Definición de liofilización
La liofilización es el acto y el resultado de liofilizar. El verbo liofilizar, en tanto, refiere a un procedimiento que se emplea a la hora de deshidratar un alimento u otro producto que resulte sensible al calor.
En concreto, la liofilización alude a separar el agua presente en una disolución o en una sustancia a través de su congelamiento seguido de una sublimación del hielo a baja presión. El resultado de este proceso es la obtención de un material esponjoso que puede disolverse de manera fácil.
También conocida como criodesecación o deshidrocongelación, la liofilización es un mecanismo de deshidratación. Una vez congelado el alimento, se reduce la presión para conseguir la sublimación del hielo. De esta manera, el agua pasa del estado sólido al estado gaseoso de forma directa, sin atravesar la fase líquida.
Con la liofilización, en definitiva, se puede eliminar el agua de un alimento. Esto contribuye a su conservación y, en muchos casos, favorece el almacenamiento y el transporte.
Se cree que pueblos aborígenes de América del Sur ya apelaban a la liofilización hace miles de años. Estas culturas machacaban productos alimenticios y luego los ubicaban al aire libre en las montañas. A comienzos del siglo XX, el científico francés Arsène d’Arsonval investigó y optimizó el procedimiento de liofilización.
Un paso clave en el avance de la liofilización tuvo lugar en la Segunda Guerra Mundial. En ese entonces, se usó esta técnica para la preservación y el traslado del suero sanguíneo desde Estados Unidos hacia el continente europeo. Actualmente la liofilización se utiliza tanto en el sector alimenticio como en la industria farmacéutica.