Rentabilidad neta
La rentabilidad neta es la rentabilidad total que obtiene un inversor o una empresa después de restar los gastos asociados a esa inversión. Se expresa en unidades monetarias (valor absoluto).
Es lo contrario a rentabilidad bruta, la cual no resta los gastos. Para aquellos que no conozcan el concepto de rentabilidad bruta, recomendamos que lean el siguiente artículo:
Fórmula de la rentabilidad neta
Su fórmula es la siguiente:
Para expresar el margen de la rentabilidad neta, expresado en porcentaje (valor relativo):
¿Para qué sirve la rentabilidad neta?
Cualquier persona física o jurídica que emprende una actividad de inversión debe calcular la rentabilidad neta obtenida, intentando maximizarla.
En la esfera empresarial, la rentabilidad neta equivale al beneficio neto o resultado del ejercicio, que aparece en la cuenta de resultados de la compañía, expresado en unidades monetarias:
Beneficio neto = ventas – coste de ventas – gastos operativos generales – amortizaciones – gastos extraordinarios – intereses financieros – impuestos
Donde «otros gastos operativos» se corresponden con la actividad ordinaria de la compañía, como, marketing, costes de inventario, nóminas, seguros, alquileres, etc.
Según la política contable de la empresa en cuestión y su objetivo, el beneficio neto puede estar sesgado y no reflejar una imagen fiel a su realidad. Las empresas agresivas buscan publicar resultados elevados en la actualidad. Mientras que las conservadoras buscan publicar resultados elevados en el futuro. Las agresivas aplican una especie de “pan para hoy, hambre para mañana” y, las conservadoras, lo contrario.
Las agresivas retrasan el reconocimiento contable de los gastos. Capitalizan costes actuales (dar de alta nuevos activos en balance y amortizarlos anualmente) en lugar de contabilizar el gasto completo en la cuenta de resultados del ejercicio, estiman vidas útiles y valores residuales elevados para sus activos amortizables, suelen seguir sistemas de amortización lineal (en lugar de acelerada) y reconoce los deterioros tarde, entre otras acciones.
Medidas de rentabilidad a partir de la rentabilidad neta
A partir del beneficio neto, podemos calcular otras métricas como, por ejemplo:
- Margen de beneficio neto: se obtiene a partir del beneficio neto. Indica si la compañía está generando suficiente beneficio frente a sus ventas teniendo en cuenta todos los costes asociados. Por ejemplo, una compañía puede experimentar fuertes crecimientos en ventas, pero su beneficio neto no mejoraría si los costes se incrementan proporcionalmente. Se expresa en porcentaje o valor relativo:
- Rentabilidad sobre activos (ROA): Indica el beneficio generado a partir del capital invertido, los activos, pero sin contemplar la estructura de financiación de la compañía (deuda ajena o propia). Mide cuán eficiente es la empresa para generar beneficios teniendo en cuenta todos los activos de la empresa:
Donde los recursos propios medios es la media de los fondos propios de los ejercicios comparados.
Aumentar este ratio implica reducir costes o aumentar precios, ambas medidas orientadas a incrementar el beneficio neto (numerador). También, elevar la rotación de los activos (materias primas, productos, clientes…) para agilizar las ventas y aumentar la rapidez de rentabilizar el activo total.
Este ratio puede tener un matiz en su numerador ya que, si no tiene en cuenta la estructura de deuda, habría que sumar los intereses generados por esta corregidos por la tasa impositiva (t), anulando su efecto en el beneficio neto. Quedaría:
- Rentabilidad sobre fondos propios: mide la capacidad de una empresa para generar beneficios para sus accionistas y sí tiene en cuenta la estructura financiera de la empresa, a diferencia del ROA, que solo contempla activos:
Donde los recursos propios medios son la media de los fondos propios del número de ejercicios que estemos calculando.
El ROE de una empresa se compara contra los peers de su sector, recogiendo sus peculiaridades. Lo deseable son ROEs elevados que reflejen una elevada rentabilidad. Sin embargo, aquellos excesivamente elevados pueden estar manifestando problemas relacionados con grandes niveles de deuda, entre otras cosas.