Definición de webquest
Webquest es un modelo didáctico que consiste en una investigación guiada donde la mayor parte de la información procede de Internet. El concepto fue propuesto por Bernie Dodge (investigador de la Universidad Estatal de San Diego) en 1995.
Este tipo de actividad, afirman sus impulsores, promueve el trabajo en equipo, la autonomía de los estudiantes y la utilización de habilidades cognitivas superiores. Además contribuye a que los alumnos adquieran competencias vinculadas a la sociedad de la información (concepto que hace referencia a la era que el ser humano está atravesando en la actualidad, con un acceso sin precedentes a la información, tanto para su divulgación como para su consumo).
La webquest suele proponer tareas atractivas que invitan al estudiante a adoptar una conducta activa. El pensamiento creativo es necesario para la resolución de los problemas y para el análisis de los enunciados, ya que la actividad requiere de un esfuerzo adicional al hecho de responder una pregunta simple.
El primer paso para desarrollar una webquest requiere de un espacio en Internet, ya sea a partir del desarrollo de un sitio web, un blog o alguna publicación semejante. El docente debe incluir una introducción al proyecto, la tarea a desarrollar, los recursos sugeridos y una evaluación, entre otras secciones.
Una webquest puede ser de corta duración (cuando tiene el objetivo de la adquisición e integración de conocimientos de una materia en el corto plazo) o de larga duración (cuando se pretende que el estudiante logre desarrollar capacidades de deducción, inducción y abstracción).
Es importante distinguir entre la webquest y la denominada caza del tesoro. Mientras que en la primera actividad el estudiante debe transformar y procesar la información, en la caza del tesoro simplemente se le pide que halle la respuesta a una pregunta dada.
A pesar de su utilidad, las webquests representan una de las tantas herramientas que los docentes tienen a su disposición y no son adecuadas para alcanzar cualquier objetivo educativo. Específicamente, resultan poco efectivas para la memorización de hechos históricos, para el aprendizaje de procedimientos simples y para la adquisición de nuevas definiciones.
Para completar con éxito una webquest es necesario tener un buen nivel de comprensión lectora; por lo tanto, no son apropiados para los estudiantes más pequeños o para aquellos que presentan dificultades en el uso del lenguaje. Sin embargo, es posible aprovechar la asistencia de personas adultas dispuestas a leer en voz alta los enunciados y la información, para guiar a los niños que no pueden completar las actividades por sí mismos.
En términos técnicos, una webquest no es otra cosa que una sencilla página web, por lo cual las herramientas necesarias para su desarrollo son las mismas que se utilizan para crear cualquier otro tipo de documento para la Red. Los usuarios más avanzados, que confían en sus conocimientos lo suficiente como para no requerir de asistencia constante a la hora de programar, suelen valerse del bloc de notas incluido en su sistema operativo o bien aplicaciones similares a Notepad++, un editor de texto de fuente abierta muy popular entre los programadores de todos los lenguajes.
Para aquellos que aprecian la seguridad que les brinda un revisor de sintaxis existen diversos programas, tales como FrontPage y Dreamweaver, que permiten la creación de páginas web en poco tiempo y a través de interfaces gráficas, que eliminan la necesidad de programar cada línea de código, y ahorran tiempo a quienes valoran más la estética que la exactitud.
Existen, asimismo, sitios que se dedican específicamente a la creación de webquests, como ser Questgarden y Zunal, que guían a sus usuarios paso a paso en el proceso. Por otro lado, los docentes pueden hacer uso de los numerosos servicios de páginas gratuitas y blogs, y adaptarlas al formato de la webquest; dos proveedores muy visitados con este propósito son WordPress y Edublogs.