Definición de piso
Piso es un concepto con múltiples usos. Puede tratarse del suelo o pavimento que supone la base de una estructura (como una casa u otro tipo de construcción). Por ejemplo: “Voy a tener que limpiar otra vez el piso ya que se manchó con salsa”, “El niño resbaló y golpeó su cabeza contra el piso”, “Por favor, levanta las sillas al moverlas para evitar que se marque el piso”.
La noción de piso también se utiliza para nombrar a las distintas plantas horizontales que forman un edificio. De esta manera, puede decirse que una construcción tiene cinco pisos, ocho pisos, etc.: “Me mudé a un edificio de veinte pisos con vista al mar”, “El vecino que vive en el piso de arriba tiene un bebé que llora todas las noches”, “Yo vivo en el sexto piso, ¿y tú?”.
Por extensión a esta última acepción, puede decirse que un piso es una vivienda particular o autónoma que forma parte de un conjunto mayor: “Quiero comprar un piso en el centro de Madrid”, “Aún no sé cómo pagaré el alquiler del piso este mes”.
En Argentina, la noción de piso como residencia independiente es más precisa, ya que menciona a la vivienda que ocupa una planta entera (es decir, un piso) en un edificio: “Juana compró un piso sobre la avenida Libertador”, “Vivo en un piso en Caballito que está ubicado cerca del Parque Rivadavia”. Sin embargo, en otros países de habla hispana, piso puede usarse como sinónimo de apartamento (nótese que este último término a veces se reemplaza por departamento).
El piso piloto es una vivienda que utilizan las agencias inmobiliarias para mostrar a los potenciales compradores algunas de las principales comodidades a las que accederán si deciden adquirir una propiedad en el bloque al que pertenece. Se trata de uno de los pisos más espaciosos y atractivos de un edificio, que se amuebla y se decora como si ya estuviese siendo habitado, para que los interesados no se vean limitados a recorrer habitaciones vacías.
El piso piloto, como concepto, ofrece varias ventajas, tanto a los vendedores como a los potenciales compradores; por ejemplo, a aquellas personas que buscan una vivienda muy espaciosa, donde acomodar muchos muebles, les evita la típica sensación que da un piso vacío de ser más grande de lo que es en realidad, simplemente por la falta de elementos para tomar como referencia de sus dimensiones. A la inmobiliaria, por su parte, puede servirle para disimular ciertos aspectos poco atractivos, como ser mala distribución del espacio, a través de una decoración estratégica.
Pero una de las ventajas del piso piloto que cada vez más gente está descubriendo y aprovechando es que su precio puede llegar a ser considerablemente menor al del resto. Esto, que resulta más que tentador en época de crisis, tiene sus claras razones: en primer lugar, no se puede utilizar hasta que no se hayan vendido todos los pisos restantes; por otro lado, dado que las decenas de visitas que recibe a diario durante varios meses supone un desgaste considerable en el suelo y las puertas, el piso piloto no es precisamente a estrenar.
En algunos casos, el descuento realizado sobre el precio del piso piloto puede alcanzar el 25%, una suma muy conveniente para quienes desean mudarse a una zona que excede ligeramente su presupuesto.
Piso, además, es la región horizontal de algo que compone una unidad: “Para mi cumpleaños, quiero una torta de tres pisos”, “Viajé en un vagón de dos pisos y me tocó una butaca situada en la parte superior”.
El piso, por último, puede ser el nivel inferior o mínimo de algo: “Si buscas un automóvil de esta marca, tienes que pensar en gastar un piso de treinta mil dólares”.