Definición de inescindible
El adjetivo inescindible se utiliza para calificar a aquello resulta imposible de escindir (fragmentar, partir, separar). Cuando dicha acción no puede realizarse, el elemento en cuestión resulta inescindible.
Por ejemplo: “La persona de Mauricio Macri, con su historia y sus antecedentes, es inescindible de su rol de presidente”, “El éxito de Lionel Messi resulta inescindible del FC Barcelona: no se puede concebir la grandeza del jugador argentino sin el acompañamiento del club catalán”, “Que un personaje semejante haya sido elegido alcalde es inescindible de la decadencia cultural de este pueblo”.
Lo inescindible, por lo tanto, no puede dividirse. Tomemos el caso del cantautor chileno Víctor Jara, asesinado en 1973 por la dictadura de Augusto Pinochet. Los analistas culturales suelen afirmar que su militancia política es inescindible de su obra artística: esto se debe a que Jara difundía su ideología a través de sus canciones. No hay manera, dadas las características de su trabajo, de separar su condición de militante de su faceta como artista.
Es posible sostener, por otra parte, que cuerpo y alma son inescindibles en un ser humano. No existe forma de establecer un corte y de quitar el alma o el espíritu a una persona, así como tampoco se entiende que pueda existir un alma que no pertenezca a un individuo. Por supuesto, en este caso se trata de una temática compleja, de gran profundidad y con derivaciones filosóficas y religiosas.
La cultura, en tanto, es un elemento inescindible de la identidad de una nación. Todo aquello que hace a la cultura, como el idioma, las costumbres y las manifestaciones artísticas, son cuestiones que convierten a una nación en una entidad única y diferente de otras.
En definitiva, podemos afirmar que lo inescindible no puede separarse o dividirse. Sin embargo, resulta curioso que su significado haga alusión a cuestiones simbólicas a pesar de su raíz, escindir, que tiene una presencia bastante extendida en la ciencia. En el ámbito de la medicina, por ejemplo, el término escisión, es decir el sustantivo de esta misma familia, se define como «la extirpación de un órgano o de un tejido».
Dicho en otras palabras, no suele hablarse de un material o de una materia que resulten inescindibles con las herramientas y los conocimientos científicos, sino que se reserva para cuestiones tales como ideas o situaciones. Por lo tanto, mientras que nadie puede negar que sea posible llevar a cabo una escisión en un órgano del cuerpo humano, sí podríamos discutir la naturaleza inescindible de un suceso y su contexto histórico.
Por muchas evidencias que consigamos a través de la investigación de un hecho determinado para intentar probar que es inescindible de otro o del contexto en el que tuvo lugar, otra persona puede dar con resultados diferentes, que lo lleven a elaborar una opinión alejada a la nuestra o incluso opuesta. Esta posibilidad siempre presente de que todo cambie como consecuencia de un nuevo hallazgo es común a casi todos los campos de estudio del ser humano, porque a pesar de haber habitado esta Tierra desde hace miles de años no dejamos de ser una especie joven, que todavía tiene mucho que aprender.
En este marco podríamos decir que nuestros descubrimientos son, muchas veces, inescindibles de nuestros fracasos ya que es a través de ellos que vamos aprendiendo a hacer mejor las cosas, a tomar decisiones más efectivas y a hacer un uso más adecuado de nuestros recursos. De alguna manera, cuando afirmamos que dos cosas son inescindibles, decimos que su vínculo es innegable; sin embargo, es muy difícil conseguir un convencimiento absoluto e incuestionable, por lo cual estas verdades pueden desvanecerse en cualquier momento.