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¿Qué es la drunkorexia y cómo nos afecta?


Drunkorexia: qué es y cómo nos afecta (JAVIER ARES) La drunkorexia es una de esas alteraciones psicopatológicas en las que se ve claramente cómo dos trastornos diferentes pueden llegar a reforzarse entre sí. Es por eso que, ante esta clase de complicaciones de la salud mental, es imprescindible actuar rápidamente y buscar ayuda profesional.

En este artículo veremos cuáles son los principales efectos de la drunkorexia y por qué es tan dañina.

¿Qué es la drunkorexia?

La drunkorexia es una alteración psicológica y psiquiátrica por la que las personas que llegan a desarrollar una obsesión psicopatológica con la pérdida de peso o con evitar comer mucho, desarrollan también una relación disfuncional con las bebidas alcohólicas. En la mayoría de los casos, esto se plasma en personas que presentan la sintomatología típica de la anorexia o de la bulimia y que además lo hacen motivadas al menos en parte por la idea de compensar su propensión a beber demasiado alcohol (o con demasiada frecuencia).

Dicho de otro modo, la drunkorexia es un patrón de comportamiento y de pensamiento que resulta dañino para la salud mental porque surge una lógica de acción-reacción entre la ingesta en exceso de bebidas alcohólicas y la evitación obsesiva de sumar calorías.

Normalmente, lo segundo es un “ajuste” que realiza la persona como consecuencia de lo primero, para no ganar demasiado peso a causa de las calorías ganadas con la bebida; sin embargo, también se da casos de personas que comen muy poco para llegar antes a un estado de ebriedad, o incluso personas que, teniendo un problema de adicción al alcohol, deciden ahorrar al máximo recortando en gastos en comida.

Ahora bien, dado que es estas otras versiones de la drunkorexia las causas del problema so muy diferentes, y dado que este o es un concepto definido en los manuales diagnósticos como el DSM-5, en la práctica el término suele ser usado para describir de manera informal únicamente el primero de los patrones de conducta, que muestra una combinación más simétrica entre la adicción y los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) habituales, la bulimia y la anorexia. Se ha visto que la drunkorexia se da sobre todo en mujeres jóvenes, lo cual se corresponde con los datos de prevalencia de estos dos TCA. Además, se sabe que las personas que han desarrollado un trastorno alimenticio tienen un riesgo mucho mayor de desarrollar también un problema de drogadicción.

Conducta en la drunkorexia

¿Cómo nos afecta la drunkorexia?

Tal y como hemos visto, la drunkorexia no es una entidad clínica “oficial” que aparezca en los manuales diagnósticos que utilizan los psicoterapeutas o los psiquiatras. Sin embargo, ha pasado a constituir un concepto útil que es usado por motivos pragmáticos, dado que describe una realidad que, aunque aún no está muy bien estudiada ni delineada desde la teoría, está presente en la práctica cotidiana de los profesionales de la salud mental.

En este sentido, las principales características de la drunkorexia, los aspectos en los que se nota su influencia en las personas, son los siguientes.

1. Dinámica disfuncional de impulsividad y autocontrol

En la drunkorexia se da un patrón de comportamiento caracterizado por la descompensación entre los momentos de autocontrol férreo y los momentos de desinhibición, algo que también ocurre en la bulimia. Así, la persona va “dando bandazos” con su comportamiento en lo relativo a su salud y a la ingesta de calorías.

2. Sentimiento de culpa

Como hemos visto, en la drunkorexia se dan dos componentes aparentemente antagónicos: las ganas de controlar todo lo que se hace, y, por otro lado, la dependencia del alcohol, una droga que como todas las que generan adicción, arrastra a la persona hacia el cortoplacismo y hacia el consumo urgente de sustancias. Eso hace que la persona se sienta muy culpable justo después de darse cuenta de que se ha entregado a los excesos, y esta fuente de malestar, a su vez, actúa como un combustible para esta alteración psicológica, generándose un círculo vicioso.

3. Profundización en la adicción y en el TCA

Sea cual sea el origen de la drunkorexia en cada persona, esta alteración hace que a medida que pasa el tiempo vayan enraizando cada vez más tanto la adicción como el trastorno de la conducta alimentaria, dado que ambos se refuerza mutuamente.

4. Tendencia a ocultar lo que ocurre

Normalmente, las personas con drunkorexia tienden a asumir que los demás no las entienden y que deben ocultar sus problemas con el alcohol y con la comida para no tener que sortear los obstáculos de amigos y familiares intentando hacer que deje de comportarse así (sin olvidar de que se sienten culpables y avergonzadas por lo que les sucede, por lo que intentan mantener un perfil discreto en este ámbito de sus vidas).

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Mi nombre es Javier Ares y soy Psicólogo General Sanitario especializado en problemas emocionales, de ansiedad y de pareja en adultos y adolescentes. Ofrezco sesiones presenciales y también en la modalidad online por videollamada.