Definición de regresión
Regresión es una noción que refiere al acto de regresar o de volver atrás. Con origen en el vocablo latino regressio, el término tiene diversos usos de acuerdo al contexto.
Según la psicología, la regresión es un retroceso hacia un estado o nivel de desarrollo previo. Se trata de un mecanismo de defensa que surge cuando hay un conflicto que el sujeto no logra resolver.
El psicoanálisis suele aludir a la regresión como un retorno a una etapa que ya había sido superada. Muchas veces implica, en este sentido, adoptar nuevamente modos de comportamiento, relaciones y formas de pensamiento que son inferiores en cuanto a su estructuración y su complejidad.
Para entender en qué consiste la regresión, hay que tomar los procesos psíquicos como fenómenos que tienen una trayectoria. La regresión supone que, a partir de un cierto punto, se retorna en sentido inverso hasta otro estadio que había quedado atrás.
Pensemos en una analogía material: si un individuo se encuentra a salvo en una cueva pero al salir advierte un peligro al que cree no poder hacer frente, es probable que vuelva a meterse. Si bien esto puede responder a nuestro instinto de supervivencia, también nos condena a un estado desde el cual no podemos evolucionar mental y emocionalmente. La figura del héroe se caracteriza por su naturaleza temeraria, y en un caso como éste se enfrentaría al peligro a pesar de no tener muchas probabilidades de vencerlo.
De acuerdo con el trabajo de investigación de Sigmund Freud, la regresión tiene lugar frente a impulsos o pensamientos a los que el individuo no pueda adaptarse para aceptarlos. Además, este mecanismo de defensa puede ser tanto transitorio como crónico. Freud también señalaba que durante el desarrollo psicosexual las personas pueden quedar atrapadas psicológicamente en alguno de los estadios, al punto de no poder continuar avanzando. Este fenómeno se denomina fijación.
La intensidad de la fijación definida por Freud está relacionada de forma directa y proporcional con el riesgo de responder con una regresión al estrés psicosocial. Si bien en sus orígenes la aparición de este mecanismo en la edad adulta se asociaba con la neurosis, en el presente se considera algo que puede resultar positivo en ciertas etapas difíciles, con potenciales beneficios para la creatividad y la resolución de problemas.
En este punto es necesario recordar que se trata de un tema con más de un punto de vista y con teorías que todavía al día de hoy continúan evolucionando. Según el celebrado psicoanalista Michael Balint, por ejemplo, existen dos clases de regresión: la benigna (en la infancia y en el desarrollo artístico) y la maligna (asociada con el complejo de Edipo).
La parapsicología, por su parte, habla de regresión para nombrar a imágenes que pueden aparecer en la mente de un individuo acerca de un supuesto pasado que habría vivido en una existencia diferente. Para lograr la regresión, se apela a diversos recursos que alteran la conciencia, como la hipnosis.
Esta pseudociencia sostiene que el ser humano está en condiciones de rememorar vidas pasadas. Con la regresión, así, cada sujeto podría conocer quién fue hace cientos o miles de años y, de este modo, resolver trastornos o traumas actuales. Es importante tener en cuenta que estas afirmaciones no son avaladas por la comunidad científica ya que no existen pruebas empíricas que demuestren su validez.
Del mismo modo, hay muchas personas que aseguran poder hacer uso de la regresión para conocer sus vidas pasadas, y gracias a esto arman negocios de diferentes tipos que les dan mucho dinero pero también ponen en duda su reputación y veracidad por mezclar una cuestión supuestamente tan profunda con el materialismo. Así como sucede con los astrólogos y los videntes, nunca en la historia se ha grabado en vídeo una prueba de sus poderes.