Definición de sacramento
Sacramento es un concepto que procede del latín sacramentum. En el ámbito de la religión cristiana, se denomina sacramento a ciertos rituales que permiten la acción divina en el ser humano. Un sacramento, en este sentido, es un signo sensible de la gracia de Dios.
Los sacramentos son administrados por obispos o presbíteros. El primer sacramento que recibe una persona es el bautismo, que le permite librarse del pecado original y ser hija de Dios. Veamos éste y otros sacramentos cristianos en detalle, a continuación:
* bautismo: da al ser humano la posibilidad de nacer en la vida de Dios, lo convierte en heredero del cielo, hijo adoptivo de Jesucristo, y le concede el perdón de todos los pecados que cometa (comenzando, por supuesto, por el Pecado Original, el cual se considera inherente a nuestra especie y heredamos de Adán y Eva), además de incorporarlo a la Iglesia y abrirle las puertas al sacerdocio de Cristo;
* confirmación: este sacramento sirve para fortalecer la vida divina, para convertir a los seguidores de Cristo en sus soldados. Se trata de una forma de elevar la gracia bautismal a través de una acentuación de la unión con Dios, de un acercamiento más comprometido a Cristo. La confirmación ajusta el vínculo que hay entre los cristianos y la Iglesia, convirtiéndolos en componentes esenciales de su misión. Además, los ayuda a dar testimonio de su fe a través de los actos que acompañan la palabra;
* eucaristía: se trata del sacramento más común y frecuente entre los creyentes, ya que forma parte de la celebración de la misa. Su objetivo principal es recordar a los cristianos el sacrificio que Jesús hizo por ellos, para salvarlos de vivir en pecado. A través de la transustanciación del vino y del pan en su sangre y su cuerpo, Jesús se hace presente cada día para acrecentar la unión con sus fieles, perdonarles los pecados veniales, protegerlos de los graves y fortalecer la unidad de la Iglesia como institución a través de los lazos de caridad que existen entre Él y los comulgantes;
* reconciliación: también se conoce con el nombre de penitencia y es el sacramento que devuelve la vida divina a aquellos que la hayan perdido a causa de haber cometido un pecado. Para conseguirla, es necesario confesarse de forma individual con un sacerdote, dejando de lado el orgullo y actuando con sinceridad y confianza. La reconciliación brinda a los cristianos la posibilidad de recuperar la gracia divina, los perdona de la pena eterna, los consuela y les da paz interior, además de fortalecer sus espíritus para convertirse en mejores personas, menos susceptibles al pecado;
* unción de los enfermos: a través de este sacramento es posible unir a los enfermos con la Pasión de Cristo para ayudarlos a superar sus momentos de mayor sufrimiento, consolarlos y darles la paz para soportarlos, perdonarlos por sus pecados si no han tenido la oportunidad de confesarse y preparlos para el paso a la vida eterna.
El orden sagrado, que permite que un hombre se convierta en sacerdote, también es un sacramento cristiano, aunque limitado a los varones. Las mujeres, por lo tanto, no pueden recibir este sacramento.
En Argentina, se denomina sacramento a una factura (bollo) cuya masa lleva manteca y, por lo general, se cubre con azúcar. Los sacramentos suelen abrirse al medio para hacer sándwiches de jamón y queso.
Sacramento también es el nombre de diversas regiones y divisiones administrativas, como la ciudad estadounidense de Sacramento (capital de California) y la localidad uruguaya de Colonia del Sacramento.
Por tener su sede en Sacramento (California), hay varios equipos deportivos que llevan este nombre en su denominación: Sacramento Kings (conjunto de la NBA), Sacramento Mountain Lions (fútbol americano) y otros.