Definición de improcedente
En el latín es donde podemos establecer que se encuentra el origen etimológico del término improcedente que ahora nos ocupa. En concreto, podemos subrayar que se trata de una palabra que es fruto de la suma de dos componentes léxicos:
-El prefijo “im-”, que significa “no”.
-El término “procedentis”, que es el resultado de unir tres elementos: el prefijo “pro-”, que es sinónimo de “a favor”; el verbo “cedere”, que puede traducirse como “andar”, y el sufijo “-ente”, que es equivalente a “agente”.
El adjetivo improcedente permite calificar a lo que no es adecuado, oportuno o correcto. Lo improcedente, por lo tanto, resulta inconveniente o impropio.
Por ejemplo: “Tus quejas son improcedentes, ya que siempre te hemos dado todo lo que hemos podido”, “Creo que es improcedente convocar en este momento a una asamblea de directivos”, “Suspender un entrenamiento faltando tan poco para el inicio del torneo me parece improcedente”.
Numerosas son las palabras que funcionan como sinónimo del término improcedente. Buena muestra de ello son términos tales como inmerecido, inadecuado, impropio, extemporáneo, indigno o inoportuno.
Por el contrario, entre sus antónimos nos topamos con palabras tales como oportuno, procedente, propio, congruente o adecuado.
El concepto de improcedente suele emplearse en el terreno del derecho para aludir a lo que no se ajusta a lo establecido por la ley o a lo estipulado en los procedimientos judiciales. De esta manera, aquello que es improcedente es descartado por los jueces: “El juez consideró improcedente aceptar las filmaciones como pruebas”, “Para el tribunal, la medida cautelar es improcedente”, “El amparo interpuesto por el municipio fue definido como improcedente por los jueces”.
La noción de despido improcedente, por otra parte, refiere a la cesantía laboral que no se ajusta a motivos legales. Esto quiere decir que el despido en cuestión se basa en una causa que la ley no contempla o que no forma parte del contrato acordado entre las partes, o que directamente se trata de un despido sin causa.
Ante un despido improcedente, por lo general el trabajador despedido está habilitado a reclamar una indemnización. Las características de dicho resarcimiento o compensación dependen de la legislación vigente.
Si durante el juicio, el juez considera que la empresa no ha podido demostrar que las causas del despido estaban justificadas o que no se ha cumplido con las exigencias formales concretas determinará que el despido ha sido improcedente. En ese caso, el trabajador podrá volver a ser readmitido en su puesto laboral o bien podrá recibir una indemnización.
Sobre la indemnización hay que exponer que en España se establece que la misma es de 45 días de salario por año trabajado si su contrato es anterior a la fecha de 21 de febrero de 2012 o de 33 días de sueldo por año trabajado si firmó aquel después de la mencionada fecha.