Contracción económica

Una contracción económica es un tipo de hecho económico. En este, la economía sufre una reducción general en la producción de bienes y servicios en un mercado. Así, como consecuencia de la reducción, el producto interior bruto (PIB) se ve coyunturalmente mermado. En este sentido, el receso en la producción de bienes y servicios puede ser ocasionado por factores externos e internos. Factores externos como el tiempo o la naturaleza, así como, factores internos como la regulación, los impuestos, etc.

Los distintos escenarios de contracción y expansión de la economía van muy ligados a los ciclos de producción de bienes de una economía.

Tanto contracción como recesión hacen alusión a un escenario en el que la producción de bienes y servicios se ve reducida, provocando caídas en el PIB. Sin embargo, una recesión económica no es lo mismo que una contracción económica. La principal diferencia que encontramos, aunque ahora citaremos las principales, está en el factor tiempo.

Así, una contracción económica es un suceso económico en el que la economía sufre una reducción general en la producción de bienes y servicios. Sin embargo, esta reducción suele estar muy acotada en el tiempo, por lo que es un escenario de carácter coyuntural.

Por otro lado, la recesión económica también es un receso en la producción de bienes y servicios, como su nombre indica. Sin embargo, como parte del ciclo económico, la recesión económica suele presentar un periodo de tiempo más amplio que la contracción. No tiene un carácter estructural, pero sí persistente en el medio plazo.

Aunque estas son las diferencias, en la jerga económica, muchos economistas no presentan distinciones entre recesión y contracción. En este sentido, para ellos, la contracción es el punto de inflexión en el que la economía deja de crecer para entrar en una recesión.

Como veníamos diciendo, una contracción económica es un suceso económico en el que la economía sufre una reducción general en la producción de bienes y servicios en un mercado. Sin embargo, esta definición puede ser un poco ambigua, cuando la contrastamos con la de recesión económica.

Por ello, a continuación detallamos las principales características que tipifican una contracción económica:

• El producto interior bruto (PIB) se contrae en el corto plazo.
• Esta suele darse de forma imprevista.
• El periodo de tiempo, aunque puede extenderse y derivar en recesión, no suele ser largo plazo.
• Suele darse por situaciones y escenarios eventuales.
• Si no deriva en recesión, los crecimientos siguen tras su paso.

Aunque existen más características, en Economipedia hemos seleccionado aquellas que consideramos que cumplen con la función para que el lector pueda diferenciar claramente este concepto del de recesión económica.

Un ejemplo de contracción económica ocurrió en Alemania en el año 2019. En el segundo trimestre del año, su PIB se contrajo un 0,2%. Si el tercer trimestre del año su PIB se hubiera vuelto a reducir, entonces hubiera entrado en recesión económica (dos trimestres consecutivos de reducción del PIB).

Sin embargo, en el tercer trimestre de 2019 su economía creció un 0,1%, por lo que no entró en recesión económica. Este sería un ejemplo de contracción económica pero sin recesión económica.