Objetivos sociales de una empresa
Los objetivos sociales de una empresa son aquellos fines que persigue una empresa con respecto a la sociedad con la que convive.
Dentro de los objetivos que debe perseguir una compañía, podríamos decir que los objetivos sociales han penetrado con éxito entre estos. En este sentido, la concienciación de las empresas por corresponder a la sociedad, de tal forma que se compense la aportación que la sociedad ha hecho a la misma, es cada vez mayor.
Por esta razón, la aparición de nuevas metodologías como la responsabilidad social corporativa, así como el informe no financiero, entre otras herramientas, permiten la evaluación de esos objetivos sociales que persiguen cada vez más compañías.
Así, las empresas están tratando, ya no solo de realizar una determinada actividad económica y satisfacer las necesidades, sino de realizar acciones sociales que tengan un enfoque no lucrativo. Es decir, acciones que, impulsadas por las empresas, tengan un impacto positivo en la sociedad.
A través del informe no financiero incluye esos intangibles, o lo que se conoce como “huella social”, que se encuentran dentro de los objetivos sociales de una empresa.
Tal es su importancia, que la directiva europea posee una normativa establecida sobre la obligatoriedad de presentar un informe no financiero, junto al financiero, que recoja todos estos objetivos sociales que desempeña una compañía determinada.
Objetivos sociales de una empresa
Así, entre los objetivos sociales de una empresa podemos destacar innumerables acciones. Desde una donación hasta una aportación en especie, todo ello es un objetivo social.
Esto es, cualquier acción que, llevada a cabo por la empresa, tenga un impacto positivo en la sociedad. Por esta razón, las empresas tratan de desarrollar una relación de acciones que aporte a la misma de una reputación social. Una reputación social que tiene como fin el mejorar la imagen de dicha compañía.
Así, entre los principales objetivos sociales de una empresa cabría destacar:
- Garantizar la sostenibilidad futura del planeta y el medio ambiente: Este es uno de los objetivos sociales principales de una compañía. Sin planeta no hay negocio. Es un objetivo que todas las empresas siguen, siendo su fin garantizar la explotación futura de su actividad, en un entorno favorable para la misma.
- Generar riqueza de forma eficaz y eficiente: Las empresas tienen la misión de generar riqueza, además de hacerlo de forma eficaz. Es decir, generar riqueza utilizando los menores recursos posibles.
- Cumplir con la normativa establecida: Otro de los objetivos de las empresas es el compromiso con la normativa y las obligaciones adquiridas. Por ello, las empresas deben encargarse de supeditar que el cumplimiento de esta normativa se está llevando a cabo correctamente.
- Ética y responsabilidad con los clientes: Los clientes son uno de los pilares de una empresa. Sin los clientes, incluso la empresa más grande del mundo se vería abocada a la quiebra. Por esta razón, uno de los objetivos sociales de las empresas es cuidar del cliente. Además, cuidándolo a la vez que ofrecemos una gestión ética y responsable. Siempre adaptada a sus preferencias y no al lucro y el beneficio económico.
- Transparencia en la gestión y lucha contra la corrupción: Entre los principales objetivos sociales que persigue una empresa, la transparencia tiene un lugar destacado. En este sentido, la transparencia en la gestión empresarial es clave para una correcta gestión, así como una gestión social. La menor transparencia en la gestión suele estar ligada a fraudes y evasión de impuestos. Así como, también, acciones que no están ligados a la ética y la responsabilidad social de las empresas.
- Respetar a los trabajadores, así como sus derechos y condiciones de trabajo dignas: Otro gran objetivo social de las empresas es ofrecer unas condiciones dignas de trabajo a sus empleados. De modo que, las empresas no solo deben tratar bien a los trabajadores, sino cumplir con la normativa en materia de derechos de los trabajadores.
- Ofrecer valor añadido a los consumidores e implicarlos en la estrategia de la compañía: Otro de los objetivos que priman en una empresa es el ofrecer un valor añadido a nuestros clientes. De esta forma, justificando el precio ofertado. Así pues, la ética empresarial juega un papel determinante, aunque las tareas de los empleados de la compañía debe ser ejemplar en este sentido.
- Mejora continua de los lugares en los que se establece la empresa: Un gran objetivo de la empresa debe ser la mejora continua de la sociedad. Así, una compañía debe enfocarse en la promoción y mejora de aquellas sociedades a las que se enfoca su bien o servicio. Gracias a la mejora continua, los resultados de la empresa se verán correspondidos, a la vez que se produce una mejora social.
Estos objetivos sociales, así como otros que podríamos añadir, complementan lo que las empresas llaman reputación de marca. Este es uno de los principales objetivos y, dada su importancia, lo tratamos por separado. Por lo que a través de los objetivos aquí planteados, las empresas tratan de construir una reputación de marca. Una reputación que promueva una concienciación de la sociedad sobre la importancia de elegir compañías sostenibles y socialmente comprometidas.