Definición de regularidad
Regularidad es la condición de aquello que es regular (que se ajusta a un cierto orden, mantiene una determinada frecuencia o resulta de calidad media o no tan buena). Por ejemplo: “El equipo no logra conseguir regularidad y sólo juega bien de a ratos”, “Si realizas actividad física con regularidad, reduces el riesgo de sufrir diversos trastornos de salud”, “Mi marido no ha trabajado con regularidad en el último año: por eso tenemos muchos problemas económicos”.
La regularidad suele asociarse a algo positivo. En el ámbito del deporte, los equipos aspiran a mantener una regularidad ya que esto implica conseguir una cierta solidez en el funcionamiento, sin evidenciar demasiados puntos débiles. Por eso los deportistas suelen tratar de alcanzar la regularidad: “Rafael Nadal expresó su alegría por el triunfo e indicó que seguirá entrenando en doble turno para alcanzar la regularidad que perdió tras su lesión en la muñeca derecha”.
En ciertos ámbitos, la regularidad está vinculada a la estabilidad. Un automóvil, una computadora (ordenador), una máquina industrial o un sistema informático necesitan regularidad en su funcionamiento. De lo contrario, pueden producirse distintas clases de errores y fallos.
El estudio es una de las actividades que más regularidad demanda para superarlo con éxito, ya que no sólo se trata de tocar cada uno de los temas presentes en un programa, sino de incorporarlos y hacerlos parte de nuestra vida. En el caso de un curso de informática, por ejemplo, no basta con saber de memoria los nombres de las aplicaciones y los sistemas operativos más importantes, ni de repetir automáticamente las definiciones de los diversos lenguajes de programación utilizados para el desarrollo Web: es en el uso y la aplicación regular de dichos conceptos en la práctica que se aprende verdaderamente.
Tras una observación superficial de algunas sociedades occidentales y orientales, una de las diferencias que suelen saltar a la vista es la falta de constancia y dedicación de las primeras, en contraste con la capacidad de centrarse en el desarrollo personal y profesional que parece destacar en las últimas. El término regularidad, en este contexto, puede asociarse a otros conceptos, como ser la perseverancia y la determinación.
La falta de regularidad (conocida como irregularidad), por otra parte, puede resultar negativa en diversos contextos ya que se asocia a violaciones de normas o reglas. Si en unas elecciones se detectan diversas irregularidades, se tratará de un proceso que no se ha desarrollado de manera correcta. Si se concretan sin la regularidad necesaria, con ausencia de las observaciones y las fiscalizaciones del caso, las elecciones resultan fraudulentas.
Este último ejemplo grafica la acepción del término que prevalece en la definición del diccionario de la RAE, ya que en ella se habla más de una acción realizada de acuerdo con una serie de reglas que de la repetición frecuente de una tarea. En este sentido, la observación de los resultados de un procedimiento dado, por parte de un supervisor o de un especialista, suele dar lugar a la emisión de un juicio, que gira en torno a la regularidad o irregularidad de los mismos, según se haya respetado un código determinado o no.
Por otro lado, existe el concepto de regularidad intestinal, que hace referencia a la frecuencia con la cual nuestro sistema digestivo es capaz de completar todo el proceso. También se conoce como ritmo intestinal, y existe un gran número de productos especialmente destinados a mejorarlo, generalmente en forma de yogur, aunque el mejor consejo para tratar cualquier trastorno de la salud parece ser llevar una vida tranquila, evitar los problemas que nos ofuscan y a las personas que nos hacen daño.