Definición de hemodinamia
El concepto de hemodinamia no forma parte del diccionario que desarrolla la Real Academia Española (RAE). El término que sí aparece es hemodinámica, definido como el estudio de las leyes físicas que se encargan de regular la presión y el flujo de la sangre.
La noción de hemodinamia, de todas formas, aparece en diversos contextos vinculados a la salud. Así se denomina a la técnica que recurre a catéteres para el estudio de patologías cardíacas y del sistema vascular.
La hemodinamia, en este marco, permite analizar la mecánica del corazón y la dinámica sanguínea en los capilares, las arterias y las venas. Los catéteres se introducen en arterias del brazo o de la ingle para conocer en qué estado se encuentran los vasos sanguíneos.
Dichos catéteres llevan un medio de contraste que los vuelve visibles en aparatos radiológicos que emplean rayos X. Así el profesional médico puede observar la morfología del corazón y de los vasos y medir volúmenes y presiones, por ejemplo.
El servicio de hemodinamia de un centro de salud, por lo tanto, se encarga de la aplicación de este tipo de técnicas de diagnóstico o tratamiento. Las cavidades del corazón y las válvulas cardíacas pueden ser estudiadas de este modo, al igual que la actividad eléctrica del órgano.
Cabe destacar que el corazón funciona como una bomba que envía la sangre a todo el cuerpo a través de la arteria aorta, donde a su vez se originan otras arterias. Si las arterias coronarias se bloquean por la acumulación de colesterol en las paredes, el flujo de sangre se reduce y se generan diversos problemas. Una obstrucción completa, de hecho, provoca un infarto agudo. A través de la hemodinamia, es posible descubrir qué arteria se encuentra bloqueada para luego desarrollar el tratamiento adecuado.
En numerosos hospitales de distintos rincones del mundo se cuenta con salas de hemodinamia específicas con el claro objetivo de poder llevar a cabo técnicas y tratamientos en pro de conocer el estado real del corazón de los pacientes. Así, por ejemplo, es habitual que en esos espacios se lleven a cabo acciones o intervenciones tales como las siguientes:
-Angiografías y ventriculografías, que se realizan para saber no solo como funciona el corazón sino también como están las arterias pulmonares y la aorta así como para descubrir si las válvulas están realizando su labor de la forma correcta.
-Cateterismo, que es un proceso invasivo y complejo que permite estudiar y conocer el estado del corazón así como su funcionamiento. En concreto, es muy habitual que este se lleve a cabo en pacientes que han sufrido un infarto ya que permite saber qué daños les ha podido causar esa situación. Es importante saber que el paciente que se somete a esta técnica introduciéndole un catéter a través de la arteria de la ingle, una vez haya acabado, deberá permanecer 24 horas sin mover la pierna.
-Coronariografía, que se trata de una técnica que lo que persigue es conocer si hay obstrucciones o bien estrecheces de algún tipo en las arterias coronarias. De esta manera, se puede saber el estado real del paciente y en el caso de que se le detecten aquellas se le pondrá un tratamiento y se tomarán las medidas adecuadas para que las citadas arterias funcionen de la forma adecuada.
Además de todo lo expuesto, tenemos que subrayar que la coronariografía se considera que es complementaria al cateterismo.