Área metropolitana

Probablemente has escuchado este concepto en tu país, ya que en la mayoría de los países existe  una. Se trata del área metropolitana, un centro urbano de concentración y gran cantidad de habitantes, con importante actividad económica y donde convergen más de dos ciudades.

Las áreas metropolitanas tienen varios aspectos en común, ya que son centros donde existen oportunidades de empleo, emprendimiento y desarrollo económico, donde habitan muchas personas y en las cuales constantemente están emigrando personas.

Algunas de sus características principales son las siguientes:

• Concentran gran cantidad de habitantes (más de un millón).
• Son el conjunto de varias ciudades divididas imaginariamente por calles colindantes.
• Existen centros comerciales, financieros y productivos, lo que atrae la oferta de empleo.
• Las periferias de las áreas metropolitanas son habitadas por trabajadores de la mano de obra productiva.

Estos centros urbanos al ser un polo importante de desarrollo económico, requieren de gran cantidad de personas para trabajar en ellas en distintas labores. Desde la mano de obra directa, hasta profesionales capacitados para supervisar y dirigir las empresas e industrias.

Esto constituye grandes oportunidades para las personas que habitan en ciudades cercanas, como también, para quienes viven en sectores menos urbanos o rurales y están en busca de oportunidades laborales que en sus territorios no existen.

Paralelamente, las áreas metropolitanas poseen un ordenamiento territorial coherente con sus necesidades. Esto quiere decir que se puede encontrar la cadena completa de producción que permite su funcionamiento.

Encontramos en ellas:

• Escuelas y jardines infantiles.
• Universidades con oferta formativa relacionada a lo que el área metropolitana y el país demanda.
• Empresas y compañías industriales que ofrecen empleo y oportunidades.
• Bancos y centros financieros.
• Servicios de entretenimiento, ocio y esparcimiento.
• Centros de salud con la tecnología necesaria para atender las necesidades de la metrópolis.
• Medios de transporte que conectan las ciudades que componen el área metropolitana.

Vivir en un área metropolitana es vivir en un lugar donde no existe el final del día, o bien, de funcionamiento constante. Es por ello que, por ejemplo, a Nueva York, una de las áreas metropolitanas más conocidas en el mundo, se le denomina “la ciudad que nunca duerme”. Precisamente porque su nivel de actividad económica es tan potente, que no se permite detener los sistemas productivos, porque a toda hora existe demanda o necesidad de algo: alimentación, salud, entretenimiento, etc.

Los países que cuentan con una sola área metropolitana en su capital, generalmente centralizan su actividad económica en esa zona geográfica, aspecto que tiene ventajas y desventajas, pero que por cierto, son claves al momento de medir el crecimiento económico del país.

Ventajas de las zonas metropolitanas:

• Concentran oportunidades de empleo, emprendimiento y proyección de vida, debido a la presencia de servicios.
• Permiten la movilidad de una ciudad a otra a bajo costo, ya que el transporte público se articula como en una gran ciudad. Cuestión que si tuvieran mayor distancia geográfica sería más costoso.
• Las alternativas de empleo son mayores y más diversas, dando oportunidad a personas con menor cualificación laboral.
• Permiten el intercambio comercial de bienes y servicios con el extranjero, gracias a la presencia de aeropuertos internacionales, o bien, puertos o terrapuertos que salen del país.

Desventajas de las zonas metropolitanas:

• La celeridad con la que funciona consume el tiempo de las personas, ya que gastan en tiempos de desplazamiento y trabajo, reduciendo la calidad de vida con sus familias.
• Los niveles de contaminación atmosférica son más altos debido a la emisión de gases contaminantes provenientes del transporte público e industrias emplazadas en ella.
• La urbanidad y el desarrollo económico atrae a atención de la delincuencia, por lo que son zonas más riesgosas y con mayor probabilidad de ocurrencia de hechos delictivos.
• El costo de la vida es superior a otras ciudades que no son metropolitanas, dada la plusvalía de vivir cerca de las oportunidades.

Las áreas metropolitanas están en constante crecimiento, y además, cada día nuevas ciudades tienen proyección de ser áreas metropolitanas, por lo que en el futuro esta realidad será de muchas más personas.

Esto supone desafíos adaptativos, tanto para las personas en su rol de trabajadores, emprendedores o habitantes, como  también, de los Estados, quienes deben velar por un ordenamiento territorial adecuado y capaz de atender a las necesidades de todos sus habitantes.

Otro fenómeno que atraen las áreas metropolitanas, junto con la migración interna del país, es la migración de extranjeros, quienes no cuentan con centros urbanos de estas características, y que buscan aportar con su fuerza de trabajo al desarrollo de industrias y con ello, lograr el sustento para sus familias, quienes aún viven en países denominados del “tercer mundo”.