Definición de fiasco
El concepto de fiasco, que procede de la lengua italiana, alude a una frustración o un infortunio. El término suele asociarse una desilusión o un fracaso.
Por ejemplo: “El espectáculo fue un fiasco ya que el cantante apenas estuvo media hora en el escenario”, “Creo que este proyecto inmobiliario será un fiasco”, “La participación del conjunto español en el torneo resultó un fiasco: no ganó ni un partido, empató dos y perdió cuatro”.
Partiendo de su significado podemos exponer que entre los principales sinónimos de fiasco se encuentran términos tales como chasco, decepción, desilusión, revés o incluso bancarrota. Por el contrario, entre sus antónimos están palabras tales como éxito, ilusión, fortuna, triunfo…
Por lo general un hecho se califica como fiasco cuando no cumple con las expectativas que había generado. Si la gente espera algo que luego no se produce o no se logra, es posible hablar de fiasco.
Supongamos que un cantante internacional llega por primera vez a un país. Sus admiradores, que soñaban con esa visita desde hacía años, agotan las entradas de su show en cuestión de minutos. El concierto, sin embargo, termina siendo un fiasco: el artista hace playback y el espectáculo dura menos de una hora. El público, en este marco, se retira decepcionado del estadio.
De la misma manera, es muy habitual que este término se utilice dentro del ámbito deportivo cuando un equipo no consigue alcanzar las metas que sus seguidores esperan. Así, por ejemplo, podemos decir que la temporada 2018-2019 fue un verdadero fiasco para los aficionados del Real Madrid porque a las primeras de cambio el equipo se quedó sin opciones a obtener ningún título. Y es que cayó en Copa del Rey, en la Liga de Campeones e incluso en la Liga.
Un matrimonio, por otra parte, vive un fiasco cuando acude a un restaurante lujoso para celebrar su aniversario. Pese a pagar una fortuna, la comida no solo es desabrida, sino que los comensales hasta encuentran un insecto en uno de los platos. Además la atención del establecimiento deja mucho que desear. Por eso la noche soñada por la pareja finaliza en un fiasco.
Asimismo, en el mundo del cine se utiliza la palabra fiasco para referirse a películas que, por su historia o sus actores e incluso por el presupuesto que tenían detrás, estaban llamadas a convertirse en grandes éxitos en taquilla y que luego no consiguen alcanzar ese triunfo.
En concreto, podemos establecer que entre los filmes que se consideran más fiascos de la historia están algunas tales como “El llanero solitario” (2013), en la que se invirtieron más de 425 millones de dólares y solo consiguió recaudar 260 millones, o “La isla de las cabezas cortadas” (1995), que costó realizarla 115 millones de dólares y solo logró en taquilla 18,5 millones a nivel mundial.
Otros fiascos cinematográficos son “John Carter” (2012), “La caída del Imperio Romano” (1964) o “Sahara” (2005).
“Fiasco”, por último, es el título de una novela del polaco Stanisław Lem que fue lanzada en 1987 y el nombre de una banda estadounidense de rock.