Definición de radiofrecuencia
El concepto de radiofrecuencia se emplea para nombrar a las frecuencias del espectro electromagnético que se utilizan en las radiocomunicaciones. Para comprender esta noción, por lo tanto, es necesario tener ciertos conocimientos sobre este tema.
El espectro electromagnético se refiere a cómo se distribuye la energía de las ondas electromagnéticas. Este espectro queda determinado por las radiaciones que se emiten. Las ondas, por su parte, suponen la propagación de esta radiación, acarreando energía.
Esto quiere decir que el espectro electromagnético abarca desde las radiaciones con longitud de onda más pequeña (los rayos gamma) hasta las radiaciones con longitud de onda más amplia (las ondas de radio). La frecuencia de las ondas se mide en hercios.
La radiofrecuencia, en definitiva, es la parte del espectro electromagnético que abarca desde los 3 kilohercios hasta los 300 gigahercios. Estas frecuencias se utilizan para las comunicaciones militares, la navegación, los radares y la radiofonía AM y FM, por citar algunas posibilidades.
Dentro de la radiofrecuencia también es posible establecer diferentes divisiones de acuerdo a las particularidades de las frecuencias. En este sentido, se puede hablar desde frecuencias extremadamente bajas hasta frecuencias extremadamente altas, pasando por otros tipos de frecuencias en el medio.
La radiofonía de amplitud modulada (AM), por ejemplo, transmite en media frecuencia. La radiofonía de frecuencia modulada (FM), en cambio, realiza su transmisión en muy alta frecuencia. Las diferentes frecuencias determinan el alcance de las ondas y la calidad de la transmisión, entre otras cuestiones. Las radios AM, en este sentido, pueden llegar con sus señales a mayores distancias en comparación con las radios FM.
Es importante conocer que, en los últimos años, la radiofrecuencia ha ampliado sus “servicios” y ahora, además de seguir empleándose dentro del ámbito de las telecomunicaciones, ha pasado a ocupar un papel fundamental en el campo de la medicina.
Así, por ejemplo, en estos momentos se habla de la conocida como radiofrecuencia facial, que viene a ser un tratamiento que se realiza en el rostro de cara a hacer desaparecer las arrugas que puedan existir en el mismo. En concreto, se trata de un lifting que consiste en aplicar en el rostro la energía de la radiofrecuencia, con el claro objetivo de que la temperatura elevada de 40º que resulte sea capaz de mejorar la producción inmediata de colágeno y también favorezca la elastina.
El resultado de esa acción es que, prácticamente de forma inmediata, la persona no sólo se da cuenta de que sus arrugas han desaparecido o reducido al mínimo sino que además se ha eliminado la flacidez de su cara y así luce ya una imagen mucho más joven y tonificada.
De este tipo de radiofrecuencia se resaltan otros datos de interés tales como estos:
-Es un tratamiento muy seguro.
-Se le da en llamar lifting sin cirugía, ya que en absoluto es una técnica invasiva.
-La persona que se somete a la misma no tiene que ser anestesiada.
-Se puede aplicar en todo tipo de piel y sobre zonas tales como el cuello y el rostro, pero también en los muslos e incluso en lo que es el abdomen.