Definición de prácticas del lenguaje
La idea de prácticas del lenguaje se emplea en el ámbito de la educación para aludir a los contenidos y los ejercicios vinculados a la lectura, la escritura y la comunicación oral. Estas prácticas abarcan desde el conocimiento de las reglas que componen el sistema conocido como lengua hasta el uso de ese código en diversos contextos.
A través de las prácticas del lenguaje, que constituyen una materia o asignatura de la educación formal, se busca que los alumnos puedan desarrollar sus habilidades lingüísticas. Es decir, que optimicen sus capacidades para comunicarse a través de la lengua escrita y oral.
La lectura forma parte de las prácticas del lenguaje.
Prácticas del lenguaje como asignatura escolar
La noción de prácticas del lenguaje suele utilizarse actualmente en reemplazo del término lengua para aludir a la asignatura escolar. De este modo se hace hincapié en que el lenguaje trasciende a la lengua como sistema de signos y se lo relaciona con el pensamiento humano, sirviendo para satisfacer necesidades materiales y participar en la sociedad.
El objetivo educativo es que los estudiantes puedan dominar el lenguaje. Así las prácticas del lenguaje fomentan que cada individuo esté en condiciones de organizar su pensamiento, expresar sus ideas, establecer vínculos sociales y defender sus derechos, por ejemplo.
Es importante tener en cuenta que las prácticas del lenguaje abarcan la lectura, la escritura y la oralidad. Por eso los docentes deben impulsar que los alumnos lean diversos tipos de contenidos y en diferentes contextos; fomentar la creación y la revisión de textos; e incentivar la expresión oral en sus múltiples variedades.
Las prácticas del lenguaje, en definitiva, se asocian a las prácticas sociales que se desarrollan mediante el lenguaje: leer, escuchar, escribir y hablar. El educador no debe limitarse a enseñar los aspectos formales de la lengua, sino que tiene que ir más allá y contribuir a la formación del alumno como ciudadano.
Las habilidades comunicativas pueden desarrollarse gracias a las prácticas del lenguaje.
La importancia de lenguaje
No debemos olvidar que el lenguaje es la mejor herramienta que tenemos a nuestra disposición para participar de nuestra comunidad. Y esto no se termina al recostarnos por la noche, ya que nuestros recuerdos y sueños también se simbolizan mediante el lenguaje. En definitiva, es la llave que nos permite acceder a las diferentes capas de los estímulos que nos rodean, para entenderlos, aprender de ellos y elaborar nuevos que partan de nuestra propia creatividad.
Por medio de las prácticas del lenguaje, los docentes deben ayudar a sus alumnos a comprender que el idioma es mucho más que una asignatura de la escuela, e incluso más que un conjunto de palabras bonitas: como bien se menciona en párrafos anteriores, está en la lectura y en la escritura, pero también en el habla y en la escucha. Dicho de otra manera, nosotros mismos somos el lenguaje, ya que no podemos separarnos de él en ningún momento y por esta razón es tan importante intentar dominarlo.
Cómo desarrollar las prácticas del lenguaje
Uno de los pilares de las prácticas del lenguaje es el uso de referencias pertenecientes a la vida en sociedad para apoyar la enseñanza sobre ellas. De este modo, el alumno obtiene desde el primer momento una visión más práctica del idioma y se interesa de manera genuina por él ya que le encuentra un sentido. No debemos aprender únicamente a hablar con un miembro de la realeza del siglo XVII; de hecho, podríamos vivir muy bien sin esta habilidad, pero no sin saber cómo relacionarnos con la gente de nuestra sociedad, tanto con nuestros pares como con nuestros superiores, en la intimidad y en los ámbitos formales.
La literatura es muy importante para enriquecer los rincones más complejos de nuestra comunicación, y por eso las prácticas del lenguaje deben incluir la lectura, la comprensión lectora y la escritura.