Ecología

Pradera: características, tipos, flora, clima, fauna, ejemplos


La pradera es una formación vegetal herbácea de clima templado seco, dominada por gramíneas en un terreno de plano hasta ondulado. En este sentido, el término pradera es equivalente a las template grassland del inglés.

Esta formación vegetal es parte del bioma de formaciones graminiformes de tierras llanas del mundo, junto a las sabanas tropicales (América y África tropical). Sin embargo, las praderas o herbazales templados difieren mucho de las sabanas tropicales en régimen de temperatura y en composición de especies.

Las praderas tienen una estructura muy simple con un único estrato de hierbas de altura variable y en algunos casos pequeños arbustos. Las mismas presentan un suelo fértil, con abundante materia orgánica en el horizonte superficial.

La evolución de estos ecosistemas se ha vinculado a la herbivoría y las quemas periódicas. Por otra parte, la actividad humana ha causado un impacto negativo relevante particularmente la cacería, la agricultura y la cría.

Índice del artículo

Características de las praderas

– Estructura vegetal

La pradera es una formación vegetal de estructura muy simple ya que está conformada fundamentalmente por un único estrato herbáceo. Dicho estrato varía de oeste a este en las praderas norteamericanas, con herbazales ralos al oeste, medios al centro y altos al este.

– Suelo

El suelo de la pradera típica es profundo (1 m o más) rico en humus, potasio, fósforo y microelementos (Chernozem). La biomasa aérea de las gramíneas muere durante el verano seco.

Luego esta biomasa es incorporada al sustrato por la acción de las lombrices y otros animales, formándose la capa de humus.

En este contexto, la limitante para el desarrollo de árboles y arbustos, es el clima y no las condiciones edáficas. Sin embargo, localmente pueden desarrollarse praderas en áreas con suelos salinos con metales pesados o poco profundos.

– La quema

Los incendios son un elemento característico de las praderas, bien sean incendios naturales o antropogénicos. Las quemas periódicas contribuyen a la renovación de los pastos y a la coloración oscura del horizonte A del suelo.

– Herbivoría

La gran provisión de biomasa herbácea que generan las praderas ha facilitado el desarrollo de grandes poblaciones de herbívoros. Estos pueden ser de gran tamaño como el búfalo o las gacelas y antílopes, hasta pequeños como el perrito de las praderas.

– Impacto antrópico

El ser humano ha alterado las praderas naturales con sus actividades durante miles de años. Principalmente la agricultura intensiva y la ganadería, pero también la introducción de especies vegetales exóticas como numerosos pastos.

Límites naturales

En muchos casos, especialmente en Europa occidental, la intervención humana ha alterado los límites y características naturales de las praderas. Esto es debido a la introducción de especies o selección de aquellas naturales más productivas.

La introducción de estas especies ha generado el desarrollo de grandes extensiones con muy poca variación específica. Por ejemplo, praderas de pasto ryegrass (Lolium spp.) y de la leguminosa forrajera llamada trébol blanco (Trifolium repens).

Impacto en la flora

En los Estados Unidos están amenazadas o en peligro de extinción 55 especies de gramíneas de las praderas. Adicionalmente, 728 especies más son candidatas a entrar en la categoría de amenaza.

Impacto a la fauna

Las poblaciones de fauna se han visto particularmente afectadas por la caza o debido a la contaminación por agroquímicos. La cacería llevó casi a la extinción a especies como el búfalo o bisonte americano.

Por su parte, los perritos de las praderas se han visto afectados por problemas de envenenamiento.

Desastre socioambientales: el dust bowl

El mal manejo de la pradera por parte de los agricultores norteamericanos produjo el desastre conocido como dust bowl o “cuenco de polvo”. Esto fue producto de un proceso de desertificación masivo por un uso intensivo de la tierra para el cultivo.

Los suelos perdieron su estructura combinándose con un período especialmente seco y con fuertes ventiscas desde 1932 al 39. Todo esto provocó incluso tormentas de arena y los suelos quedaron improductivos.

Tipos de praderas

– Praderas de Norteamérica

Algunos autores restringen el término pradera únicamente para estas formaciones de gramíneas de Norteamérica. La pradera es la provincia florística de mayor extensión en esta región del planeta

En estas praderas predominan gramíneas cespitosas, es decir que forman cubiertas continuas en el suelo gracias a sus estolones y rizomas. Las mismas, a su vez, se subdividen en tres tipos básicos según la altura de las plantas determinado por un gradiente de humedad:

Praderas de pastos ralos

Se desarrollan al este de la llanura central norteamericana, donde la influencia de las precipitaciones es menor. Esto genera un clima más seco que restringe el desarrollo de la vegetación denominada la gran planicie norteamericana.

Praderas de pastos intermedios

Se encuentran en la región central de la llanura norteamericana donde hay una mayor precipitación y favorece el desarrollo de la vegetación.

Praderas de pastos altos

Estas praderas reciben la mayor humedad proveniente de la influencia oceánica y tienen suelos más fértiles, por tanto los pastos son más altos. Esta formación vegetal limita al este con los bosques templados.

– Pampas de Argentina

Las praderas en esta región del hemisferio sur presentan una diferenciación en función de la cantidad de precipitación. Así, la pampa húmeda presenta una precipitación promedio de 1.000 mm anuales y la pampa seca solo 400 mm de promedio anual.

La mayor humedad en la pampa húmeda (ubicada al este), se debe la influencia de los vientos atlánticos.

– Estepa patagónica

Se trata de las planicies ubicadas en la Patagonia argentina, una llanura que se extiende de norte a sur en clima frío. En este sentido se diferencia de la pampa por las condiciones climáticas, siendo más frío y menos húmedo.

– Veld de Sudáfrica

A diferencia de las otras praderas, los veld combinan gramíneas y arbustos de pequeño porte, entre ellos leguminosas del género Acacia. Se desarrollan en una meseta elevada (1.500-2.100 msnm) por lo que presentan un clima fresco.

– Estepas de Eurasia

Se trata de las grandes planicies que forman una franja central continental con clima semiárido frío. Las plantas son xerófilas, es decir adaptadas a la escasez de agua y hay una mayor proporción de plantas no gramíneas (dicotiledóneas).

El biotipo predominante de las gramíneas es la macollas (individuos que generan numerosos brotes en un punto formando un penacho de culmos o tallos). De esta manera, se genera un microclima húmedo y cálido al interior de la macolla.

– Sabanas templadas de Australia y Nueva Zelanda

Australia

Se ubican al sureste de Australia entre la zona de bosques y el interior árido, desde el norte hasta el sur de Nueva Gales del Sur. Hoy en día, la mayor parte está dedicada a la cría de ovejas y al cultivo de trigo.

A diferencia de otros herbazales, en esta área se presenta un bosque abierto de eucalipto con una cubierta de gramíneas. Las especies arbóreas incluyen eucaliptos (Eucaliptus spp.) y casuarinas (Casuarina equisetifolia) y la gramínea dominante es el pasto Mitchell (Astrebla lappacea).

Nueva Zelanda

En los Alpes neozelandeses del sur, en la Isla Sur, existen comunidades de pastizales templados de origen secundario por degradación de bosques templados mixtos. Esto fue causado por la deforestación y quema generado primero por los maoríes luego por los colonizadores.

– Praderas de alta montaña

En los sistemas montañosos de distintas latitudes se presentan formaciones graminiformes denominadas praderas de montaña. Las mismas son de extensión variable y se desarrollan en terrazas, mesetas y valles altos intramontanos.

Hay pequeñas praderas de montaña en la cordillera andina, en las Rocallosas, los Alpes, los Pirineos y muchas otras cordilleras. Por otra parte, hay extensas praderas como las estepas de la meseta tibetana (Tíbet) o de Dauria (Siberia, Rusia).

Estas formaciones vegetales se caracterizan por tener bajas temperaturas y llegan a congelarse en invierno. Más allá de las similitudes climáticas impuestas por la altitud, estas praderas varían mucho en composición de especies.

La composición florística y de fauna está determinada por la ubicación geográfica, condiciones de suelo y disponibilidad de agua.

Localización en el mundo

En el hemisferio norte las praderas se presentan en grandes cinturones continuos en Norte América y Eurasia. Para el hemisferio sur se distribuyen de forma discontinua, principalmente en Surámérica, Sudáfrica y Australasia.

– América

Norteamérica

La pradera norteamericana abarca toda la planicie central que se extiende desde el sur de Canadá hasta el norte de México. En sentido oeste-este va desde las Rocallosas hasta los bosques templados de la costa atlántica.

Suramérica

La llanura pampeana o pampa se extiende por el centro-este de Argentina, Uruguay y el estado de Río Grande del Sur (Brasil).

– Eurasia

Las praderas denominadas estepas se extienden por las llanuras de Europa oriental (Hungría, Ucrania). Igualmente se extienden por Asia central y el sur de los bosques templados de Rusia, China y Mongolia.

– África

Los veld son praderas propias del cono sur africano, extendiéndose al norte y nordeste de Sudáfrica.

– Oceanía

Estas praderas o sabanas australianas se ubican en el cuadrante sureste de Australia.

Flora de las praderas

La familia dominante en la pradera es Poaceae (Gramineae) con diversas especies, especialmente de gramíneas perennes.

– Las gramíneas predominantes

Predominan las gramíneas de las subfamilias Arundinoideae y Pooideae a diferencia de las sabanas tropicales donde abundan las Chloridoideae y Panicoideae.

– Especies

Solo en las planicies centrales de Norte América hay más de 1.000 especies de plantas. En cuanto al número de individuos dominan las gramíneas, pero se presentan muchas otras especies de distintas familias.

Pradera norteamericana

De las gramíneas de las praderas norteamericanas son comunes géneros como Andropogon, Panicum, Poa y Stipa. También hay compuestas de los géneros Aster, Helianthus, Tridax y escasos subarbustos y arbustos como Tephrosia virginiana (Leguminosae) y el Zumaque liso (Rhus glabra).

Una especie resaltante es la rosa de la pradera (Rosa arkansana) y la orquídea de la pradera del oeste (Platanthera oraeclara).

Estepa euroasiática

Se encuentran especies de géneros comunes en las praderas americanas, como el caso de Stipa grandis. Asimismo se presentan especies como Leymus chinensis y arbustos como Artemisia frigida (Compositae) común a Norteamérica y Eurasia.

Por otra parte, hay hierbas leguminosas como Caragana microphylla (Fabaceae), nativa de Eurasia.

– Adaptaciones

Las gramíneas se han adaptado a tres factores ambientales de la pradera como la sequía, herbivoría y el fuego. En este sentido, han desarrollado diversas estructuras de propagación subterráneas como yemas basales, rizomas y estolones.

Las yemas basales están en la base de los tallos o culmos por debajo del suelo, protegidas de la acción del fuego y de los herbívoros. La parte aérea se quema o es consumida y la planta rebrota con la caída de las lluvias.

Igual ocurre con las adaptaciones de tallos subterráneos (rizomas y estolones) que permiten la reproducción vegetativa de las especies.

Clima

Las praderas se desarrollan climas templados, secos en la mayor parte del año y una temperatura que varía de 0º C en invierno hasta 25 ºC en verano. En el hemisferio norte es la formación vegetal propia de la zona intermedia entre zonas áridas al sur y bosque templado al norte.

Sin embargo, en el caso de la estepa fría asiática se presenta un clima seco continental, alejado de la influencia oceánica.

Factor limitante

El factor determinante para la formación de la pradera es el clima, especialmente la precipitación y la lluvia. Esto la diferencia de las sabanas tropicales donde el factor limitante es fundamentalmente el suelo.

En algunas praderas la mayor parte de la precipitación cae en invierno, mientras que en otras es en verano. En todo caso, el total de precipitación anual oscila entre los 300-400 mm y los 1.000 mm.

Fauna de las praderas

Una característica destacada de las praderas es la presencia de grandes manadas de herbívoros asociadas a carnívoros predadores.

– Praderas de Norteamérica

El búfalo (Bison bison)

El animal emblemático de las praderas de Norteamérica es el búfalo o bisonte americano. Las praderas sostuvieron una población de 60-100 millones de individuos antes de la llegada de los colonizadores europeos.

El búfalo era cazado por las comunidades indígenas norteamericanas, pero no se encontraba amenazado. Sin embargo, con la colonización europea se cazaron millones de animales para aprovechar su piel, carne, grasa y huesos.

Perrito de las praderas (Cynomys spp.)

Otro herbívoro gregario habitante de la pradera es el perro de la pradera, del cual existen 5 especies. Este animal forma colonias que en el pasado llegaron a contar cerca de 400 millones de habitantes.

Hoy en día se conocen colonias de hasta un millón de individuos, ocupando cientos y aún miles de kilómetros cuadrados en extensión.

Coyote (Canis latrans)

Son cánidos que cazan en solitario o en parejas, habitan un área extensa desde Norteamérica hasta Colombia. Es un animal omnívoro que se ha adaptado a comer los restos orgánicos en la basura.

En la naturaleza se alimenta cazando pequeños animales e igualmente consume frutas y hierbas.

Hurón de pies negros (Mustela nigripes)

Es un mamífero carnívoro nocturno emparentado con las comadrejas y tejones que está en proceso de reintroducción. Habitaba las praderas y su alimento principal eran los perritos de las praderas, además de roedores y conejos.

Se extinguió en estado silvestre en 1980, con algunos ejemplares en cautiverio y hoy día está siendo reintroducido en las praderas de Wyoming (EEUU). La población en estado silvestre actual se estima en 1.500 individuos.

Tejón (Taxidea taxus)

Es un carnívoro emparentado con los hurones y comadrejas que se alimenta de pequeños animales de la pradera.

Serpiente de cascabel (Crotalus viridis)

Es una serpiente venenosa de 1 a 1,5 m de longitud, cuyo nombre proviene del sonido que genera al agitar su cola. La causa es una estructura que se forma en el extremo de la cola producto de la acumulación de piel con las mudas.

Se alimenta de roedores, perritos de las praderas y otros pequeños animales a los cuales inocula un veneno neurotóxico.

– Pampa y estepa argentina

Las actividades humanas han casi desaparecido de la región a los animales de mayor tamaño característicos de la pampa.

Puma (Puma concolor)

Es uno de los grandes felinos del mundo, también se le llama león americano. Era un depredador común en la pampa, pero la caza prácticamente lo ha hecho desaparecer de la región.

Ñandú (Rhea spp.)

Es un ave corredora de gran tamaño endémica de la pampa y existen dos subespecies o especies según el autor (Rhea americana y Rhea pennata). La primera de las especies habita la pampa, mientras que la segunda se restringe a la Patagonia.

Venado de las pampas (Ozotoceros bezoarticus)

Es un cérvido de tamaño mediano endémico de las pampas, cuyas poblaciones están sumamente reducidas. Hoy en día está protegido, pero en el pasado fue sometido a fuerte presión por cacería y sus hábitats están muy alterados. Durante el siglo XIX se llegaron a exportar más de 2 millones de pieles de este venado.

Zorro de las pampas (Lycalopex gymnocercus)

Es un cánido omnívoro, es decir comen plantas y pequeños animales, endémico de la pampa.

– Estepa euroasiática

Antílope saiga

Este antílope habita las estepas desde Rusia hasta China y Mongolia, pero las mayores poblaciones están en Asia Central (Kazajistán y Uzbekistán). Están en peligro crítico de extinción por la caza furtiva debido a que sus cuernos son demandados en la medicina tradicional china.

Caballo Przewalski o caballo mongol (Equus ferus)

Es la única especie de caballo silvestre que existe en el mundo con poblaciones dispersas, escasas y poco numerosas. Esta especie habita las estepas desde China y Mongolia hasta Ucrania.

– Veld surafricano

La mayoría de los grandes animales han desaparecido debido a la cacería y alteración de sus hábitats.

La gacela saltarina de El Cabo o springbok (Antidorcas marsupialis)

Es uno de los pocos grandes mamíferos que mantiene poblaciones importantes en los veld. Es una gacela sumamente veloz y es el símbolo del equipo de rugby de Sudáfrica.

El blesbok (Damaliscus pygargus phillipsi)

Es una subespecie de antílope de poblaciones muy restringidas que habita la meseta sudafricana.

La cuaga o quagga (Equus quagga quagga)

Es una subespecie de la cebra de planicie que habitó la pradera sudafricana y tenía rayas solo en la cabeza y cuartos delanteros. Lamentablemente se extinguió en 1870 en estado silvestre y en 1883 en cautiverio.

Actividades económicas

Agricultura

La principal actividad económica en las praderas es la agricultura de cereales y cría de ganado vacuno. De hecho las grandes praderas de Estados Unidos son consideradas el granero del país, así como la pampa argentina.

Los cultivos principales son los cereales, especialmente el trigo y el maíz y más recientemente la soja.

Ganadería

La otra gran actividad económica es la cría de ganado vacuno, especialmente para la producción de carne. Igualmente la cría de ovejas y caballos, son actividades muy considerables en este tipo de parajes.

Turismo

Muchas de las praderas son conservadas bajo figuras como parques nacionales o reservas naturales. Lo cual, unido a la belleza de sus paisajes, es propicio para el desarrollo de actividades turísticas.

Ejemplos de praderas en el mundo

– Reserva Nacional de Pastos Altos de los montes Flint y la pradera nativa Rockefeller de la Universidad de Kansas (EEUU)

Es un área de 44 Km2, representativa de la pradera de gramíneas altas de la planicie central norteamericana. La pradera de hierbas altas de los montes Flint en Kansas es una de las pocas extensiones naturales que quedan de este ecosistema. Su suelo se caracteriza por ser delgado y extenderse sobre una capa de piedra caliza.

Especies vegetales

Es la más pequeña ecorregión de pastizales de EEUU, pero incluye más de 600 especies de plantas con flores. Entre las gramíneas están el pasto azul (Andropogon gerardii) y el zacate (Panicum virgatum).

Es interesante señalar que para poder establecer y mantener este tipo de pradera el fuego juega un papel importante. De hecho, los ensayos para establecer praderas de hierbas altas en jardines botánicos han tenido éxito cuando se introduce la quema controlada.

Fauna

En el pasado fue el hábitat de grandes manadas de búfalos que actualmente están siendo reintroducidos y ciervos (Cervus elaphus).

Hoy en día se encuentra una gran diversidad de aves y también grandes poblaciones de insectos. Entre las aves destaca el urogallo grande o gallo de las praderas grande (Tympanuchus cupido).

– Estepa de Hulun Buir (Mongolia Interior, China)

Esta estepa se extiende por 105.000 Km2 por el nordeste de la Mongolia Interior, siendo una de las praderas más grandes del mundo. Son llanuras altas y onduladas con temperaturas medias entre 0 y 3 ºC, la mayor parte del año hay heladas con precipitaciones bajas (250-350 mm).

En ella se han identificado más de 1.300 especies vegetales y 400 especies animales. El biotipo de las gramíneas es el característico de penacho o macolla de las zonas muy frías.

Entre las especies de gramíneas están Leymus chinensis, Stipa baicalensis, Stipa grandis y Festuca ovina. Igualmente, hay hierbas no gramíneas como Reaumuria soongarica y Ajania fruticosa y arbustos espinosos de las gimnospermas como Ephedra equisetina.

Las actividades económicas son la agricultura, cría de ovejas, el turismo, deportes de invierno y la caza deportiva.

Referencias

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