Definición de prociclidad
El término prociclidad no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE). Tampoco prociclicidad, otro vocablo que suele usarse en nuestra lengua en el terreno de la economía y las finanzas. Ambos conceptos proceden del inglés procyclicality.
Según se publica en puntoycoma, el boletín desarrollado por los traductores españoles de las entidades de la Unión Europea (UE) y por otros profesionales de la traducción, es preferible recurrir a la noción de prociclicidad. De todos modos, no hace falta más que buscar en Google para descubrir que muchos medios de comunicación optan por emplear prociclidad.
Prociclicidad y prociclidad, en definitiva, aluden a lo que ocurre cuando los flujos de créditos y capitales se multiplican en un contexto favorable y luego desaparecen si la situación cambia. Este fenómeno provoca espirales que resultan optimistas o pesimistas de manera excesiva, generando consecuencias exageradas.
Es importante tener en cuenta que los ciclos son normales en el terreno económico. La prociclidad aparece cuando las oscilaciones son muy grandes debido a la magnitud de los picos en el auge y de las depresiones en el momento contrario.
Los especialistas indican que la prociclidad se da cuando se pasa del derroche a la austeridad excesiva y viceversa. Esta tendencia suele ocurrir en aquellos sectores de la economía en los cuales la volatilidad de los precios es habitual.
La lógica de la prociclidad o prociclicidad es fácil de comprender analizando la política fiscal de muchos países. Es usual que, en los periodos de bonanza económica, los gobiernos aumenten mucho el gasto público. Luego, en tiempos de recesión y crisis, ese mismo gasto es reducido todo lo posible. Para los expertos, esto provoca que las etapas de crecimiento sean muy marcadas, al igual que los lapsos de contracción económica.