Definición de contralor
El término contralor tiene diferentes acepciones según la región. En el continente americano, se denomina contralor al funcionario que se dedica a revisar los gastos y las cuentas oficiales.
Con origen etimológico en el vocablo francés contrôleur, un contralor es un auditor. Esta persona, designada por una consultora o por una autoridad, trabaja inspeccionando y evaluando los resultados de la gestión financiera de una entidad.
El contralor se encarga de presentar un informe sobre los balances, pudiendo realizar sugerencias para optimizar la administración. En varios países, en tanto, existe la Contraloría General de la República para fiscalizar el cumplimiento de los procesos vinculados al presupuesto y a la administración del Estado.
En Chile, por ejemplo, el contralor general es nombrado por el presidente con el acuerdo del Senado. El contralor general, que debe ser abogado y cumplir con ciertos requisitos, ejerce sus funciones durante ocho años.
El contralor general de Perú, en tanto, tiene un mandato de siete años. Su responsabilidad consiste en dirigir la supervisión de la gestión y del uso de los bienes y los recursos estatales.
Además, en algunas naciones, se llama contralor al inspector o veedor que controla diversas cuestiones. Por eso se habla de contralor ambiental, contralor de alimentos, etc. En cada caso, este profesional posee distintas atribuciones y debe llevar a cabo varios tipos de evaluaciones.
La idea de contralor también aparece en el ámbito militar. Tiempo atrás, se llamaba contralor al interventor que estaba a cargo de los hospitales del ejército y del cuerpo de artillería, examinando los libros de cuentas.
En la actualidad, el rol del contralor también es de gran importancia en el sector privado, en las empresas. Entre las tareas que se espera que lleve a cabo en su día a día están las siguientes, que son todas aquellas acciones que se orienten hacia la gestión de la compañía:
* propuesta de mecanismos de control para mejorar el rendimiento de la empresa;
* optimización del funcionamiento interno y sus muchos procesos;
* supervisión y evaluación de quienes implementan las políticas y los protocolos internos;
* volver el planeamiento de la estrategia corporativa más fácil para los directores de la compañía.
En los últimos tiempos, este perfil ha atravesado diversos cambios, que lo han vuelto cada vez más importante dentro de la empresa. En sus orígenes, se enfocaba sobre todo en la elaboración de indicadores de gestión, pero en la actualidad su desempeño es fundamental para las estrategias de mercado e influye directamente en las decisiones de los empleados de más alto rango.
Con respecto a la formación del contralor, se suele exigir un título universitario superior, a ser posible con un Máster. También se pide experiencia previa en puestos relacionados con la auditoría interna o el control de gestión. Esto no es suficiente, ya que hay una lista de competencias técnicas que se espera sea capaz de llevar a cabo con éxito, entre las que destacan la contabilidad analítica, el derecho fiscal y el análisis de costos.
También hay otras, complementarias, en las cuales debería tener un nivel alto de desempeño ya que son fundamentales para que su trabajo genere un impacto favorable profundo en la empresa:
* análisis y toma de decisiones: necesario para las acciones que se emprenden a partir del análisis de los datos;
* comunicación y capacidad para negociar: cuando persigue condiciones financieras mejores para su compañía;
* liderazgo: es una competencia absolutamente necesaria para el contralor que debe trabajar al frente de un equipo;
* optimización: debe administrar los recursos de la empresa para trazar las mejores estrategias posibles;
* trabajo en equipo: dado que en sus tareas es común la interacción con miembros de otros departamentos, debe trabajar con apertura y flexibilidad para potenciar sus propias habilidades con las de sus compañeros.