Guerra asimétrica
Una guerra asimétrica es un conflicto, normalmente armado, en el que una de las fuerzas es inmensamente superior a la otra. Con lo cual, la balanza se decanta enormemente por la victoria del más poderoso.
Hablamos de guerra asimétrica cuando uno de los contendientes está en clara superioridad tanto cuantitativa como cualitativa sobre su oponente en los recursos que controla.
Antiguamente, prácticamente el único parámetro que se medía en el análisis de cualquier enfrentamiento bélico era la cantidad de soldados y el armamento que estos poseían. Pero, durante el siglo XX, con el desarrollo tecnológico que ha experimentado el sector armamentístico, la táctica ha cogido un peso casi mayor.
Características de la guerra asimétrica
Vamos a mencionar las características más importantes de la guerra asimétrica:
- Uno de los contendientes es claramente superior al resto en cuanto a recursos, incluidos los no tangibles.
- En algunos casos, el rival en inferioridad desarrolla una llamada guerra de guerrillas.
- El contendiente en superioridad suele ser un Estado que, o bien tiene fines imperialistas o su gasto militar es muy elevado.
- Era muy común en siglos pasados, cuando los imperios arrasaban con los territorios conquistados.
- También tenemos ejemplos en la Edad Contemporánea, como es el caso de la Alemania Nazi cuando comenzó a anexionarse países cercanos. También lo han sido las incursiones norteamericanas en oriente.
- El factor sorpresa puede ser determinante.
- El rival en inferioridad tiene que ser lo más eficiente posible en la gestión de sus recursos para poder tener éxito.
Ejemplos de guerra asimétrica
La historia nos ha dejado numerosos ejemplos de guerras asimétricas a lo largo de ella:
- Conquista de América: La conquista americana por parte del Imperio español fue un ejemplo claro de guerra asimétrica. Los españoles, al igual que otros europeos, contaban con material de guerra muy avanzado en comparación con la de los aborígenes americanos. Estos últimos poseían armas rudimentarias, los españoles contaban con la pólvora, animales de combate y la táctica militar. El único factor a favor de los indígenas, además del territorio, era el número de habitantes. Dicho factor se contrarrestó con las alianzas con algunos pueblos nativos, incluso a algunos se les nombró como parte de la nobleza española.
- Alemania nazi: Cuando el Tercer Reich inició la Segunda Guerra Mundial, con el ataque a Polonia, comenzó una rápida invasión y anexión de los países que más cerca tenía. Y en apenas dos años, en 1941, había conseguido poner bajo su dominio a la mayoría del territorio europeo. Los recursos destinados para la guerra eran inmensamente superiores a la de sus vecinos. Hasta que, con la unión de los aliados, la gran guerra se equiparó.
- Vietnam: A raíz del inicio de la Guerra Fría, a medida que muchos países iniciaron revueltas comunistas con el apoyo de la URSS, Estados Unidos hacía lo propio e invadía o apoyaba a la resistencia con el fin de aplacar dichas revueltas. Se esperaba, por algunos mandos, que el conflicto de Vietnam, iniciado en 1955, concluyera con una rápida victoria estadounidense. Pero no fue así. Para contrarrestar la fuerza del ejército americano, Vietnam del Norte, con gran apoyo de las potencias comunistas, propuso una guerra de guerrillas que perduró durante veinte años. La contienda finalizó con la derrota más humillante y más cara del gigante americano.
Guerra asimétrica económica
En el campo económico, también existen conflictos profundamente desiguales. Ocurren cuando un país o conjunto de ellos aprovechan su fortaleza económica contra terceros en su beneficio.
Un ejemplo de ello lo encontramos en el Holodomor, el genocidio que sufrieron los ucranianos a manos de la Rusia soviética en la década de 1930. La URSS como consecuencia de sus planes de colectivización condenó a toda la población a la muerte por hambruna, eliminando así cualquier viso de movimiento independentista.
Otro ejemplo más conocido lo tenemos en las sanciones y bloqueos económicos llevados a cabo por Estados Unidos contra países socialistas y comunistas como Cuba, Venezuela y Corea del Norte. Estas limitaron el comercio internacional y la subsistencia de las naciones afectadas.
A menor escala, vemos este tipo de guerra cuando grandes empresas hacen técnicas como el dumping, eliminando competencia y asegurándose el monopolio u oligopolio del mercado.
Guerra asimétrica nuclear
Los enfrentamientos nucleares también son de especial mención en el caso que nos ocupa. Las armas y bombas nucleares tienen un poder de devastación totalmente fuera de lo conocido por cualquier otra arma. Por ello, aquellos países que las poseen ejercen una gran intimidación al resto.
Esta asimetría, de que unos las tengan y otros no, viene dada por el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares, el cual entró en vigor en 1970. El tratado especificaba que, por unas u otras razones, solo unos pocos países estaban autorizados a poseerlas. Esto genera una gran asimetría entre los países del mundo.
Algunos autores, paradójicamente, afirman que estas armas han sido las garantes de la paz mundial vivida en occidente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Esto, ya que la amenaza de su destrucción ha limitado su uso.
Guerra asimétrica cibernética
Este es otro tipo de guerra asimétrica, mucho más moderna que las anteriores. Aunque una guerra cibernética no tiene por qué ser asimétrica, sí que se han dado algunos casos en los que sí lo ha sido. También se le conoce como guerra tecnológica o ciberguerra.
Este conflicto tiene otro campo de batalla: la red. Es por ello por la que los diferentes países con capacidad cibernética desarrollan defensas con el fin de proteger su información y no sea robada o utilizada por sus enemigos.
Algunos de los ataques más conocidos que se suelen realizar son: boicots, espionajes y revelación de secretos. Así, si quien realiza el ataque está más preparado y su fuerza tecnológica es mayor, hablaremos de asimetría en el conflicto.