Definición de usual
Usual, del latín usualis, es un adjetivo que refiere a algo que es común o que se usa con frecuencia. Por ejemplo: “Cuando llegas a París, lo más usual es visitar la Torre Eiffel”, “Es usual en este país que las mujeres usen un velo para taparse el rostro”, “Salir del estadio de fútbol e ir a comer pizza es muy usual”.
Lo usual, por lo tanto, está dado por una cierta frecuencia en las acciones o conductas. Su significado sólo puede entenderse dentro de una determinada sociedad ya que lo que es usual dentro de una comunidad puede resultar muy extraño en otra.
El hecho de que dos hombres que apenas se conocen se saluden con un beso en la mejilla es usual en muchos países latinoamericanos. Sin embargo, ese mismo acto es infrecuente en otras latitudes, donde el beso se reserva a relaciones muy cercanas y, quizás, no se da en cada encuentro, sino después de largos períodos de separación.
En Uruguay, caminar por la calle con un termo mientras se disfruta de un mate es muy usual. Se trata de una costumbre que no genera asombro ni llama la atención. En cambio, un hombre que ceba mate por una calle estadounidense puede resultar una curiosidad o incluso despertar sospechas al cuerpo de seguridad, dado el aspecto de la yerba.
El famoso actor Viggo Mortensen, nacido en la ciudad de Nueva York en el año 1958, es reconocido por millones de personas por su interpretación del personaje Aragorn en la adaptación de «El Señor de los Anillos» que realizó el aclamado director Peter Jackson. Sin embargo, Mortensen pasó parte de su infancia en Venezuela y Argentina, y guarda un especial cariño por estos países. En uno de sus viajes internacionales, fue detenido en un aeropuerto por llevar paquetes de yerba, dado que su aspecto fue confundido por el de la marihuana, más usual en los Estados Unidos.
Las costumbres tienen un peso que sólo se puede apreciar tomando una cierta distancia, comparando dos o más países, sus ciudades… Mientras uno vive en el sitio en el que nació, no puede apreciar con claridad la intensidad de ciertas diferencias culturales, que algunas expresiones no tienen equivalente en otro idioma o en otra región, que actitudes consideradas normales en su territorio pueden ser delitos en otro.
Las palabras también pueden entenderse como usuales o poco usuales. Si alguien comenta que “Juan suele decir un montón de disparates”, es una expresión coloquial que no genera ningún tipo de extrañamiento. Distinto es el caso de alguien que expresa: “Juan suele pronunciar un acervo de dislates”. Algunos de esos términos, como “acervo” o “dislates”, son poco usuales en el habla cotidiana.
Los idiomas atraviesan una inevitable evolución, que acarrea un gran número de cambios, entre los que se encuentran la frecuencia y el contexto en los cuales se utilizan ciertos vocablos; en muchos casos, el paso del tiempo arranca definitivamente una palabra del vocabulario cotidiano, quedando únicamente en la literatura que pasa a considerarse clásica o antigua, como si de una foto en blanco y negro guardada en una pequeña cajita de recuerdos se tratara.
Sin embargo, una palabra que ha dejado de ser usual en el habla cotidiana puede regresar al cabo de unos años, ya que los giros de esta compleja y maravillosa evolución son impredecibles; a veces, un término que había pasado décadas en los confines de la Real Academia Española, vuelve para renovarse a través de nuevos matices y goza de una nueva era de esplendor.
“The usual suspects” (traducida como “Los sospechosos de siempre”, “Sospechosos comunes” o “Sospechosos habituales”), por último, es el título de una película estrenada en 1995 que protagonizaron Kevin Spacey, Gabriel Byrne, Benicio del Toro y Stephen Baldwin.