Definición de dermatología
Para conocer el significado del término dermatología se hace necesario, en primer lugar, descubrir el origen etimológico del mismo. En este caso, podemos exponer que se trata de una palabra que deriva del griego, ya que es fruto de la suma de dos componentes de dicha lengua:
-El sustantivo “derma, dermatos”, que puede traducirse como “piel”.
-El elemento compositivo “logía”, que se utiliza para indicar “tratado” o “estudio”.
La dermatología es la especialidad de la medicina centrada en las enfermedades y en las funciones de la piel (el órgano más extenso del cuerpo humano). Al especialista en dermatología se lo conoce como dermatólogo.
Un experto en dermatología está en condiciones de estudiar la estructura de la piel, analizar su funcionamiento y prevenir, diagnosticar y tratar los trastornos que puedan producirse en ella. Cabe destacar que los inconvenientes de la piel pueden generarse directamente en este tegumento o ser una consecuencia de algún tipo de padecimiento interno.
A todo lo expuesto hay que añadir que la dermatología, tal y como la entendemos en la actualidad, se originó hace unos 110 años. Y es que comenzó a establecerse como una especialidad médica en la Europa de finales del siglo XIX.
De ahí que en ese momento empezaran a surgir tres importantes escuelas centradas en esa ciencia y en el estudio de la piel. Nos estamos refiriendo a la del Hospital General de Viena, a la del Hospital San Luis de París y a la de Londres.
No obstante, no podemos pasar por alto que existen distintos documentos que vienen a dejar constancia de que ya en la Grecia Clásica se recogían y estudiaban ya las primeras enfermedades dermatológicas. Es más, existen documentos de la Antigua Roma donde queda patente que ya estaba tomando conciencia de patologías relacionadas con la piel tales como la sarna, el herpes zóster, la tiña o la lepra, entre otras muchas.
Aunque la formación varía en cada país, por lo general un dermatólogo es un licenciado en Medicina que luego se especializó en dermatología. Esto le permite al profesional contar con conocimientos de endocrinología, neurología y otras cuestiones que son necesarias para conocer la piel en profundidad.
Se denomina dermatología cosmética, por otra parte, a la especialidad de la dermatología centrada en la estética. En este caso, la finalidad es tratar las imperfecciones que afectan la piel (cicatrices, cambios de color, etc.).
Los distintos tipos de dermatitis, la lepra, el acné, la urticaria, el melanoma y el vitiligo son algunas de las enfermedades y los trastornos que provocan inconvenientes en la piel y que pueden ser diagnosticados, prevenidos y/o tratados por la dermatología.
Es importante mencionar a las lesiones elementales que se registran en la piel se las puede dividir en lesiones primarias y lesiones secundarias. Entre las lesiones primarias aparecen los quistes, los abscesos, las ampollas, las ronchas, las pústulas y las vesículas. En cuanto a las lesiones secundarias, podemos nombrar a las úlceras, las escaras y las costras.
Asimismo, no podemos olvidarnos de la cirugía dermatológica que es la parte de la Dermatología que se encarga de utilizar distintas técnicas quirúrgicas para resolver problemas de la piel.