera como consumidores primarios. También, dependiendo del tipo de fuente vegetal que consumen, pueden clasificarse de diversas formas.
Así, los que su dieta está basada principalmente en frutas se llaman frugívoros, mientras que los especializados en hojas se les conoce como folívoros o ramoneadores. Los animales que se alimentan de madera se les denomina xilófagos y los que comen fundamentalmente semilla son los granívoros.
Dentro del grupo de los herbívoros se encuentran las vacas, los conejos, las jirafas, los venados, las ovejas, los osos pandas, los hipopótamos, los elefantes y las llamas, entre otros.
Carnívoros
El animal carnívoro obtiene las energías y todos los requerimientos nutricionales a través del consumo de carne, bien sea mediante la depredación o por consumo de carroña. En algunos casos puede subsistir exclusivamente de una dieta a base de carne, por lo que se le considera un carnívoro estricto o verdadero.
Sin embargo, de manera ocasional pudiera consumir pequeñas cantidades de vegetales, pero su sistema digestivo no es apto para digerirlos de manera eficiente. Dentro de este grupo se encuentran el león, la hiena, el tigre, el coyote y el águila.
Estos consumidores secundarios pueden agruparse tomando en cuenta la clase de presas que consumen. Así, los que comen insectos se les conoce como insectívoros o entomófagos.
Inclusive, es posible ser aún más específicos, puesto que los animales especializados en consumir termitas y hormigas, como el oso hormiguero, se llaman mirmecófagos.
Omnívoros
A este grupo pertenecen los animales que se alimentan tanto de plantas como de animales. Son generalistas y oportunistas, cuyo tracto digestivo puede procesar material vegetal y carne, aunque no esté específicamente adaptado para procesar eficientemente algunos de los componentes presentes en ambas dietas.
Algunos ejemplos de este grupo son el ser humano, el cerdo, el cuervo, el mapache, la piraña y los osos, excepto el oso polar y el oso panda.
La nutrición saprófita es aquella donde la fuente alimenticia son organismos muertos y en descomposición. A partir de estos, obtienen la energía para realizar sus funciones vitales. Dentro de este grupo se encuentran los hongos y algunas bacterias.
Para realizar la degradación del material ingerido, los saprófitos liberan algunas enzimas, que actúan sobre las moléculas complejas y la convierten en elementos más simples. Dichas moléculas son absorbidas y utilizados como fuente de energía nutricional.
Este tipo de nutrición requiere de algunas condiciones especiales para que ocurra de manera eficiente. Entre estas se encuentran un ambiente húmedo y la presencia de oxígeno, aunque la levadura no necesita de este para realizar sus metabolismos alimenticios.
Además, el pH del medio donde se encuentre debe ser neutro o levemente ácido y la temperatura cálida.
En la nutrición parasitaria, los organismos habitan en el cuerpo de los huéspedes y viven a expensas de este. Si bien el parásito se alimenta a expensas del huésped, este no obtiene ningún beneficio de esta relación. De manera contraria, generalmente se ven perjudicados, pudiendo causar hasta su muerte.
Algunos ejemplos de estos seres vivos son la tenia, el piojo, la garrapata, la pulga y el chinche, entre otros. Según el lugar que ocupe en el hospedante, la nutrición parasitaria puede dividirse en:
-Ectoparásitos, son aquellos que habitan en la parte externa del cuerpo del hospedador, como ocurre con la pulga.
-Endoparásitos, que viven en el interior del organismo del huésped, como por ejemplo lo hace la tenia o solitaria.
-Mesoparásitos. Un ejemplo claro de este tipo de parásito lo constituyen los copépodos. Estos crustáceos suelen estar insertos de manera parcial en los diferentes tejidos corporales del hospedero.
Ejemplos de seres vivos con nutrición heterótrofa son los carnívoros, herbíboros, omnóvoros, organismos del reino fungi y protozoos (necesitan carbón para sobrevivir y reproducirse), heliobacterias (necesitan carbón),
Este crustáceo es un parásito que se adhiere a la lengua del pez hospedante, el pez marino Lithognathus. Esto lo hace utilizando los tres pares de patas delanteras que posee. De esta manera, puede alimentarse de la sangre que proviene de la arteria que se encuentra en este órgano.
Al transcurrir el tiempo, la lengua del pez se atrofia y se cae. Ante esto, el cuerpo del crustáceo reemplaza al órgano del pez, que no ve alterada ninguna de sus funciones nutritivas a consecuencia de esto.
Este hongo saprófito se desarrolla en el suelo y produce la putrefacción de las frutas y de los insectos. Dicha especie obtiene sus nutrientes del material en descomposición, sobre el cual se extienden las hifas que forman la base del hongo.
Así, puede absorber las sustancias alimenticias. Estas se digieren por la acción de las enzimas digestivas, como las oxidasas y celulasas. Luego, a través de la difusión, los compuestos simples llegan a todas las células del cuerpo.
La ameba es un protozoo unicelular que pertenece al género Amoeba. Se caracteriza por su desplazamiento de tipo ameboide y por la capacidad de cambiar de forma, ya que carece de pared celular.
La nutrición holozoica de este organismo se inicia cuando el animal proyecta su pseudopodia, rodeando con esta la comida. Luego, envuelve el alimento y ocurre el proceso de fagocitosis.
En dicho proceso, las vacuolas alimenticias, ricas en enzimas digestivas, contribuyen a descomponer los alimentos en sustancias más sencillas. La comida digerida, es absorbida por el citoplasma.
Estos nutrientes se utilizan para producir energía, que se emplea en el desarrollo y crecimiento de la célula. El material que no fue digerido, se expulsa a través de la ruptura de la membrana celular.
- MicroscopeMaster (2019). Heterotrophs, Definition, Nutrition, vs Autotrophs. Recuperado de microscopemaster.com.
- Boyce A., Jenking C.M. (1980) Heterotrophic nutrition. In: Metabolism, movement and control. Recuperado de link.springer.com
- Stout G.W., Green N.P.O. (1986) Heterotrophic Nutrition. . Recuperado de link.springer.com.
- (2019). Heterotroph. Recuperado de en.wikipedia.com.
- Lifepersona (2010). Heterotrophic Nutrition: Characteristics, Types and Examples. Recuperado de lifepersona.com.
- Biology Dictionary. (2019). Heterotroph. Recuperado de biologydictionary.net.