Definición de hipertexto
Para proceder a conocer el significado del término hipertexto, se hace necesario, en primer lugar, descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos destacar que se trata de una palabra que es un neologismo y que es fruto de la suma de dos componentes léxicos de lenguas diferentes:
-El vocablo griego “hyper”, que puede traducirse como “encima de” o “sobre”.
-El sustantivo latino “textus”, que es sinónimo de “obra escrita”.
Asimismo, tenemos que establecer que este término fue acuñado en la década de los años 60, concretamente en 1963, por el filósofo y sociólogo estadounidense Ted Nelson (1937). Este ha pasado ya a la historia por ser un pionero de la tecnología de la información y por crear los términos hipermedia y también hipertexto.
La idea de hipertexto se emplea en el terreno de la informática para nombrar a la estructura de textos, imágenes, videos, audios y otros recursos que se encuentran vinculados entre sí mediante enlaces. Se trata de una herramienta que permite relacionar información de distintas fuentes a través de asociaciones y de conexiones lógicas.
El hipertexto es la base de la navegación en Internet. En este caso, se logra a través de hipervínculos, que son referencias cruzadas entre diversos documentos. Cuando el navegante selecciona un hipervínculo, el navegador (browser) lo dirige hacia el documento que se encuentra enlazado.
Tomemos el caso de una persona que, luego de encender su computadora (ordenador), abre el navegador Chrome. En la barra de direcciones del programa, escribe la dirección digital del diario deportivo español Marca (http://www.marca.com). Una vez que carga la portada, este usuario se interesa por una nota sobre el Real Madrid y realiza un clic con el mouse (ratón) en el título. De esta manera, accede al artículo en cuestión. Esa posibilidad de pasar de un documento (la portada de Marca) a otro (la nota sobre el Real Madrid) está dada por el hipertexto. El lector luego puede ingresar a otros textos relacionados, siempre haciendo uso de la hipertextualidad de la Web.
No menos importante es establecer las principales señas de identidad que tiene un hipertexto. En concreto, es necesario que sea interactivo, que sea multimediático, que se pueda usar multitud de veces, que sea digital y que, además, resulte ser conectivo. Asimismo, no hay que pasar por alto que tiene que ser transitorio y, por supuesto, extensible pues permite extender la lectura a otros textos y contenidos.
Muy en relación con el hipertexto está el término ya mencionado de hipermedia, que viene a hacer mención al conjunto de procedimientos y métodos que se llevan a cabo con el objetivo de componer, diseñar y darle forma a contenido donde estén presentes texto, imágenes y vídeos así como audio o mapas y que permita interactuar con los distintos usuarios.
Se conoce como narración hipertextual, por otra parte, a aquella basada en el hipertexto. Estas obras constan de diferentes textos vinculados por enlaces. Esto permite que la lectura no sea lineal, sino que cada sujeto pueda ir siguiendo su propio camino de acuerdo a los enlaces que elija.