Tesoro
El tesoro es un conjunto de dinero y/u objetos que poseen un alto valor, y que se encuentran usualmente resguardados en un escondite o lugar privado.
Es decir, un tesoro es un patrimonio de gran valor, conformado por billetes, monedas y/o bienes materiales como joyas. Normalmente estos son mantenidos en un sitio al que solo puede acceder su dueño o personas autorizadas por él.
Los tesoros suelen asociarse mucho a las historias de piratas que buscan tesoros escondidos con el fin de aumentar su riqueza y prestigio.
Sin embargo, no siempre los tesoros poseen un alto valor económico. En algunas ocasiones se trata de bienes con un valor sentimental como una carta, una prenda o un objeto de colección. Incluso, puede tratarse de una cosa que aporta conocimiento, como un libro.
Asimismo, se suele hacer referencia como tesoro a una persona a la que se le considera muy valiosa o que posee atributos poco comunes y que deben ser apreciados.
Además, se puede considerar al patrimonio cultural del país (de diverso tipo como el arqueológico o el artístico) como un tesoro.
Tesoro público
En el ámbito económico, se denomina tesoro público (o departamento del tesoro público) a aquel organismo estatal encargado de la administración del erario.
Es decir, esta instancia gubernamental controla el dinero y los bienes (incluyendo valores financieros, créditos y otros) que posee el Estado. Igualmente, se encarga de elaborar el presupuesto público, definiendo cómo se distribuirá entre diferentes entidades y proyectos, incidiendo en la política fiscal del país.
Cabe acotar que también se suele utilizar el término tesoro público para referirse al mismo erario.
Tesoro escondido
Otra acepción de tesoro, según la Real Academia Española (RAE), es el conjunto escondido de monedas o cosas preciosas, y de cuyo propietario no queda memoria.
Este puede ser el caso, por ejemplo, de un tesoro encontrado por buceadores debajo del mar israelí en el 2015. Este consistía en dos millares de monedas de oro de mil años de antigüedad que se encontraban además en buen estado.
Cabe señalar que valiosos tesoros aún se encuentran siendo buscados, por ejemplo, el del galeón español Nuestra Señora de Atocha. Este habría sido azotado por una tormenta en el verano de 1622 cuando partía desde la Habana hacia Madrid, hundiéndose en el mar. En 1985 el buceador Mel Fisher localizó en las costas de Florida algunos restos de dicha embarcación.