Definición de simetría radial
El vocablo latino symmetrĭa llegó al castellano como simetría, un término que refiere a la correspondencia existente entre el tamaño, la posición y la forma de los componentes de un todo. Radial, por su parte, se vincula al radio (el segmento que relaciona una circunferencia con el centro del círculo).
Si nos posicionamos en el ámbito de la biología, la simetría hace referencia a la disposición del cuerpo y de sus partes respecto a un eje, un centro o un plano. En este sentido, se habla de simetría radial cuando se contempla un eje de tipo heteropolar (es decir, que resulta diferente en sus extremos).
La simetría radial, por lo tanto, divide el cuerpo en un lado oral (aquel que alberga la boca) y un lado aboral, también conocido como lado abactinal (el lado opuesto al lado oral). Dicha división está hecha por un eje sobre el cual se determinan los planos de simetría que definen, a su vez, las posiciones per-radiales.
En comparación con la simetría bilateral (que divide al cuerpo en una mitad izquierda y una mitad derecha), la simetría radial es considerada como primitiva. Es importante mencionar que la simetría bilateral favorece la cefalización y el desarrollo de un sistema nervioso central.
Entre los animales que disponen de simetría radial de distinta clase, es posible encontrar equinodermos, anémonas y esponjas. Una de las particularidades de los animales con algún tipo de simetría radial es que suelen contar con receptores sensoriales que se distribuyen de manera regular en toda la periferia corporal.
En términos más generales, podemos decir que existen grandes grupos de organismos que suelen presentar la simetría radial, así como sus especializaciones. Entre ellos se encuentran los animales sésiles, los cuales se caracterizan por la ausencia de un órgano que puedan utilizar como soporte o pie.
En el caso de las plantas, las hojas sésiles son aquellas que no tienen unión con el pecíolo o tallo; las flores sésiles, por su parte, no poseen pedúnculos; las anteras, en cambio, se consideran asi cuando su filamento es muy corto o está ausente. Los animales sésiles son aquellos organismos acuáticos que se desarrollan arraigados, agarrados o adheridos a su sustrato.
Dicha relación de los animales sésiles y sus sustratos no se limita a la etapa de crecimiento, ya que se mantienen junto a ellos y no se desplazan sobre los mismos. Es común que los organismos pertenecientes a la comunidad denominada bentos pertenezcan a esta clasificación (los bentos son aquellos que viven en el fondo de un ecosistema acuático).
Algunos de los organismos considerados sésiles, muchos de los cuales presentan simetría radial, son los siguientes: los corales, las esponjas, ciertos moluscos bivalvos (entre los que se encuentran los mejillones y las ostras, aunque quedan fuera las almejas), los braquiópodos y los briozoos. Los crustáceos del orden cirrípedos también son sésiles, y esto se puede apreciar en los balanos y los percebes.
Como puede apreciarse en la definición de los animales sésiles, uno de los rasgos mencionados es el sedentarismo, y esto también aparece en varios ejemplos de organismos con simetría radial.
Por otro lado se encuentran los animales pelágicos a la deriva. Se trata de aquellos organismos que viven en la parte del océano que no se halla encima de la plataforma continental. Dicha zona se denomina pelágica (también es posible referirse a ella como «piélago») y representa la imagen que la mayoría de las personas tenemos del océano en sí, ya que cuando se acerca a la costa solemos hablar de «mar».
La simetría radial beneficia a los animales pelágicos a la deriva ya que les da la habilidad de moverse en cualquier dirección por igual, gracias a la disposición regular de sus receptores y estructuras.