American Stock Exchange (AMEX)
American Stock Exchange (AMEX) fue el nombre con el que se conoció al mercado de acciones norteamericano, hoy denominado «NYSE«. Este se caracteriza porque en él cotizan acciones de empresas con una menor capitalización bursátil, en comparación con otras bolsas de valores.
El mercado AMEX, en otras palabras, es una entidad donde se negocian acciones de compañías relativamente pequeñas. Es decir, pequeñas si las comparamos con las firmas que cotizan en la Bolsa de Nueva York, por ejemplo.
En 2008, AMEX fue comprada por NYSE Euronext, que a su vez fue adquirida en el 2013 por InterContinental Exchange (ICE).
Características del American Stock Exchange (AMEX)
Este mercado, AMEX, es conocido por lanzar novedosos productos, creando por primera vez un mercado de opciones en 1975.
Asimismo, en 1993, el mercado AMEX emitió los primeros ETF. Estos son instrumentos de inversión que buscan imitar el comportamiento de los activos que componen un índice bursátil, ya sea de renta fija, variable, divisas, materias primas u otros activos financieros. Se puede decir que son similares a los fondos mutuos, solo que se comercializan como acciones.
Debemos señalar, también, que el AMEX se volvió atractivo para empresas que no cumplían con los estrictos requerimientos de la Bolsa de Nueva York.
Además, en el AMEX es importante la intervención de los market makers, que son empresas o individuos que están dispuestos a comprar o vender un valor en particular cuando sea necesario durante la jornada bursátil.
Estos market makers tienen la obligación de comercializar acciones de compañías específicas en el AMEX. A cambio, ganan por el diferencial entre el bid y el ask, además de comisiones y tarifas. La idea es que los market makers ayuden a mantener un nivel mínimo de liquidez en el mercado.
Historia del American Stock Exchange (AMEX)
La historia del American Stock Exchange (AMEX) se remonta a finales del siglo XVIII, cuando no existía un mercado financiero formal y los brókeres se reunían en cafeterías o en la calle para negociar valores. Estos brókeres se especializaban en comerciar valores de empresas emergentes, es decir, aún en crecimiento, de sectores como petróleo, textiles y ferrocarriles. Así lo recuerda el portal Investopedia.
En el siglo XIX, el mercado bursátil de Nueva York siguió siendo desorganizado. Luego, en 1908 se fundó el New York Curb Market Agency. Esto, con el objetivo de establecer regulaciones a las transacciones bursátiles.
En 1929, se convirtió en el New York Curb Exchange. Este nombre original se puede traducir como mercado de la acera de Nueva York, haciendo referencia a las primeras transacciones bursátiles que se realizaban en la calle.
No fue hasta 1953 cuando la denominación cambió a American Stock Exchange (AMEX).