Definición de reacción de sustitución

Como viene siendo habitual a la hora de establecer una definición, el primer paso que se hace necesario llevar a cabo es determinar el origen etimológico de las palabras que dan forma al término. En este caso, es el siguiente:
-Reacción deriva del latín y es fruto de la suma del prefijo “re-”, que significa “hacia atrás”, y “actio”, que a su vez emana del verbo “agere” (hacer).
-Sustitución, por otro lado, también procede del latín, concretamente de “substitutio”, que es equivalente a “efecto o acción de poner a algo o a alguien en lugar de otro”. Esta palabra latina se encuentra conformada por tres partes definidas: el prefijo “sub-” (debajo); el verbo “statuere” (colocar) y el sufijo “-ción” (acción y efecto).

Una reacción química se produce cuando dos o más sustancias interactúan y adquieren propiedades diferentes a partir de alteraciones en su estructura y en sus enlaces. Mediante este produce, una sustancia que recibe el nombre de reactivo se transforma en otra cuyas propiedades son distintas. Al resultado de la reacción se lo denomina producto.

Existen diferentes clases de reacciones. La reacción de sustitución tiene lugar cuando, en un compuesto, un átomo o un grupo de átomos es reemplazado por otro. Esto quiere decir que, mediante la reacción, un elemento desplaza a otro elemento en el compuesto. Por eso también se habla de reacción de desplazamiento.

Asimismo no podemos olvidarnos que estas reacciones de sustitución pueden ser de dos tipos fundamentalmente:
-De simple sustitución, que es cuando una sustancia simple reacciona con otra compuesta, sustituyendo a uno de sus componentes.
-De doble sustitución. Esta también responde al nombre de metátesis y se caracteriza porque el intercambio se produce entre dos elementos compuestos diferentes, dando lugar a sustancias nuevas.

Todo eso sin pasar por alto que las reacciones pueden ser, según su mecanismo, de clase nucleofílica monomolecular o bimolecular.

Se conoce como grupo entrante a los átomos que ingresan en el sustrato (la molécula que alberga el proceso de sustitución), mientras que los átomos expulsados de dicho lugar se denominan grupo saliente. Aquello que resulta de la reacción de sustitución es el producto.

Además de todo lo expuesto, por tanto, tenemos que subrayar que la reacción de sustitución se divide en cuatro etapas fundamentalmente que están definidas por el protagonismo del sustrato, del grupo entrante o reactivo, del grupo saliente y del producto.

Si la reacción se desarrolla con compuestos iónicos en solución, se produce un intercambio de cationes y aniones. En este caso, la reacción de sustitución pasa a denominarse reacción de doble sustitución o reacción de metátesis.

Un ejemplo de reacción de sustitución tiene lugar cuando se sumerge cobre en nitrato de plata. El cobre desplaza los átomos de plata, dando lugar a un compuesto específico (nitrato de cobre).

El bromo y el cloro también pueden generar una reacción de sustitución. En esta operación, el cloro sustituye al bromo. Esta reacción puede esquematizarse con la siguiente fórmula: Cl2 + NaBr -> NaCl + Br2

Definición siguiente →