Definición de cromatografía
La cromatografía es un método químico que permite separar los componentes que integran una mezcla, distribuyéndolos en dos fases. Una de las fases es estacionaria (sus elementos se encuentran en reposo), mientras que la otra es móvil (sus elementos se mueven).
Esta técnica posibilita la separación de los componentes para su posterior análisis. A nivel general, lo que se hace es mover la mezcla sobre un soporte, haciendo que las sustancias se ubiquen en distintos lugares. Las sustancias que se mantienen en movimiento forman la fase móvil, mientras que aquellas que se van separando integran la fase estacionaria.
Además de propiciar la separación de los componentes, la cromatografía también se utiliza para la medición de la proporción de cada sustancia que integra la mezcla.
Según sus características, la cromatografía puede clasificarse de distintos modos. La cromatografía en columna, por ejemplo, permite separar líquidos y sólidos, gases y sólidos o gases y líquidos con la fase estacionaria situada en una columna que puede tener diversos diámetros y longitudes. La cromatografía plana, en tanto, se lleva a cabo sobre un material sólido, donde se ubica la fase estacionaria.
Podemos ver cómo funciona la cromatografía cuando se derrama vino tino sobre un mantel de color blanco. Es habitual que la mancha que se genera no tenga una tonalidad uniforme: por el contrario, hay sectores rojizos, otros azulados, etc. Esto se debe a que los pigmentos que forman parte del vino experimentan una separación al entrar en contacto con la tela del mantel.
Una prueba toxicológica y la medición del nivel de contaminación del agua son dos procedimientos que se llevan a cabo haciendo uso de la cromatografía.