Espacios forestales: concepto, tipos, características, ejemplos
¿Qué son los espacios forestales?
Los espacios forestales son áreas geográficas ocupadas por bosques, selvas naturales o plantaciones forestales, de los cuales el ser humano obtiene recursos y servicios. Aunque en estricto sentido un espacio forestal es cualquier zona ocupada por árboles, se utiliza más ampliamente para aquellas áreas en las que el ser humano obtiene recursos naturales.
Estos recursos se denominan recursos forestales y son de dos tipos generales: los recursos maderables y los no maderables. Donde los maderables son los distintos tipos de maderas que se obtienen de estos espacios.
Mientras que los recursos forestales no maderables incluyen fibras, frutos, forrajes, plantas medicinales, resinas, látex y otros. En este sentido, el concepto de espacio forestal abarca desde la taiga o bosque boreal hasta la selva amazónica, así como también las plantaciones de árboles maderables.
Cada uno de estos espacios es muy diferente y por tanto ameritan un manejo particular, que garantice su uso sostenible. A nivel mundial, los espacios forestales representan 3.952 millones de hectáreas de bosques y selvas naturales así como cerca de 170 millones de hectáreas en plantaciones forestales.
Los países latinoamericanos con mayor superficie en espacios forestales son Brasil (477,7 millones de hectáreas), Perú (68,7 millones) y México (64,2 millones). A los que les siguen Colombia (60,7 millones), Bolivia (58,7 millones) y Venezuela (46,6 millones).
Características de los espacios forestales
Veamos las características que tienen los espacios forestales:
Tipo de planta dominante
Los espacios forestales son formaciones vegetales donde predominan árboles, es decir plantas con tronco leñoso superior a 4 m de altura y con una copa de hojas. Dichos árboles forman una cobertura más o menos continua y densa en el espacio.
Tipos de espacios forestales
Los espacios forestales son muy diversos en su forma, aunque se pueden agrupar fundamentalmente en dos categorías, artificiales y naturales. Los artificiales son aquellos creados por el ser humano mediante la plantación de árboles en un territorio donde previamente no existían.
Los espacios forestales naturales surgen por los procesos propios de la naturaleza y se dividen en bosques y selvas. Los bosques se desarrollan en regiones de clima templado o subtropical. Mientras que las selvas son espacios forestales propios del trópico, con mayor complejidad en su forma y biodiversidad.
Diversidad biológica
Los espacios forestales tienen una diversidad biológica variable, aunque en general mayor a muchos otros espacios naturales. En el extremo menos diverso están los espacios forestales artificiales o plantaciones forestales. Mientras que los más diversos son los espacios forestales tropicales o selvas, como por ejemplo la selva del Amazonas.
Capacidad de soportar alteraciones
Los espacios forestales poseen un delicado equilibrio ecológico, lo cual los hace particularmente sensibles a las alteraciones. Esto porque forman su propio microclima interno gracias a la comunidad de árboles, que entre otras cosas protege al suelo. Por tanto, al ocurrir la deforestación (eliminación drástica la cobertura de árboles), el ecosistema tarda en recuperarse o no llega a hacerlo.
En caso de ser muy alta la deforestación, el espacio forestal deja de existir y se transforma en un desierto. Entre 1990 y 2005 la pérdida de los espacios forestales a nivel mundial ha ocurrido a un ritmo de 130.000 km2, lo que es equivalente a una superficie como la de Grecia.
Fuente de materias primas y servicios ambientales
Los espacios forestales son útiles para el ser humano porque permiten obtener diversas materias primas o recursos naturales. La principal de ellas es la madera que se emplea en construcción, ebanistería, elaboración de papel y otros usos.
Adicionalmente, se extraen materias primas de uso industrial y artesanal como gomas, resinas, caucho, fibras y otras. De igual forma, los espacios forestales son fuente de plantas de uso medicinal, al igual que de alimentos.
Por otra parte, prestan servicios forestales al captar el CO2 atmosférico, jugar un papel en el ciclo del agua y regular la temperatura ambiental. También conservan la diversidad biológica y sirven de lugar de recreación.
Plan de manejo
Para garantizar el uso sostenible en el tiempo de los espacios forestales, estos deben someterse a un plan racional de manejo. Es decir, no se deben extraer sus recursos sin tomar en cuenta la capacidad que tenga el espacio forestal para recuperarse.
En tal sentido, si se extrae un determinado número de árboles u otras plantas del bosque, debe reponerse un número igual o mayor. Esto se logra bien sea mediante la plantación de nuevos individuos o dando tiempo y condiciones para que ocurra la recuperación natural.
Espacios forestales del mundo
Los espacios forestales del mundo ocupan alrededor del 30% de la superficie terrestre emergida. Los de mayor superficie son los bosques boreales del hemisferio norte, tanto en Norteamérica como en Eurasia, así como las selvas tropicales ecuatoriales.
Taiga o bosque boreal siberiano (Rusia)
Rusia posee 815 millones de hectáreas de espacios forestales en forma de bosques, representando el 22% de la superficie forestal del mundo. La mayor parte son bosques boreales o taiga, que son bosques fríos dominados principalmente por árboles de coníferas.
Amazonía brasileña (Brasil)
Brasil cuenta con 493 millones de hectáreas de espacios forestales, tanto de selvas como bosques. Por su parte, la Amazonía brasileña ocupa 250 millones de hectáreas, abarcando 9 estados: Amazonas, Pará, Amapá, Roraima, Rondônia, Mato Grosso, Acre, Tocantins y Maranhão. Es el mayor espacio forestal tropical continuo del mundo y el principal sumidero de carbono.
Bosques canadienses (Canadá)
Una parte importante de los espacios forestales correspondientes al bosque boreal y a los bosques templados, está en Canadá. La superficie forestal total de Canadá es de 347 millones de hectáreas, más de 23 veces el espacio forestal que hay en Europa. En Canadá hay ocho regiones forestales mayores, cada una con su propia mezcla de especies, incluyendo coníferas y árboles con flores de zona templada.
Bosque Nacional Tongass (EE.UU.)
Los EE.UU. presentan un espacio forestal de 310 millones de hectáreas cubiertas de bosques. De estas, un 60% son espacios forestales dedicados a la explotación comercial, especialmente para extraer madera.
En el sureste de Alaska está el mayor espacio forestal de los EE.UU., el bosque de Tongass, que abarca 69.000 km². Hasta la década de 1940, la mayor parte de la tala en la Tongass se hacía a mano. Después de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos ha impulsado la tala a escala industrial.
El bosque de Uverito (Venezuela)
El bosque de Uverito ubicado al oriente de Venezuela, en el norte de Sudamérica, es una plantación forestal. El mismo llegó a ser el espacio forestal artificial o paño forestal más grande del mundo.
En sus inicios abarcó una extensión de 600.000 hectáreas, aunque ya en el 2019 solo quedaban 100.00 hectáreas. El árbol dominante es el pino caribe (Pinus caribaea), una especie introducida en ese país con fines de producción de pulpa para papel.
Espacios forestales de México
El espacio forestal mexicano incluye bosques que cubren cerca del 17 % del territorio nacional y selvas que ocupan algo más del 15 % del territorio. De los 7 millones de hectáreas que se manejan forestalmente, solo la mitad se hace con técnicas modernas que pueden garantizar cierta sostenibilidad.
Bosques de Durango
El estado de Durango es uno de los más importantes en producción forestal, a partir de espacios forestales ubicados a lo largo de la Sierra Madre Oriental. El espacio forestal de este estado corresponde principalmente a bosques de pino (Pinus spp.) y bosques mixtos de pino y encino (Quercus spp.).
Un ejemplo resaltante de manejo forestal de estos espacios es la Unión de Ejidos y Comunidades Forestales General Emiliano Zapata (Unecofaez), la cual beneficia a 10.500 familias. Gracias a su manejo sostenible es posible la conservación de un millón de hectáreas de bosque en el noroeste de Durango.
Bosques de Chihuahua
Este estado mexicano es el de mayor extensión y el que posee los mayores espacios forestales del país. Predominan allí los bosques de pino, aunque hay una proporción moderada de bosques mixtos de pino y encino. En total alcanza un área de cerca de 5,1 millones de hectáreas de bosques.
Bosques de Oaxaca
Los espacios forestales de este estado se extienden principalmente por la sierra de Juárez, incluyendo bosques de pino-encino, pino-abeto (Abies spp.) y de pino. Así como también selvas tropicales en las partes bajas, incluyendo selva caducifolia y selva perennifolia. En toda la extensión del estado los espacios forestales alcanzan las 9.000.000 de hectáreas.
Espacio forestal de Yucatán
Una parte importante de la península de Yucatán forma un espacio forestal de selvas tropicales bajas a medias. Dicho espacio ha determinado una actividad forestal de aprovechamiento de los recursos del bosque desde tiempos precolombinos. En los siglos XVII y XVIII la fuente económica principal de la región fue la exportación del árbol palo de tinte (Haematoxylum campechianum).
En tanto que para los siglos XIX y XX fueron el látex del chicozapote (Manilkara zapota) y las maderas finas de la caoba (Swietenia macrophylla) y el cedro (Cedrela odorata). Hoy los espacios forestales de Yucatán están amenazados por la excesiva deforestación.
Empresa maderera mexicana Proteak
En México el espacio forestal artificial o de plantación alcanza cerca de 1 millón de hectáreas. Estos espacios forestales se distribuyen en los estados de Campeche, Chiapas, Chihuahua, Jalisco, México, Puebla, Quintana Roo, Tabasco, Nayarit y Veracruz.
Un ejemplo de ello es la empresa Proteak que opera en los estados de Nayarit y Tabasco. En Tabasco se establecieron más de 20 mil hectáreas de plantaciones forestales comerciales, en sitios donde previamente no había bosques.
Referencias
- Alonso-Velasco, I. y Velázquez-Torres, D. (2019). El contexto geopolítico de la explotación forestal en la Península de Yucatán, México. Perspectiva Geográfica.
- Escárpita-Herrera, A. (2002). Situación actual de los bosques de Chihuahua. Madera y Bosques. Instituto de Ecología, Xalapa, México.
- FAO (2006). Global Forest Resources Assessment 2005. Progress towards sustainable forest management. FAO Forestry paper.
- Ibarra, V. (2008). Espacios forestales y estructura de poder. Una propuesta desde la geografía política. Cuestiones Contemporáneas. Revista mexicana de ciencias políticas y sociales.
- Picos, J. (2013). Industria forestal y mercado de la madera: navegando en la tormenta. 6° Congreso Forestal Español. Sociedad Española de Ciencias Forestales.