Definición de irrisorio
Procedente del vocablo latino irrisorius, el adjetivo irrisorio permite calificar a aquello que provoca risa. Lo irrisorio, por lo tanto, causa gracia o es motivo de burla.
El uso más habitual del concepto está vinculado a lo que, de tan pequeño o poco significativo, resulta gracioso ya que no se lo puede tomar en serio. Por ejemplo: “El Gobierno ofreció a los docentes un aumento salarial irrisorio que fue inmediatamente rechazado por los trabajadores”, “Gracias al tipo de cambio, para los europeos es posible comer por un precio irrisorio en nuestro país”, “Las empresas prometieron una semana de promociones pero finalmente solo ofrecieron descuentos irrisorios”.
En el primer caso, el Gobierno pretende resolver un problema relacionado con el presupuesto destinado a la educación con una propuesta que roza el insulto, de manera que los docentes no lo aceptan porque consideran merecer un pago mucho más elevado. Este tipo de decisiones por parte de quienes tienen en sus manos los recursos para el desarrollo de un país son tan lamentables como comunes.
Es necesario señalar que el matiz que vincula el término irrisorio con la risa no debe relacionarse con la alegría, un factor que sí está presente cuando reímos espontáneamente, sino con la ironía: nos burlamos de manera disimulada de lo dicho calificándolo de irrisorio, ya que en lugar de gracia nos causa pena.
El ejemplo de la situación con la que se encuentran algunas personas en el extranjero dado el tipo de cambio también es lamentable para la gente local: mientras que los turistas llevan una vida de reyes con un sueldo de clase media durante sus vacaciones, los lugareños luchan todos los meses para cubrir sus gastos básicos a pesar de trabajar el doble de horas que ellos o más, con muchos menos privilegios a nivel social.
Por último, una semana o un período en el cual las principales tiendas les prometen a sus clientes una serie de descuentos increíbles que finalmente no se materializan, puede ser muy frustrante para estos últimos. Sin embargo, es una práctica bastante común, que a veces se enmascara tras tácticas como el supuesto agotamiento de los productos más tentadores en cuestión de minutos, aunque nunca hayan estado a la venta.
Tomemos el caso de un futbolista que gana 500 000 dólares por mes en su actual equipo. Cuando se acerca la finalización de su contrato, empieza a escuchar ofertas de otros clubes. Así, al reunirse con el presidente de una entidad interesada en sumarlo a su plantel, el directivo le propone un contrato de 15 000 dólares mensuales. Al jugador la oferta le parece irrisoria, ya que la cifra apenas llega al 3% de lo que gana en la actualidad.
Supongamos que los empleados de una compañía de transporte están negociando un aumento de sueldo con los directivos de la firma. En este marco, la empresa ofrece un incremento del 8%; sin embargo, como la inflación del último año fue del 25% en el país, los delegados de los trabajadores rechazan la propuesta calificándola de “irrisoria” y anuncian una huelga como medida de protesta. Con esta iniciativa, los trabajadores pretenden ejercer presión y hacer que la compañía esté forzada a realizar una nueva propuesta salarial, con un aumento mucho más significativo.
Veamos a continuación algunos de los sinónimos más comunes del término irrisorio: cómico, grotesco, ridículo, chusco, insignificante, ínfimo, mínimo, despreciable y minúsculo. Entre sus antónimos, que también nos pueden ayudar a entender su significado en mayor profundidad, están valioso, importante y serio. En definitiva, la reacción de un individuo ante una situación considerada irrisoria es negativa, de frustración, de decepción, pero no de risa en el sentido literal de la palabra.