Definición de hacha
El vocablo franco hapja llegó al francés como hache, que en castellano se convirtió en hacha. Así se denomina a una herramienta que consta de un mango y de una hoja de acero cortante.
Por lo general las hachas se utilizan para talar árboles y cortar madera. Sin embargo, a lo largo de la historia también se emplearon como armas, incluso arrojándolas. Por eso existen diferentes tipos de hachas.
A nivel general puede decirse que un hacha consta de un mango de madera –que el usuario debe tomar con una o con las dos manos– y de un filo metálico adherido a dicho mango. La persona debe hacer que el filo impacte con fuerza sobre la superficie que pretende cortar.
Los orígenes del hacha se remontan a tiempos prehistóricos, cuando el hombre sujetaba piedras pulidas o talladas a un palo para crear un arma que le permitía defenderse o atacar a otros humanos o a los animales salvajes. Con el correr de los años, comezaron a elaborar los filos empezaron a base de metal.
Las hachas fabricadas a nivel militar reciben el nombre de hachas de guerra. A diferencia de las hachas comunes que se usan para talar y cortar, estas hachas de guerra cuentan con mango más largo y con una hoja más afilada. El hacha vikinga o danesa y el hacha francisca son dos clases de hachas de guerra.
Se llama tomahawk a un hacha que empleaban aborígenes americanos y colonos europeos varios siglos atrás. Además de usarse en la lucha cuerpo a cuerpo, el hacha tomahawk se empleaba como arma arrojadiza.
La idea de hacha, por otra parte, puede aludir a una vela de cera de gran tamaño con forma de prisma cuadrangular o a una mecha de alquitrán y esparto que no se apaga pese al viento.
Hoy en día, mucha gente usa el hacha en su rutina, tanto en el hogar como en el trabajo, ya que se ha convertido en una herramienta muy útil. Es importante señalar que el hacha no sólo sirve para cortar troncos sino que también puede usarse para podar plantas cuyas ramas sean demasiado gruesas para las tijeras convencionales. A pesar de la practicidad que pueda ofrecer el hacha y de que no se trate de un producto especialmente caro a nivel monetario, debemos conocer las recomendaciones de uso y los riesgos de su manipulación incorrecta, tanto por nuestra seguridad como por la de quienes nos rodean.
Veamos a continuación algunos de los puntos fundamentales que debemos tener en cuenta a la hora de usar un hacha:
* el ángulo recomendado para utilizar un hacha se encuentra entre los 45° y los 60°;
* es importante sujetarla por el mango con firmeza, para evitar que se suelte de forma inesperada;
* la vista debemos fijarla en la zona que estamos intentando cortar para que los golpes sean más eficaces. Nótese que mirar el filo del hacha es una tendencia muy común, así como mirar el extremo de la raqueta al jugar al tenis (en lugar de la pelota), pero en ambos casos se trata de una acción poco recomendada;
* mantener el ritmo de los golpes con el hacha es también fundamental para una mayor eficacia. De este modo reducimos considerablemente el cansancio físico;
* además de empuñar el hacha con firmeza, es importante mantener las manos a una distancia prudente de la zona que impactará con la madera;
* nunca debemos usar un hacha desafilada o en mal estado. Se aconseja revisar la hoja y asegurarse de que se encuentre aferrada al mango con firmeza;
* si alguien nos acompaña durante la tarea de tala o poda, se recomienda indicarle que se ubique a unos diez metros de distancia.