Definición de pasivo
Pasivo es un adjetivo que proviene del latín passivus y que cuenta con diversos usos. Una persona pasiva es aquélla que no hace las cosas por sí misma, sino que deja obrar a los demás. La pasividad es una actitud opuesta al compromiso, a la acción constante, a la voluntad de dirigir la propia vida y de involucrarse con todas y cada una de sus etapas.
Se denomina sujeto pasivo a aquél que recibe la acción del agente y que no coopera con ella. Veamos una oración de ejemplo: “Creemos que el acusado es el responsable pasivo de la situación ya que, si bien no tuvo una intención dañina, no puede obviarse su actuación al respecto”.
En la voz pasiva, el sujeto es el receptor de la acción: «El Templo Expiatorio de la Sagrada Familia fue diseñado por Antoni Gaudí».
Voz pasiva vs. voz activa
Desde un punto de vista lingüístico, la voz pasiva permite ubicar al sujeto como el receptor de la acción, la cual es realizada por el denominado complemento agente, a diferencia de lo que ocurre en las oraciones activas. Mientras que en la voz activa se dice «el arquitecto Antoni Gaudí diseñó el monumento de la Sagrada Familia«, su forma pasiva es «el monumento de la Sagrada Familia fue diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí«.
El verbo diseñar es transitivo, lo cual significa que necesita de un objeto directo para completar su significado: la oración «Gaudí diseñó» carece de sentido, mientras que «Gaudí diseñó un edificio» es perfectamente entendible. A propósito de esta clasificación verbal, la voz pasiva transforma dichos verbos en intransitivos, dejando lugar a un solo argumento posible: el complemento agente.
Si bien el castellano admite exclusivamente verbos transitivos a la hora de construir una oración en voz pasiva, existen unos pocos verbos pertenecientes a esta clasificación que no son compatibles con este modo de expresión; por ejemplo, tener y haber jamás forman parte de frases pasivas, como podrían ser «el coche fue tenido por mi padre» o «la casa fue habida«.
Diferentes modos
Cabe mencionar que la voz pasiva mencionada hasta el momento se conoce como analítica y se construye con el verbo ser más el participio del verbo principal de la voz activa. Su uso no es muy común en el lenguaje oral, a diferencia de la voz pasiva refleja (también denominada pasiva con se«), que puede formarse a partir de cualquier tipo de verbo, sea transitivo o intransitivo.
Básicamente, el sujeto debe estar en tercera persona singular o plural y concordar con el verbo; por ejemplo: «se busca cocinero«, «se regalan entradas«. La forma impersonal, por otro lado, no tiene sujeto, por lo cual el verbo siempre debe ir en singular: «se compensará a la/s víctima/s«.
Al valor monetario de compromisos, obligaciones y deudas se lo conoce como pasivo.
Pasivo como pensión y como deuda
Se conoce como pasivo a la pensión o haber que reciben algunas personas gracias a los servicios que prestaron en el pasado o al derecho que se ganaron y que les fue transmitido. Los jubilados, por lo tanto, suelen ser mencionados como la clase pasiva (ya que no genera aportes directos a la actividad productiva de un país).
Para la contabilidad, el pasivo es el valor monetario de las deudas, las obligaciones y los compromisos que gravan a una persona, una empresa o una institución. El pasivo, al igual que el activo, aparece reflejado en los balances contables.
Otros usos del concepto
La noción de pasivo también se utiliza en la sexualidad para mencionar a la persona que, en una relación homosexual, es penetrada por el otro sujeto. El rol del individuo pasivo suele ser sumiso durante la relación sexual, una conducta que puede extenderse hacia otras esferas de la vida en pareja.
Es interesante señalar, por úlimo, que en el habla cotidiana muchas personas suelen confundir el término pasivo con pacífico, probablemente por su similitud ortográfica o sonora. De este modo, individuos tranquilos, que no generan discusiones o que no se dejan alterar por ellas, son erróneamente llamados pasivos.