Definición de reintegro
Reintegro es la acción y efecto de reintegrar (restituir o satisfacer algo, reconstruir la integridad de algo, recobrar lo que se había perdido). El término puede utilizarse para nombrar al pago de un dinero o de una especie que se debe: “¿Podrías prestarme cien pesos? Mañana, cuando cobre, te los reintegro”, “Aquí tienes el reintegro de las mercancías que me habías dejado en consignación”, “Si no cumples con el reintegro de tu deuda, Don Vittorio Caponieri te hará una visita y no creo que sea amistosa”.
Un reintegro también puede ser la devolución de un dinero que se había desembolsado con algún fin. Un régimen impositivo puede exigir el pago de un monto adelantado al contribuyente; finalizado un cierto periodo, de acuerdo al cumplimiento de ciertas condiciones, el Estado puede reintegrar parte de dicho dinero a quien había pagado.
Otro ejemplo de reintegro se produce cuando una persona realiza un pago para acceder a un determinado producto pero, por distintas circunstancias, finalmente no recibe dicho bien o no puede utilizarlo (por falta de stock, por una falla, etc.). La empresa vendedora, por lo tanto, le reintegrará el dinero (es decir, se lo devolverá).
Hay muchos comercios que se apoyan en la promesa de un reintegro ante la falta de satisfacción para vender productos no muy populares, o bien para impulsar las ventas de nuevos artículos, que el público no haya tenido la posibilidad de probar con anterioridad. En este caso, no es necesario que exista un fallo en su funcionamiento o un defecto de fábrica, sino que basta con que no resulte lo suficientemente atractivo una vez usado como para que se efectúe la devolución del dinero.
En la lotería, un reintegro es un premio que resulta igual a la cantidad jugada. Si compramos un billete que cuesta 10 pesos y ganamos la misma cantidad, se dirá que hemos logrado un reintegro (no ganamos dinero, pero tampoco perdimos, sino que recuperamos lo apostado).
Se conoce con el nombre de subvención a la entrega de un monto de dinero por parte de la Administración a una persona particular, sin que deba devolverlo, con el objetivo de que lleve a cabo una actividad preestablecida que sea considerada de interés público. Esta intervención forma parte de la actividad de fomento. En algunos casos, como los que se exponen a continuación, los beneficiados se ven obligados a efectuar el reintegro de la subvención:
* si obtienen la subvención a través de falsear las condiciones de la solicitud, o bien no declarando información que supieran que les habría impedido el acceso a la misma;
* si incumplen de manera total o parcial el proyecto para el cual la han recibido;
* si no cumplen con las medidas de difusión que se plantean en el momento de la concesión;
* si se resisten u obstruyen de alguna manera los intentos de control y comprobación del uso del dinero, según prevé la Ley, o bien si incumplen las obligaciones de conservación de documentos, de registro o de contabilidad, imposibilitando la verificación del destino que han tenido los fondos.
La obtención de una subvención ayuda a miles de personas a superar situaciones difíciles a nivel económico, tanto para conseguir subsistir como para embarcarse en proyectos de negocios cuando no cuentan con los fondos suficientes. Sin embargo, por cada persona honrada que solicita una ayuda al Gobierno, existen varias que solamente buscan aprovecharse del sistema, y para combatir este abuso existen normas que prevén la posibilidad de que se exija el reintegro del dinero.
Reintegro, por último, es el regreso a una actividad o el hecho de incorporarse de nuevo a un grupo: “El reintegro del gerente tendrá lugar durante la próxima semana”, “Ya tengo las fechas de las vacaciones: mi reintegro está previsto para el día 19”.