Definición de justo
El vocablo latino iustus derivó en justo, un adjetivo que se emplea para nombrar a aquello que resulta conforme a la justicia. Lo justo, por lo tanto, es ecuánime, equitativo, imparcial o razonable.
Por ejemplo: “Me parece justo que me quede trabajando después de hora: hoy entré a la oficina muy tarde”, “Lo justo sería que le devuelvas a Micaela sus discos”, “El intendente afirmó que no es justo que la gente con menos recursos pague obras que utilizarán los sectores más ricos de la población”.
Lo justo es equitativo.
El equilibrio
El calificativo de justo puede aplicarse a una persona cuando se considera que ésta actúa de una manera equilibrada, otorgando a otros lo que corresponde según el caso: “Domínguez es un profesor severo pero justo: castiga a los malos estudiantes y premia a los que se esfuerzan”, “El dueño de la empresa no es un hombre justo ya que siempre favorece a los empleados que forman parte de su familia”.
Una acción también puede definirse como justa o injusta: “La expulsión del delantero brasileño fue justa”, “¿Cómo puedes afirmar que es justo el premio cuando ni siquiera leíste el libro distinguido?”, “Opino que la quita de subsidios es justa”.
Lo justo como lo exacto y lo ajustado
Otro uso del concepto de justo está relacionado con la exactitud. Algo justo, en este sentido, no tiene nada que le sobre ni nada que le falte: “Esta mañana compré una bolsa de manzanas que pesaba justo un kilogramo”, “¿Tiene cambio? No cuento con monedas para pagarle justo”.
Justo, además, es aquello que consigue ajustarse a la perfección o que está apretado: “Este pantalón me queda muy justo y me marca demasiado las piernas”, “El nuevo sillón entró justo entre la mesa y la biblioteca”.
Los fallos de un tribunal deben ser justos.
Un nombre propio
No podemos pasar por alto tampoco que muchos hombres tienen como nombre Justo. Y este se considera que identifica a varones que son sociables, discretos, respetuosos en todo momento con los demás y agradables. Asimismo se considera que son personas a las que les gusta mucho reflexionar sobre la vida y que, a nivel de pareja, son muy fieles al tiempo que afectuosos y algo posesivos.
En Andalucía uno de los humoristas más conocidos tiene precisamente ese nombre. Se trata de Justo Gómez, un malagueño que lleva más de tres décadas haciendo reír sobre los escenarios con sus personajes como son “Justina”, “El Churrete” o “Chanquetito”. Se dio a la fama de manera más generalizada a través de varios programas de televisión en Canal Sur y ha conseguido que el inicio de sus chistes sea ya conocido por todos: “cuajao”.
Asimismo no hay que pasar por alto tampoco en España la existencia de un profesional de los medios de comunicación de gran prestigio y reconocido, entre otros galardones, con un premio Ondas. Se trata de Justo Molinero, nacido en Villanueva de Córdoba, que donde mayor éxito ha cosechado ha sido en Cataluña al poner en marcha el Grupo Tele Taxi. Aquel es un grupo comunicativo compuesto por canales de televisión y de radio así como una propia discográfica, que responde al nombre de Moval Music.
Dentro del ámbito de la música existen numerosas canciones que han utilizado el término que nos ocupa en sus títulos. Este sería el caso, por ejemplo, de “Justo ahora”, del grupo DVicio.