Responsabilidad social corporativa (RSC)

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La responsabilidad social corporativa (RSC) se define como el compromiso de la empresa a dirigir sus acciones a la contribución del mejoramiento social, económico y ambiental.

Se trata, por tanto, de una responsabilidad de carácter ético. Esta ha venido aumentando en los últimos años debido a la conciencia creciente en la sociedad sobre la necesidad de que las empresas presten especial atención a cuestiones sociales y medioambientales.

En este sentido, es necesario destacar que, precisamente debido a este auge de acciones éticas, se han elaborado numerosos textos que incentivan y ayudan a las empresas a la hora de llevar a cabo compromisos. Entre ellos, destaca el Libro Verde, un documento elaborado por la Comisión Europea que plantea los estándares de la responsabilidad social corporativa.

Además, están saliendo a la luz cada vez más códigos de buenas prácticas. En este sentido, como el código de buen gobierno, así como otra serie de documentos y lecturas que abordan estos asuntos. Todos ellos con el objetivo de fomentar aspectos como la transparencia o la rendición de cuentas.

En este contexto, instituciones nacionales, regionales o locales establecen recomendaciones a las compañías sobre RSC. A su vez, existen muchas iniciativas para fomentar las buenas prácticas financieras. Estas surgieron, sobre todo, después de la crisis del 2008.Un ejemplo son los programas promovidos por el CFA Institute.

No obstante, todos estos estándares y modelos de gestión son voluntarios. Po lo tanto, cada empresa es libre de adoptarlos o no.

Sin embargo, en algunos casos, como en el código de buen gobierno, si una empresa no quiere llevar a cabo estos compromisos, debe justificar su actuación.

¿Cómo se puede medir el compromiso de sostenibilidad de las empresas?

Como ya hemos mencionado, las acciones de responsabilidad social corporativa son voluntarias. Entonces, hay empresas más y menos sostenibles que otras, pero ¿Cómo saber cuáles son las más sostenibles?

El índice Dow Jones Sustainability (DJSI, por sus siglas en inglés) es una referencia mundial en el ámbito de la sostenibilidad. Este se encarga de analizar el comportamiento de las empresas que cotizan en bolsa desde este punto de vista.

El índice, que cotiza diariamente y está formado actualmente por 342 compañías, identifica en cada empresa analizada los criterios requeridos divididos en tres dimensiones: económica, social y relación con el entorno. En ellas se analizan factores como el gobierno corporativo, la gestión de crisis y riesgos, los códigos de conducta, el respeto al medio ambiente, ecoeficiencia, inversiones sostenibles, desarrollo de capital humano, filantropía, entre otros.

Una vez hecha la evaluación de sostenibilidad a cada empresa, aquellas que cuenten con más acciones sostenibles estarán en la cabeza del ranking.

Sin embargo, el DJSI no es el único índice de sostenibilidad, pues hay otros como el FTSE4 Good. Dicho indicador, creado por la bolsa de Londres, engloba a las empresas que cumplan con requisitos como trabajar por una sostenibilidad medioambiental o defender los derechos humanos universales.