Definición de preconcepción
La noción de preconcepción no forma parte del diccionario que elabora la Real Academia Española (RAE). El término, de todas formas, suele utilizarse con referencia a la etapa previa a un embarazo.
El concepto está vinculado a los recaudos que una pareja debe tomar cuando decide planificar la concepción de un hijo. De este modo, la preconcepción incluye estudios para determinar el estado de salud de la mujer con vistas a un posible embarazo.
Cuando un médico se ocupa de la preconcepción, puede detectar trastornos que afectarán a la paciente si queda embarazada y al bebé durante su desarrollo. De manera similar, los análisis que se realizan en el marco de los cuidados de preconcepción pueden ayudar a advertir posibles defectos congénitos.
Dentro de lo que sería la preconcepción cobra especial importancia el hecho de que se hace necesario e imprescindible que la mujer tome una serie de medidas no ya sólo para quedarse embarazada sino para que, cuando eso se produzca, su cuerpo y su mente estén lo más preparadas posible. Y es que el periodo de gestación supone muchos cambios, tanto a nivel físico como mental y emocional.
En concreto, la fémina en este sentido es recomendable que apueste por llevar a cabo acciones de preparación tales como estas:
-Acabar con hábitos nada saludables como fumar o tomar alcohol u otras sustancias.
-Vigilar su peso. En este sentido, debe evitar tanto el sobrepeso como la excesiva delgadez.
-Tener una salud envidiable y eso pasa, entre otras cosas, por contar con un perfecto estado a nivel ginecológico y por tener una salud bucodental envidiable.
-Contar con los correctos niveles de ácido fólico.
-Realizar ejercicio físico.
-Llevar a cabo una dieta sana, equilibrada y completa.
De la misma manera, es importante que en la preconcepción la mujer evite caer en errores habituales que puedan dificultar notablemente que quede en estado:
-No debe estresarse si tarda algo más de lo esperado en quedarse embarazada. Esto no es una ciencia exacta y puede haber distintos factores que ralenticen un poco la consecución del objetivo.
-Debe evitar el uso del lubricante durante las relaciones sexuales. Y es que se considera que este producto puede “matar” al esperma.
-No debe abusar de la cafeína.
Es importante destacar que la ausencia de la atención preconcepción no implica necesariamente que la madre tendrá problemas en el embarazo o que el bebé nacerá con inconvenientes. Muchas mujeres quedan embarazadas sin proponérselo y cursan su embarazo con normalidad.
El cuidado en la preconcepción, de todas formas, ayuda a minimizar los riesgos. Planear el embarazo, por otra parte, permite acomodar la vida familiar para recibir al bebé de la mejor manera. Desde planificar la economía pasando por acondicionar la casa y estructurar la nueva vida familiar, siempre resulta positivo prever el embarazo para que nada quede librado al azar.
La atención de la preconcepción, por supuesto, no supone interrumpir o minimizar la atención que la mujer y el bebé deben recibir en el transcurso del embarazo o en las etapas posteriores al alumbramiento.