Cantidad demandada de un bien
La cantidad demandada, llamada a menudo simplemente demanda, es el número de unidades que un individuo desea adquirir de un determinado bien o servicio. Esto, dadas las condiciones del mercado.
En otras palabras, este concepto se refiere al número de unidades de un producto que se pueden, y quieren, adquirir; teniendo en cuenta el precio dado en un momento determinado. Además, influyen otras variables como el nivel de renta de los individuos, el precio de bienes y servicios complementarios y sustitutivos, la localización geográfica del demandante y sus preferencias, entre otros.
La cantidad de demanda es uno de los elementos clave a la hora de formular la función de demanda. Dicho sea de paso, una herramienta importante del ámbito de la microeconomía.
Cabe recordar que la relación entre la cantidad demandada y el precio determina la existencia de la ley de demanda. Dicha regla afirma que, a mayores precios, los demandantes querrán comprar menos que a precios más bajos, donde la demanda será mayor.
Es importante destacar que la cantidad demandada no tiene por qué coincidir con la cantidad que acaba comprándose. Esto, porque en muchos casos los productores del bien o servicio en particular no ofrecen su producto al precio que el consumidor desea.
Cantidad demandada y curva de demanda
Como observamos en el gráfico, en la curva demanda, a cada cantidad demandada le corresponde un precio y viceversa. Cuando el usuario se traslada de un punto a otro, se llama movimiento a lo largo de la curva de demanda.
Sin embargo, existen ocasiones en las que los cambios son producidos por algún elemento externo que afecta la cantidad demandada, como un aumento en la renta del usuario. En ese caso, se debe desplazar la función de demanda, ya que serán necesarios nuevos valores (tal como se ve en la imagen).
Conceptualmente se deduce tras lo anterior que la cantidad demandada o demanda es una herramienta útil para conocer y evaluar el comportamiento de los compradores en diferentes mercados. Así como sus reacciones ante los habituales cambios que se producen en ellos.