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Cómo se nombran los óxidos

Un óxido es un compuesto químico que surge de las combinaciones de un elemento metálico o no metálico con el oxígeno. Por ejemplo: óxido de calcio (combinación entre calcio y oxígeno), dióxido de azufre (combinación entre azufre y oxígeno).

Habitualmente los óxidos se forman cuando los elementos químicos se combinan con el aire o con el agua, que tienen gran presencia de oxígeno, lo que provoca un desgaste en los elementos, especialmente cuando se trata de metales. Para remediar esto, muchas veces se utilizan sustancias antioxidantes.

Dentro de los óxidos suele hacerse una clasificación de acuerdo al elemento con el que se combina el oxígeno:

  • Óxidos básicos. Son compuestos químicos que se obtienen producto de la combinación de un elemento metal con el oxígeno.
  • Óxidos ácidos. Son compuestos químicos que se obtienen producto de la combinación de un elemento no metal con el oxígeno.
  • Óxidos anfóteros. Están formados por un elemento anfótero y el oxígeno, por lo que estos óxidos actúan como ácidos o bases dependiendo de la reacción en que estén involucrados.

Nomenclatura de los óxidos

Para nombrar a este tipo de sustancias, hay tres posibles formas para hacerlo:

  1. La nomenclatura tradicional (o estequiométrica)

Agrega una serie de prefijos y sufijos al nombre del elemento (metálico o no metálico) dependiendo de la cantidad de números de oxidación que tenga.

Además, si es un óxido básico se escribe ‘óxido de (nombre del metal con sus respectivos prefijos y sufijos)’ y si es un óxido ácido se suele escribir también ‘anhídrido (nombre del metal con sus respectivos prefijos y sufijos)’.

Cuando el elemento solo tiene un número de oxidación:

  • óxido (y el elemento con el sufijo incorporado -ico)’. Por ejemplo: óxido potásico (K2O).

Cuando el elemento tiene dos números de oxidación:

  • Para el mayor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el sufijo incorporado -ico)’. Por ejemplo: óxido férrico (Fe2O3)
  • Para el menor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el sufijo incorporado -oso)’. Por ejemplo: óxido ferroso (FeO).

Cuando el elemento tiene tres números de oxidación:

  • Para el menor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el prefijo ‘hipo’ y el sufijo -oso)’. Por ejemplo: anhídrido hiposulfuroso (SO)
  • Para el número de oxidación intermedio: ‘óxido (y el elemento con el sufijo -oso) Por ejemplo: anhídrido sulfuroso (SO2).
  • Para el mayor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el sufijo incorporado -ico). Por ejemplo: anhídrido sulfúrico (SO3). En este caso utilizamos la palabra ‘anhídrido’ porque el azufre es un no metal, debido a que estamos hablando de óxidos ácidos.

Cuando el elemento tiene cuatro números de oxidación:

  • Para el menor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el prefijo hipo- y el sufijo -oso)’. Por ejemplo: anhídrido hipocloroso (Cl2O).
  • Para el número de oxidación que le sigue: ‘óxido (y el elemento con el sufijo -oso). Por ejemplo: anhídrido cloroso (Cl2O3).
  • Para el siguiente número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el sufijo incorporado ‘ico’)’. Por ejemplo: anhídrido clórico (Cl2O5).
  • Para el mayor número de oxidación: ‘óxido (y el elemento con el prefijo ‘per’ y el sufijo ‘ico’)’. Por ejemplo: óxido perclórico (Cl2O7).
  1. La nomenclatura sistemática

Esta nomenclatura es más sencilla que la tradicional, y se nombra al óxido escribiendo la palabra ‘óxido de’ y luego el nombre del elemento, pero escribiendo antes de cada uno de ellos el prefijo que corresponde al número de átomos que tiene en ese compuesto químico.

El prefijo mono- es para un solo átomo, el prefijo di- para dos, el tri- para tres, el prefijo tetra- para cuatro, el prefijo penta- para cinco, el prefijo hexa- para seis, el prefijo hepta- para siete y el prefijo octa- para ocho.

En este grupo se inscriben, por ejemplo, el monóxido de dicobre (Cu2O), el trióxido de dialuminio (Al2O3), el dióxido de carbono (CO2), o el monóxido de diflúor (F2O).

  1. La nomenclatura de Stock

Se escribe la palabra “óxido”, seguida del nombre del metal y del número de oxidación con que trabaje, entre paréntesis y en números romanos. Análogamente a la nomenclatura tradicional, se escribirá óxido de cloro (I) para el óxido hipocloroso (Cl2O), óxido de cloro (III) para el óxido cloroso (Cl2O3), óxido de cloro (V) para el óxido clórico (Cl2O5), y óxido de cloro (VII) para el óxido perclórico (Cl2O7).

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