Tiranía
La tiranía es una forma de gobierno no democrático en el que el poder es detentado por una sola persona de manera despótica.
La tiranía es una forma de gobierno cuyo origen lo encontramos en la antigua Grecia, siendo muy común entre los siglos VII y V a.C. Como tal, fue estudiado y desarrollado teóricamente por los filósofos griegos, los más relevantes Platón y Aristóteles.
Por ello se encuadra dentro de una tipología antigua, podríamos decir que descatalogada. Ya que con el devenir de la historia y la complejidad que han ido adquiriendo las sociedades, la tipología que clasifica a los diversos regímenes (tanto democráticos como autocráticos) ha cambiado mucho.
Como consecuencia, tiranía se ha convertido más en un adjetivo que en tipo de gobierno. Ya que la tiranía era ejercida por solo una persona y de una forma despótica, no democrática y sin la búsqueda del bien común, se suele atribuir el término a regímenes que cumplen estas características.
Por ejemplo, la URSS está clasificada como un régimen totalitario debido a muchos elementos que dan sentido a ese término. Pero como Stalin era un gobernante que ejercía el poder de forma despótica y él era sobre el que giraban todas las decisiones gubernamentales, se puede decir y se dice que la URSS de Stalin, a pesar de ser un régimen totalitario, también era una tiranía. A pesar de ello, se suele usar más en este sentido el término de “tirano”, más que tiranía como elusión al sistema en conjunto.
Características de una tiranía
Entre las características más importantes de una tiranía se encuentran:
- Poder detentado por una sola persona.
- Toma ilegítima del poder.
- La forma en la que se realiza el gobierno es injusta y represiva.
- Ausencia de libertades civiles y de derechos políticos.
Tiranía en la antigua Grecia
Para Platón, filósofo griego perteneciente a la Academia, la tiranía deriva de la democracia cuando esta se degrada y se corrompe. Y la causa es el exceso de libertad, en la democracia se realizan muchos cambios de gobierno, y poco a poco estos se van degradando hasta que llegan los más ineptos e incompetentes y propician el cambio hacia la tiranía.
Según Platón, el gobernante se convierte en tirano de la siguiente manera. El gobernante finge ser benévolo y escuchar y ayudar a todas las personas con las que se va encontrando en su día a día. Después, con la lucha en guerras y el aumento de los impuestos va asfixiando a la población y obligándolos a dedicarse más a sus vidas y a no conspirar contra él. Finalmente va purgando a todos sus opositores y detractores para consolidarse en el poder.
Para Aristóteles, la tiranía es la peor forma de gobierno, ya que combina los vicios de la democracia y de la oligarquía. El filósofo establece seis formas de gobierno, tres ideales y otras tres que son degradaciones de las anteriores. La tiranía es la degradación de la monarquía, las dos tienen en común que el poder es detentado por una sola persona. Pero se diferencian en el fin que persiguen, la monarquía promueve el bien común, mientras que el tirano lo que busca es el enriquecimiento personal. Según la anaciclosis de Polibio, la tiranía sucede inmediatamente después de la monarquía.